De frente a su teléfono, pero de espaldas al espejo del baño. Así se la ve a Candelaria Tinelli en la última selfie que publicó en el feed de su cuenta de Instagram. Al borde de la censura, la joven influencer mostró su figura con una malla enteriza, violeta y cavada, en donde resaltan sus glúteos y sus piernas completamente tatuados.
“Mis amadas cicatrices. A veces me olvido de mis tatuajes y cuando los veo y recuerdo cada experiencia en cada trazo, vuelvo a enamorarme de ellos”, escribió y acompañó con un emoji de corazón violeta quien nació del vínculo entre Marcelo Tinelli y Soledad Aquino.
La foto obtuvo rápidamente muchos likes y comentarios, entre los que se destacó el saludo de su novio, Coti Sorokin.
“Mi beba hermosa”, escribió el músico y compositor de éxitos como “Color Esperanza” y “Nada de esto fue un error”. Cande likeó el comentario y replicó: “Amor, volvé rápido. Gracias”. Y cerró con un corazón rojo.
La ansiedad de Tinelli tiene que ver con que el cantante pasó el fin de semana de gira junto a su grupo: se presentó en Rafaela y Rosario (ciudades de Santa Fe) y, también, en La Plata. En los próximos días tendrá shows en Pilar, Escobar, Cañada de Gómez, Marcos Juárez, Córdoba Capital y Montevideo, la capital de Uruguay.
Oficializada en noviembre del año pasado, la relación amorosa entre Candelaria Tinelli y Coti Sorokin sigue marchando a paso firme: cada vez que pueden se muestran muy unidos y lo reflejan en sus redes sociales. A principios de agosto, la hija de Tinelli estuvo junto al cantante durante su recital en el Teatro Coliseo y aprovecharon la oportunidad para posar muy sonrientes ante las cámaras presentes.
Ese show, con entradas agotadas, también contó la presencia con algunos familiares y amigos de la pareja, como por ejemplo Micaela, la hermana mayor de Cande, que asistió con su novio, el defensor de Boca Juniors Lisandro Licha López. Incluso, en un momento, Coti tomó el micrófono y pidió la palabra para dedicarle el recital a su novia y a la madre de esta, Soledad Aquino, quien hacía poco que había obtenido su alta médica a dos meses de haber recibido un trasplante de hígado.
Días después, la pareja siguió celebrando su buen momento y disfrutaron de los paisajes y los manjares que les ofreció España. Es que Coti realizó una serie de shows por el Viejos Continente, incluido uno en el festival internacional de Alcalá de los Gazules (Cádiz). Y su novia, además de seguirlo en este recorrido, aprovechó la ocasión para disfrutar de las increíbles playas europeas, de las comidas típicas y también de la flora del lugar.
Como siempre, muy activa en su Instagram, Cande fue compartiendo postales de lo que van comiendo, lo que van bebiendo -en las últimas horas, marcaron como posta un bar de La Coruña-, las flores que le llaman la atención, sus llamativos outfits -con fotos en la que se ve a la pareja muy divertida mostrando su ropa- y, también, el momento del relax en alguna playa.
En una de las fotos que compartió en su feed, se la vio a Cande con una bikini color crudo recostada sobre un pareo colorido y con un diseño caleidoscópico. Y se permitió una broma en alusión a sus incontables tatuajes: “El poder del camuflaje”, escribió en el epígrafe haciendo alusión a cómo su piel se confunde con el estampado de la tela.
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