Con un código muy personal para el humor y con el histrionismo propio de su oficio, Darío Barassi se convirtió en uno de los conductores mas destacados de la pantalla chica y un fenómeno de las redes sociales. En las tardes de El Trece, el actor supo ponerle su impronta a un formato probado como el de 100 argentinos dicen y cada programa excede a la dinámica original de buscar respuestas comunes a los temas más diversos. La producción, los asistentes y los propios participantes entienden el juego, salen del molde y se producen situaciones desopilantes que a veces se van un poco de las manos hasta que vuelven a retomar el eje.
Esto ocurrió durante la tarde del miércoles, en el enfrentamiento entre los Kempner y las Oleszczuk. Como es habitual, las respectivas capitanas, Solange y Sofía, fueron las primeras en pasar al frente. La consigna en cuestión era “¿qué hace un jugador de fútbol antes de patear un penal?”. Sofía fue más rápida con el pulsador y dijo “corren”, una respuesta que habían dado 17 argentinos, y que resultó la tercera más común.
Sofía tenía la oportunidad de superarla. “Reza. Rezar. Así, el cosito”, respondió la joven, algo nerviosa y haciendo una interpretación libre de la señal de la cruz. Lookeado con un traje beige y un pelo bicolor inspirado en Mau y Ricky, los jurados de La Voz Argentina, el conductor se sorprendió por la respuesta “¿Menos iglesia tenés que yo cuello, no? ¿El cosito le decís a persignarse?”, la encaró simulando un enojo. “No lo sé”, atinó a responder la participante. “¿El cosito?” insistió Barassi mirando a cámara, cuando un ruido lo paralizó. Giró la vista hacia la joven, que se tomaba el rostro tentada de risa, y cada tanto volvía a emitir el indescifrable sonido
Incrédulo, el conductor se escondió detrás de la escenografía para tomar distancia y tratar de entender qué es lo que estaba ocurriendo. “Te juro que se ríe así”, se escuchó desde el equipo de Solange. “No paramos más, no frena”, añadieron, mientras Barassi atinó a simular un duelo de sonidos, mientras de a poco retomaba su lugar en el centro del estudio. “¿Qué es esto? ¿Sos hija de un ave?”, le preguntó con un susurro. “No sé, perdón”, respondió la joven, que cada vez que se tentaba, volvían los sonidos cada vez más fuertes.
Al fin y al cabo, “rezar” era la respuesta más popular, por lo que Barassi pasó a jugar con los Kempner y aprovechó para interrogarlos acerca de la particular risa de su capitana. Pero más se hablaba del tema, más Solange se reía, hasta que el propio conductor cayó en la trampa y no pudo evitar tentarse. De repente, una canción religiosa empezó a sonar en el estudio y vio la posibilidad de realizar un exorcismo. “Saca el demonio de tu cuerpo. Sácalo”. Luego, llevó su inquietud al equipo rival. “¿Vieron la risa que tiene esa piba, las asusta? Como que me estoy riendo, pero por dentro estoy rezando”.
A esa altura, las redes ya se habían hecho eco de lo sucedido en 100 argentinos dicen y “Barassi” era una vez más tendencia, dando muestras del alcance del programa. El conductor no ser quiso quedar afuera del asunto y dejó su propia marca en la red del pajarito. “Mi look Mau y Ricky y esa risa. Los amo a todos”, escribió replicando una publicación del video, mencionando a los coachs de La Voz. En las respuestas, el público agradecía por un momento, otro más, de carcajadas sin parar. Por más insólitas que sean.
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