Florencia de la V se define a sí misma como una luchadora. A los18 años comenzó a trabajar en el mundo del espectáculo y logró realizar una carrera exitosa. En el plano personal, se casó con Pablo Goycochea y tuvo dos hijos, Paul e Isabella, gracias al método de subrogación de vientre. Aunque su historia parece un cuento de hadas, en realidad no lo es ya que debió soportar todo tipo de críticas y también destrato.
Este lunes, la actriz publicó un extenso mensaje en sus redes sociales porque sus mellizos cumplieron diez años y aprovechó para contar cómo transitó la maternidad: sus miedos y los prejuicios que debió afrontar al formar su propia familia. “Fueron años difíciles y hoy puedo decir que me hicieron mucho daño”, explicó en su cuenta de Instagram.
Luego, en el ciclo A la tarde se emocionó hasta las lágrimas al recordar su lucha por tener hijos: “Nunca imaginé que iba a poder cumplir el sueño de ser madre”. Y reconoció: “Diez años atrás yo tenía muchos miedos. Era otra Argentina, con otra mentalidad. Me dijeron cosas espantosas, hirientes por querer ser madre. Se peleaban por ver quién era más hiriente conmigo”.
Además, la panelista del ciclo de América reconoció que muchas veces pensaba si estaba haciendo bien al querer traer a sus mellizos al mundo porque ellos “iban a tener que luchar contra todos esos prejuicios”. Y aseguró que en la televisión fue muy cuestionada: “Nadie hacía la salvedad de decir que eran crueles lo que hacían con una persona que tenía una identidad diferente y estaba tomando la decisión de su vida de ser mamá”.
En diálogo con la conductora Karina Mazzocco, la humorista señaló que vivimos en una “cultura patriarcal que genera esa división tan grande”. También, explicó que intentó no prestar atención a los comentarios negativos, pero fue imposible lograrlo. “Quería que nada les hiciera daño. Pero después de tenerlos siguió, no fue un debate del momento”, manifestó Florencia.
“Hablaban de mí en masculino, conductoras y conductores de televisión. A mí me preocupaba que no se pongan en el lugar del otro. Esa violencia estaba naturalizada”, recordó la panelista. Y afirmó que el conductor de Bendita era uno de los que realizaba comentarios discriminatorios, pero con el paso del tiempo hubo un cambio. “Hoy Beto Casella y otros ven la vida de otra manera, y eso lo celebro. Antes no sucedía. Hoy está el acento y está claro que esas cosas no se pueden hacer”, agregó.
“Era una Argentina que ya tenía las leyes para empezar a cambiar. Pero yo fui muy juzgada. Me decían que había perdido el humor, que me había convertido en otra persona. A mí me dolía profundamente lo que decían”, afirmó De la V. Por último, admitió que le molestaba la comparación con Lizy Tagliani: “Ella se burlaba de ella misma y decían que todas las travestis tenían que ser así para poder ser aceptadas. Esa no es la vida. Algunas son así y otras son diferentes. Yo trataba de cuidar a mis hijos y me agredían”.
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