La fama y el reconocimiento a veces pueden llegar de casualidad. Sobrados son los casos de estrellas del cine que fueron tocados por la varita mágica y de un día al otro lograron posicionarse como verdaderos actores. No es este el caso de Lior Raz, que viene trabajando desde hace tiempo y recién pudo darse a conocer cuando protagonizó la gran ficción israelí Fauda.
Esta serie hablada en árabe y en hebreo significó el espaldarazo necesario para que Raz saltara al estrellato. Fauda (Caos, en árabe) se mete de lleno en el conflicto entre palestinos, israelíes y la calamidad del terrorismo. De esto sabe mucho Lior, que sufrió los estragos de la violencia de los fanáticos: su novia de la juventud, llamada Iris Azulay, fue una de las tantas víctimas fatales del terrorismo.
El asesino era un palestino que había llegado desde Belén. A diferencia de lo sucede con su personaje en Hit & Run, la nueva serie que protagoniza, Raz estuvo lejos de tener una actitud revanchista. “Me dije a mí mismo: ‘Supongamos que Iris murió en un accidente en la carretera y no en un ataque terrorista, ¿mataría a todos los conductores ahora?’. Ese fue el mecanismo que probablemente mantuvo mi ética en mi servicio militar en los territorios palestinos”, aseguraría tiempo después, en una entrevista.
Años más tarde de esa tragedia, Lior terminaría vinculándose de una manera muy curiosa con Hollywood. Pero primero deberemos retrotraernos a la historia personal de Raz, quien nació hace 49 años en un asentamiento judío en Cisjordania, fruto de la unión de un padre iraquí y madre argelina. A los 18 años se enlistó en el servicio militar obligatorio y formó parte de las fuerzas especiales Sayeret Duvdevan, que tienen la misión de la lucha antiterrorista en Palestina. Es por eso que todo lo vinculado a la cultura arábica es algo con lo que Raz siempre estuvo familiarizado.
Con la formación militar terminada, y buscando dejar atrás tanto dolor por la muerte de Iris, Lior decidió viajar a Estados Unidos para probar suerte. Allí dio sus primeros pasos como guardaespaldas nada menos que de Arnold Schwarzenegger y su esposa, Maria Schriver. Lior afirma que allí conoció el glamour verdadero del cine, despertando algo en su interior.
El destino estaba marcado para este hombre que decidió volver a su tierra natal para estudiar en la escuela de interpretación Nissan Nativ. Luego de algunas incursiones en series de bajo presupuesto, a Raz se le prendió la lamparita: vinculó toda su formación y sus orígenes para contar una nueva historia. Fue así como hace siete años se unió a Avi Issacharoff, un periodista que se especializa en el mundo árabe para pensar una ficción novedosa. Juntos escribieron el guión de lo que luego sería Fauda.
Luego de varios intentos fallidos en diversas cadenas de televisión para que pudieran financiar el proyecto, consiguieron finalmente que la plataforma Yes fuera quien apostara por la historia. Fauda le abriría a Lior las puertas de la industria.
Mientras se filma la cuarta temporada de Fauda, Raz estrenó en Netflix una nueva serie. Se trata de Hit & Run, que protagoniza y también produce. La ficción cuenta la historia de un guía turístico de Tel Aviv casado con una bailarina, Danielle (Kaelen Ohm) y padre de una niña fruto de un matrimonio anterior. La vida de este hombre cambia de un día para el otro cuando su mujer muere al ser atropellada por un auto que se da a la fuga.
Hit & Run tuvo un gran recibimiento en todo el mundo y logró ocupar los primeros puestos de las series más vistas a pocos días de su estreno en diversos países.
Hoy, Lior disfruta del éxito de esta nueva historia al lado de su esposa, Meital Barda, y los cuatro hijos que tuvieron juntos. Un actor que supo encontrara en su propio pasado una historia para contarle al mundo, que luego le cambiaría la vida.
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