Avanzan los knockouts en la voz y a medida que los equipos se van completando, las decisiones se vuelven cada vez más difíciles para Ricardo Montaner, Soledad Pastorutti, Mau y Ricky y Lali Espósito, los jurados devenidos en coaches. En esta etapa, cada uno de ellos selecciona a dos participantes de su equipo para que se enfrenten en un escenario con forma de ring. Al finalizar ambas actuaciones, deben elegir con cuál quedarse.
Hay veces, las menos, que la decisión es más sencilla, ya sean por las propias aptitudes de los concursantes o por la diferencia entre las performances a la hora de interpretar. Pero la mayoría de los casos se hace muy complicado optar por uno u otro. Son etapas avanzadas de la competencia, el tamiz de la selección se vuelve cada vez más fino y los equipos terminan conformándose por detalles mínimos.
Soledad Pastorutti se enfrentó a este problema en la gala de este jueves, aunque, confesión de partes mediante, la de Arequito tuvo mucho que ver en el tema. Todo ocurrió en el primer knockout, que enfrentó a Patricio Mai y Lautaro Cabrera. El primero interpretó “Against all odds”, un clásico lento ochentoso de Phil Collins. El segundo, fue por “La ciudad de la furia”, uno de los himnos del rock argentino. Las interpretaciones honraron a las originales, lo que a esa altura era todo un problema para la persona que tenía que decidir.
“Impresionante. ¿Qué se hace en un caso así? Es imposible”, señaló el conductor Marley antes de darle pie a los coachs. “¿Para qué los juntaste, Soledad?”, gritaba Lali a modo de queja y revoleando el moño de su vestido, mientras la intérprete de “A don Ata”, juntaba las manos sobre su boca, en un gesto claro de que estaba en problemas. “Los dos son dos fenómenos”, sentenció Montaner y puso en palabras la duda que tenían todos en el estudio: “Yo no sé la línea de razón por qué juntaste a estos dos”, reflexionó mirando a su compañera.
Lejos de arrepentirse, la de Arequito justificó su decisión y levantó la apuesta. “A mí me gusta que los knockouts sean así. Tiene que haber sangre”, se defendió La Sole. “Yo la entiendo”, concedió Lali, pero Montaner insistía en su postura. “El problema es que la sangre te va dejando sin...”. “Pueden robar. Está permitido robar”, lo interrumpió la cantante, dando por cerrada de su parte la discusión.
“En principio voy a felicitarlos a los dos: no hicieron un show nacional ni internacional, hicieron un show espacial”, afirmó Soledad antes de dar a conocer su decisión. “Esto es un empate. Estoy en un problema gravísimo”, reconoció en algo que se pareció a un pensamiento en voz alta. Pero las reglas son las reglas, y tenía que optar. Y optó por Patricio, que de esta manera se aseguró uno de los ocho lugares del Team Sole para los playoffs. Sin embargo, como podía imaginarse por lo vivido en el estudio, Lautaro no iba a estar mucho tiempo afuera del certamen
“¿Lautaro, tu tienes ganas de ganar?”, preguntó Ricky Montaner en medio de la despedida. “Siempre”, atinó a responder el joven. Pero sin dejarlo terminar, el hermano de Mau apretó con decisión el botón que significaba un robo. Enseguida, recibió el abrazo de La Sole, con una mezcla de alegría y alivio.
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