Carlitos Balá formó parte de la vida de varias generaciones de argentinos y pocos artistas son tan queridos como él. Un nombre que nos lleva a la infancia, a la nostalgia, a la felicidad. Es artista, que hizo de “sumbudrule” y del “chupetómetro”, y del gusto de la sal un código único con el público, hoy cumple 96 años. Y pasa el día rodeado por sus afectos más íntimos y abrazado por el amor de aquellos niños y niñas, que hoy son hombres y mujeres, y que lo recuerdan con una sonrisa.
“Hoy el día lo pasa en familia, con los más íntimos, por un tema de razones obvias de pandemia, cuidándonos con todos los protocolos”, cuenta su nieta, Laura Gelfi, a Teleshow. “Es un cumpleaños lleno de comida, como a él le gusta, rica comida árabe, picada, todas cosas riquísimas”, agregó la joven. Durante todo el día, el actor recibió el afecto que cosechó de hombres y mujeres de varias generaciones para las cuales, su nombre siempre será sinónimo de infancia.
“El está muy contento, le estamos leyendo constantemente los mensajes de la gente, que es mucho lo que le manda y es muy emocionante”, explica Laura. “Cada año que pasa es más lo que la gente le manda, lo que lo quiere, estamos recibiendo muchos mensajes y regalos y vinimos con mi mamá desde la mañana para ayudar porque es tremendo lo que nos mandan”, señaló la nieta, agradecida y emocionada. De acuerdo con su relato, Carlitos se encuentra muy bien de salud. “Nosotros lo visitamos mucho, ve películas, tele, lee los mensajes de sus seguidores y se cuida mucho”, señaló
Además, el inventor del chupetómetro y el “sumbudrule”, tiene otros motivos para celebrar en este cumpleaños. Es que la discográfica Sony anunció el lanzamiento de dos de sus discos en sus plataformas digitales. Se trata de El especial de Balá -publicado en 1974- y Un paseo por la Boca (1978). El artista lo comunicó en su cuenta de Facebook, en la que se dirige a sus “Queridos Balacitos”.
El cronograma de edición plantea publicar en los discos de a pares. En septiembre llegarán Ganó la bandera (1978) y Cantemos en familia (1980); en octubre será el turno de Felicidad empieza con fe (1981) y Tres minutitos de alegría (1981), en una edición especial por su 40° Aniversario. En noviembre, las plataformas recibirán al compilado El show de Carlitos Balá (1979) y Mi corazón late feliz (1982) y en diciembre los emblemáticos Y qué gusto tiene la sal (1977).
La creación de dos éxitos
La frase más famosa, en tiempos donde el “boca a boca” era la única manera de “viralizar” era cuando preguntaba ¡¡¿Qué gusto tiene la sal?!! y todos los chicos contestaban gritando: ¡¡¡Salaaaado!!! La idea nació en 1969, en una tarde tranquila en Mar del Plata. Un chico lo miraba atento y Balá haciendo como que no lo veía preguntó varias veces en voz alta: “¡El mar! ¿Qué gusto tendrá el mar?” El nene permanecía silencioso y el siguió: “Ahhh, el mar tiene gusto a sal. Pero, ¿qué gusto tiene la sal?” Y antes de salir corriendo el chico le respondió. “¡Pero, qué gusto va a tener la sal! ¡Salada!” Y así nació un éxito que atravesó cuatro generaciones.
Angueto, el perro invisible surgió en una tienda en Disney. Balá siempre atento encontró una correa rígida y se le ocurrió el chiste del perro. “Un turista que estaba al lado se asustó y me gustó la idea porque pensé que podía ser un buen personaje. Cuando llegué a Buenos Aires, mandé hacer una correa similar y le puse Angueto por mi hija Laura. Cuando era chica, con mi mujer le decíamos “Anguetita”, una palabra inventada”.
SEGUIR LEYENDO: