Las vacaciones de invierno suelen ser una excusa ideal para cortar el trajín laboral y recargar las pilas para lo que resta del año. Esa fue la opción que tomaron el periodista Rodrigo Lussich, uno de los conductores de Intrusos, y su novio, Juan Pablo Kildoff, quienes pasan unos días en Bariloche, uno de los destinos más elegidos por los turistas en esta época. Según puede verse en sus redes sociales, la pareja reparte su tiempo entre un poco de descanso, algo de turismo aventura y, sobre todo, mucha diversión.
El periodista utilizó su cuenta de Instagram para mostrar un álbum del viaje. Con días soleados, ideales para entibiar un poco la ola polar que asoló a buena parte del país, Rodrigo y Juan Pablo posaron en diferentes paisajes de la bella ciudad rionegrina. Bien abrigados, con camperas, bufandas y gorros de lana, se los vio recorriendo el Circuito Chico, posando a orillas de los lagos Moreno y Nahuel Huapi y navegando las aguas patagónicas.
Pero no solo se los vio por tierra y por agua: los novios también se le animaron al aire y los cielos y abordaron el teleférico rumbo al Cerro Otto. Desde las alturas, el periodista uruguayo registró una panorámica que combinaba el verde de los bosques, el celeste cristalino de las aguas y el blanco que se confundía entre los picos nevados y las nubes.
Con el hashtag #modo #vacaciones el creador de Los escandalones dio rienda a todo su espíritu lúdico posando en la piscina climatizada del histórico Hotel Llao Llao, y generando un divertido ida y vuelta entre sus seguidores, que les pedían que se abrigara. Más acorde a lo que sugería el paisaje, también posaron abrigadísimos sobre la nieve, con la sonrisa de la felicidad plena en primer plano.
Rodrigo y Juan Pablo están en pareja hace dos años. Nada parecían tener en común, pero la regla de los seis grados de separación hizo lo suyo y se conocieron en un cumpleaños de un amigo en común. En un mano a mano con Teleshow, recordaron aquel momento que cambió sus vidas: “Pegamos una mirada fulminante y empezamos a hablar por Instagram”, dijo Lussich y Juan agregó: “Yo lo conocía pero no veía un programa para verlo a él, ¡ahora sí!”, bromeó y el periodista aseguró que no estaría ni con un fanático ni con alguien cholulo: “Con el tiempo tenés un radar y ya te das cuenta, capaz salís con alguien y en lugar de hablar de la vida, te pregunta cómo es Moria”.
Después de dos semanas de chat, finalmente se encontraron y el flechazo fue instantáneo. El conductor pasó a buscar a su ahora pareja a Lomas para ir a cenar: “Cuando subió al auto sentimos una impresión, esas cosas que no sabés si quedarte o salir corriendo y ahí, cuando te querés quedar, decís ‘acá puede haber algo’, siempre digo que la intuición es un sexto sentido, lo sentís, no se puede explicar con palabras, sentís que puede haber algo y acá estamos”.
En una escapada de fin de semana Rodrigo vio la oportunidad y de manera espontánea le propuso casamiento a Juan Pablo: “¡Me sorprendió! Le dije que sí y empezamos a soñar con la canción con la que entraríamos, con las fotos, la ropa, la gente, fue todo muy lindo”. Para Lussich “casarse es algo que no tiene que perderse nadie como momento en la vida. Es un ritual que no tiene precio” e hizo hincapié en que “es un derecho adquirido”. Los planes iniciales quedaron postergados por la pandemia. Pero el amor, se sabe, no necesita de papeles ni firmas.
SEGUIR LEYENDO: