Cecilia Roth pasó por Los Mammones y el show nocturno de América se pareció más a una gala cinematográfica que a un estudio de televisión. La actriz repasó su extensa y reconocida trayectoria, que cuenta premios tales como el Oscar y el Goya y un sinfín de anécdotas con algunos de los artistas más reconocidos de Argentina y España. Entre ellos, claro está, Fito Páez, su pareja durante diez años.
El rosarino se refirió en muchas oportunidades a su relación con la actriz de Todo sobre mi madre. Lo hizo en forma de canciones, ya que inspiró El amor después del amor, uno de los discos más importantes de la historia del rock argentino. También en modo de anecdotario, cuando en el concierto aniversario de ese disco, reveló la historia detrás de “Un vestido y un amor”, el tema símbolo de su romance, una historia oficial que la actriz iba a cuestionar.
Para empezar, Cecilia contó que la primera vez que vio a Páez fue en un restaurante y ella estaba acompañada por su novio Gonzalo, que pronto se convertiría en su marido: “Lo vi salir de la cocina muy intenso. Ya lo había visto en una entrevista con (Jorge) Guinzburg y me había encantado cómo había hablado de Fabi (Cantilo). Estaban separados, pero había hablado con un feminismo, que me pareció que era una buena persona”, señaló.
Algo pasó con la actriz y con aquel “flaquito de pelo largo y una zapatilla de cada color”, pero no sabía qué era .”Me interesaba”, resumió. Luego coincidieron en un cumpleaños y la química seguía intacta, pero no lo suficiente para alterar los planes de casamiento. Hasta que nueve meses después de la boda, coincidieron en una fiesta de disfraces en José Ignacio.
Cecilia contó que ella se disfrazó de deshollinadora y él... de Fito Páez. Charlaron, rieron, bebieron. La actriz fue a llenar su copa y él se tentó. “¿No me traés una a mí, nena?” “Me gustó y era un quilombo, yo estaba recontra casada. Era algo que pasa cuando te enamorás. Es complejo, pero sentí que quería estar con esa persona”. A la mañana siguiente, sonó el teléfono y del otro lado estaba Fito cantando el bolero “Algo contigo”. La invitó al cine, y el resto es historia más o menos conocida.
Fito y Cecilia se separaron en 2002. Estuvieron juntos diez años y son padres adoptivos de Martín. Guardan una excelente relación, incluso con Gonzalo, el primer marido de Cecilia. Pero la actriz marcó una diferencia, en la anécdota que precede a “Un vestido y un amor”, la serenata que resume su historia de amor: “Es el cuento de él que se hizo oficial”, afirmó.
El conductor Jey Mammon resumió la historia. Luego de una discusión, le dijiste ‘andate de casa’, te fuiste a bañar. Y cuando saliste de la ducha había hecho la canción. Es hermoso”, opinó Jey, pero Roth tenía una objeción: “Eso es lo que recuerda él, que no sé si siempre recuerda bien”. El conductor pidió conocer el lado b de la canción, pero la actriz se mantuvo inflexible: “Ni pienso. Para mí, no tuvo que ver con una pelea, pero no quiero discutir con Fito. Si él dice que es así, es así, porque él es el rey”, cerró.
Durante la entrevista, Cecilia también habló de su infancia. Recordó los veranos en Villa Gesell, “donde todavía se podía andar en patas por la 3″ y su familia intelectual y bohemia, con su padre Abrasha Rotenberg, socio de Jacobo Timerman en La Opinión; y su madre, la recordada Dina Rot, fallecida el año pasado. contó cuando la familia debió exiliarse en España, donde ella desarrolló su carrera como actriz y su hermano Ariel la suya como músico, en bandas como Tequila y Los Rodríguez
En el video que compendia su carrera, donde se vio su trabajo en “No toquen a la nena”, “Martín (Hache)” o Historia de un clan, y la emoción alcanzó a todos en el estudio, incluida a la protagonista principal: “No me doy mucha cuenta, es mi vida que la estoy viviendo y transitando. Ahora, con la pandemia, aprendo de disfrutar de momento en momento, además estamos viviendo un tiempo distópico”, afirmó sobre una etapa que la encontró conviviendo con su hijo Martín y su novia Emilia: “Nos está yendo bien, no era fácil”, celebró y se despidió con el conductor al piano cantando “Algo contigo”, conectando con la mañana después de aquella fiesta de disfraces.
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