A mediados de junio, un video de Lía Crucet publicado en su cuenta de Twitter encendió las alarmas de preocupación entre sus fans. La artista de 68 años lucía muy desmejorada físicamente luego de haber permanecido varios meses internada en una clínica de salud mental de Mar del Plata. De inmediato, se destapó una interna familiar en torno a la querida intérprete de música tropical, que sigue sumando capítulos.
De un lado, se encuentra Tony Salatino, esposo y manager de la intérprete de “Qué bello” y del otro la hija de la cantante, Karina Crucet. “Desde que Lía está con internación domiciliaria, su hija llamó una vez sola para ver cómo estaba la madre y me anda dando por todos lados por el video”, señaló Salatino en diálogo con Teleshow y en respuesta a las críticas que había recibido de Karina por exponer del estado de su madre: “Hacía falta que el marido publique un video exponiendo a mi mamá así”, lanzó la también cantante desde su cuenta de Instagram.
Desde entonces, la disputa quedó planteada y ya no hubo tregua. “Mi mensaje para Karina es que mejor llame por teléfono a la madre para ver cómo está, cómo sigue. Una sola vez la llamó desde que está internada acá”, dijo el marido de Lía, que se encuentra en Mar del Plata realizando su rehabilitación. “Estoy indignada y cansada de responder a las pavadas que dice este señor, ya es demasiado”, contestó Karina, y negó que no tuviera contacto con su madre: “La llamo siempre, la fui a ver a Mar del Plata, hablé con los médicos”, enfatizó. Malena, hija de Lía, también reveló que ambas están recomponiendo su vínculo. “Mi abuela pudo hablar con mi mamá y se dijeron que se querían mucho, que se extrañaban. Lo cual fue muy emotivo y hermoso”, describió Malena.
Ahora, se sumó un nuevo capítulo que tiene que ver con el plano profesional, ya que Karina denunció que el manager está buscando una cantante para reemplazar a Lía. “Ahora que no la tiene más a mi mama para generar un peso, entonces se dedica a estar buscando chicas por todos lados, para que canten los temas de mi mamá. Y según me llegó a mis oídos, quiere sentar a mi mamá a un costado en una silla de ruedas”, contó Karina en diálogo con Teleshow.
La mujer, que también es cantante y suele realizar homenajes al repertorio de su madre, compartió con este medio los audios que le envió una mujer que fue contactada por Salatino: “Yo no sabía nada. Me entero porque me escribe una chica por Instagram y me dice que le parece indignante, que nos respeta mucho a nosotros, que somos la familia de mi mamá”, expresó la mujer.
En el primero de los mensajes, el manager contacta a una mujer averiguando si se dedica al canto, y aguardando la respuesta para ofrecerle un : “Hola, ¿cómo te va? Buenas noches, qué tal, te voy a hacer una pregunta, si no te molesta. ¿Vos cantás, por esas casualidades? Tony Salatino te habla. Si vos me decís que cantás, yo después te digo por qué es. Dale, un beso. Hasta luego”, le dice Salatino.
En un segundo audio, el representante explica cuál es el motivo del contacto: “Estoy buscando una cantante que se asimile a lo que es Lía Crucet. Cantando, lógico. Si me podés mandar algo donde vos estás cantando, una onda no igual que Lía copiándola a ella, sino algún tema de ella cantado como lo harías vos, aunque sea a capella o con el karaoke, yo lo muestro en la compañía discográfica y ellos dirán, viste. Y si te gusta la idea, después seguimos hablando no hay problema”, agrega el productor en el audio al que accedió Teleshow.
“Como yo le pudrí todo con el video, ahora quiere sacar una cantante él y subir a mi mamá a una silla al costado de un escenario para lucrar con mi mamá”, dijo Karina a este medio. “Lo creo capaz, pero no lo voy a permitir: no voy a llegar nunca a ver a mi mamá sentada en una silla de ruedas y a otras personas cantando los temas de mi mamá para que este señor pueda lucrar y vivir”, agregó y apuntó contra el manager: “Este hombre anda haciendo macanas por todos lados, es insoportable, no está coherente. En el escrito pedí el informe psiquiátrico de mi mamá y una pericia psiquiátrica de él; porque si bien es el marido y tiene los derechos, no está en condiciones de hacerse cargo de mi mamá”.
Además, la cantante defendió su apellido y el legado artístico de su madre, otras de las críticas que le realizó el productor: “Yo hago un homenaje a mi mamá, y yo vivo de mi trabajo. Hace treinta años que me dedico a la música, pongo mi cuerpo, mi físico, mi yo misma me expongo arriba de un escenario”, afirmó la intérprete. “Si quiero cantar un tema, que no son de mi mamá sino que son son de sonoras de afuera, lo puedo hacer porque soy la hija. Soy Crucet, es un apellido familiar, es el apellido de mi abuelo”, cerró.
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