Andrés Nara tiene todo listo para probar suerte en el mundo de la actuación. El padre de Wanda y Zaira formará parte de El hostal del terror, una miniserie que se emitirá vía streaming con un elenco integrado por Roly Serrano, Patricia Sosa, Fabián Gianola y Matías Alé. Por este motivo, el empresario estuvo en El run run del espectáculo, donde contó este nuevo proyecto y se animó a contestar qué opinaban sus hijas, generalmente reacias a la exposición pública de su padre.
“Me imagino lo que deben estar pensando, pero nunca hablamos de estos temas”, señaló Andrés, que, ante una pregunta del panelista Juan Etchegoyen, reveló que a sus hijas no le había gustado su convocado para participar en Masterchef Celebrity, pero que él no lo había descartado por eso sino porque no se imaginaba cómodo en la cocina.
“Yo escuché declaraciones de Zaira que manifestaba que no quería ver a su papá mediatizado. ¿Qué explicaciones le encontrás?, preguntó el conductor Fernando Piaggio, avalando la información de su compañero: “Tienen sus razones, saben que no es mi rubro ni actividad estar en los medios, entonces obviamente al verme de esta manera no les causa gracia. Pero la realidad es que ellas le deben a los medios los lugares en que están”, agregó.
Con su próximo desembarco en la ficción, el empresario sumará un nuevo capítulo a la relación tirante con sus hijas con las que tiene una relación tirante tras su divorcio de Nora Colosimo, la mamá de las chicas, en 2013. Este vínculo se desgastó todavía más cuando el empresario defendió de manera pública a Maxi López después de separarse de su primogénita. Mientras las modelos construían sus carreras en los medios, el hombre también se convirtió en un personaje muy popular que solía aparecer bastante en los programas de espectáculos, ya sea para hablar de sus hijas o de su vida sentimental, algo que nunca cayó bien en las chicas.
Tampoco ayudó a la reconciliación las declaraciones de Andrés cuando anunció su casamiento con Pamela Acosta, que tuvo que postergar debido a la pandemia. En aquel momento, marcó claramente las diferentes relaciones que tenía con sus hijas. “Invitaría a Zaira y a todos los amigos que quiero que ese día estén presentes, para tener ese contacto. En el caso de Wanda, no. No por nada en especial sino por motivos de distancia, y por haber tenido esas peleas que nunca entendí mucho porque jamás pasó nada”.
A principios de este año, contó que tuvo un acercamiento con Wanda, a través de la mediación de Zaira. “Tuvimos ese diálogo y pudimos hablar otras veces de vuelta de forma cordial. La realidad es que no había pasado nada grave. La realidad es que yo le había dado el visto bueno a Maxi López, ella no lo tomó a bien. Con Mauro no tengo relación, no tuve una relación de contacto fluido con él. Eso también genera rispideces”, reconoció Andrés.
En aquella oportunidad, destacó los avances de la relación entre ambos: “Volvimos a hablar, tuvimos charlas, pero siempre con cierta distancia. Yo no conozco a las nenas y hay un montón de cosas que hay que conversar… Tanta exposición, el dinero, la fama, que este chico (Mauro) tiene plata y vive en Europa. Es una bola de cosas que no es fácil hablar de igual a igual”, admitió el empresario, que no conoce a sus nietas Francesca e Isabella, las hijas de Wanda con el futbolista del Paris Saint Germain.
Distinta fue la relación con su hija menor, y la propia Zaira lo reconoció el año pasado en su visita a PH Podemos Hablar: “Yo nunca dejé de hablarle, pero sí me molestaba verlo sentado en un programa. Al final lo terminé entendiendo porque si este es mi laburo y a mí me encanta y me apasiona”. Y se preguntó: “¿Por qué a él no puede apasionarlo también?”. El conductor Andy Kusnetzoff quiso saber si Wanda estaba en la misma línea que ella respecto a lo que pensaba de su papá, y la modelo sostuvo entre risas: “No, imposible... no llegó a ponerse en ese lugar, pero bueno cada uno tiene su propia personalidad”. Sin embargó, reconoció cómo está hoy el vínculo con su padre: “La relación conmigo está bien y con Wanda mejor”.
SEGUIR LEYENDO: