“Te necesitamos”, fue lo único que atinó a escribir Jonatan Viale en su cuenta de Instagram junto con un emoji de un corazón roto y un álbum de fotos y videos de su papá Mauro, fallecido hace poco menos de un mes, y su hijo Romeo de cuatro años y medio.
En las imágenes, que el periodista nunca antes había mostrado en público, se lo ve al conductor sonriendo y jugando con sus nietos como si fuera un niño más: balanceándose en la hamaca, tomando la sortija en la calesita, alzándolo a upa en el estudio del canal, tocando una guitarra de juguete y soplando las velitas mientras la familia le canta el feliz cumpleaños y él pide que no le digan Mauro en la canción, sino “abuelo”.
Las fotos y videos obtuvieron más de 70 mil “Me gusta” y miles de comentarios de apoyo y cariño. “Si supieras lo que la gente te quiere Jony. Te abrazamos fuerte fuerte fuerte”, “Cómo te extraño Mauro los domingos eras mi compañía”, “Mucha fuerza Jony. Qué lindos recuerdos familiares. Tu padre ahora es el ángel que los cuida desde arriba a todos”, “Qué divinos nieto y abuelo hermosos recuerdos. Todavía no creo que ya no está se extraña siempre lo mirábamos” y “Fuerza Jonatan, tus pequeños te necesitan entero, escribí todo lo que sientas eso te va aliviar, que Dios proteja a toda tu la familia”, fueron algunos de los mensajes que recibió el periodista, que también es papá de Rafael, de un año y medio.
Hace unos días había escrito también recordando a su papá con varias fotos de él y de los pequeños: “El mejor abuelo de la historia️. Te amamos tanto”. Al cumplirse una semana de la partida de Mauro, subió una imagen en la que compilaba una foto de él niño con su padre y otras dos (una de cada uno de sus hijos) con él, con el texto “Te extrañamos tanto”.
Viale falleció el domingo 11 de abril a los 73 años tras una complicación en su cuadro de coronavirus. Se había dado la primera dosis de la vacuna el jueves anterior y el viernes comenzó con los primeros síntomas, por lo que se cree que al momento de la inoculación, ya tenía el virus. Tras levantar temperatura, los médicos decidieron que sería mejor su internación y el sábado fue trasladado al Sanatorio de los Arcos.
Por haber fallecido de COVID-19 y debido a los protocolos, su último adiós en el cementerio de La Tablada debió ser más que íntimo. Solo estuvieron su hijo Jonatan acompañado por su esposa Micaela. Su hija Ivana y su mujer Leonor, como habían estado con él acompañándolo y cuidándolo hasta los últimos días, no pudieron ir por ser “contacto estrecho” y tuvieron que permanecer aisladas por precaución, para evitar propagar el virus.
Mauro y su mujer, quien solía acompañarlo como psicóloga en varios de sus programas, se conocieron cuando tenían 18 años. Juntos crecieron, se convirtieron en padres y luego en abuelos de cuatro nietos (dos hijos de Ivana y dos de Jonatan).
“Ella es muy amada en la familia”, suele enaltecerla Jony, hablando de quien ha mantenido un perfil bajo a lo largo de cinco décadas pese a la popularidad de su marido y las apariciones televisivas propias. Leonor logró construir un hogar –en el departamento de Palermo que habitaron por años– pese a la pasión que Viale le dedicó al trabajo: su esposo era un workaholic –como lo definía Jonatan– y ella conseguía que equilibrara la balanza, que encontrara con sus nietos el tiempo de calidad que, tal vez, no les había brindado a sus hijos.
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