Viviana Canosa cumple 50 años y logró ese estado al que aspiramos la mayoría: estar contenta con la vida. Simpática, locuaz, sin divismos y lejos de ese personaje de malvada que alguna vez cumplió se presta a la charla con Teleshow. Se ríe con ganas cuando el archivo le recuerda algo que dijo o le trae fotos de una mujer que conoce pero en la que ya no se reconoce. Se la escucha feliz, con mucho aprendido pero también llorado.
1. Admite que durante mucho tiempo su peor defecto fue su carácter iracundo, pero con el tiempo y sobre todo con la maternidad logró manejarlo. Su mayor virtud es la generosidad. “Me gustar dar y darme. Dar no solo lo material también lo espiritual, como tiempo”.
2. En el secundario se recuerda muy tímida. “Había dos grupos el de las zarpadas y las mojigatas, yo pivoteaba entre ambos pero sin sentirme identificada con ninguno”. En el viaje de egresados, apenas llegó a Bariloche se pescó una gripe, lejos de padecerlo asegura que fue “lo mejor que le pasó” porque no le gustaba el descontrol “no tomaba alcohol, no me drogaba” y le evitó esas situaciones.
3. Aunque cursaba para perito mercantil, ella amaba el arte. En tercer año se anotó para estudiar diseño con Paco Jamandreu, el histórico modisto de Eva Perón. Viajaba de Nuñez hasta la calle Arroyo para asistir a su taller que recuerda como una experiencia alucinante.
4. Consiguió trabajo de recepcionista en la maison de Christian Dior. Un día comenzaba un desfile y Teté Coustarot, que debía presentarlo, no llegó a tiempo y la pusieron a ella a conducir. Ese día descubrió que su vocación era comunicar.
5. Abandonó su plan de estudiar Bellas Ares y se anotó en el ISER. Fue compañera y se hizo muy amiga de Juan Castro. Se recibió de locutora. Acompañó a una amiga a un prueba en radio Mitre y la invitaron a darla. Gustó y consiguió una beca de un año.
6. Trabajó con Gonzalo Bonadeo, en Orsai a la medianoche. El periodista hablaba con una boca gigante y era ella detrás de escena.
7. Un día el productor le propuso hacer notas de fútbol y debutó en la cancha de Boca. Nunca había ido a un partido y se vistió con una minifalda. La 12 le gritó de todo. Dejó la mini y fue siempre con pantalones.
8. En el 2000 dio el gran salto. Chiche Gelblung la invitó a su programa de televisión, Memoria y quedó como la única columnista.
9. Al año siguiente la llamaron de América para ser columnista de un ciclo nuevo, Intrusos. “No quería dejar a Chiche pero me ofrecieron un montón de plata y mi crecimiento iba a ser más significativo si aceptaba la propuesta”. La llamaron un viernes y el lunes firmó el contrato.
10. Se fue de Intrusos y América en malos términos. El canal le inició una demanda porque consideraba que su partida era una pérdida económica y ella comenzó un juicio laboral por incumplimiento de contrato.
11. Asegura que la mejor información siempre se la pasaban los mejores amigos, los peluqueros y los jardineros de los famosos.
12. No le gusta el deporte y jamás practicó alguno. Pero este año comenzó a entrenar. “Estiro, elongo. Soy muy mental y necesito algo que me haga bien a la cabeza”.
13. De chica estaba enamora de Robert Redford, Richard Gere y Sean Penn. Hoy le siguen gustando.
14. “No me siento la mala del periodismo de espectáculos. Creo que está lleno de periodistas obsecuentes. Entonces, cuando decís lo que pensás te califican de malvada. No soy obsecuente, no me caso con nadie, no me vendo y eso es lo que me diferencia del resto de periodistas del espectáculo”. (Claro, enero, 2001).
15. Sus insultos preferidos son la c… de tu madre y la rep.. madre que te parió.
16. Aunque no trabaje y se encuentre dentro de su casa le gusta estar producida y prolija. Apenas se levanta, se baña, se pone aceites y corrector de ojeras. Su hija Martina hace lo mismo algo que a ella le provoca una mezcla de risa y ternura.
17. “Me gustaría tener un programa como el de Oprah Winfrey. Ella es una top, una grande. Me gusta lo que hace y cómo lo hace. Tiene que ver con lo que me gusta: un mina con ovarios y actitud que dispara todo tipo de temas en un programa muy completo”. (Siete días, junio 2007)
18. Le encanta el olor de los nardos.
19. En su casa solía ver la tele abrazada a sus dos perras chihuahua y cubierta con una manta de Kashmir de color nude que le regalaron. La manta le gusta tanto que en una entrevista aseguró que es una de las cosas que se llevaría al más allá.
20. “Una vez (Daniel) Hadad me dijo ‘vos sos una doña Rosa aggiornada”. Puedo estar hablando con un cartonero, con un gobernador, con un colega, pero pregunto con sentido común. Siento que me sobra calle”. (Watt, abril 2012)
21. En el 2010 la conductora viajó a Haití para visitar algunos orfanatos luego del terremoto que sufrió el país caribeño.
22. “Vos no sabés lo que era en Haití ver a la gente en la puerta de la casas, así como mirando a la nada misma. No quería comer porque era una falta de respeto”. (Ni a palos, junio, 2010)
23. Muy pulcra se baña tres veces por día. Asegura que el baño matinal la ayuda a comenzar el día con energía. Siempre luce sus manos y pies impecable. Jamás se la verá desarreglada. “Jamás me vas a ver en chancletas, hasta el súper voy arreglada”, admite entre risas “no es por laburo. Es mi estilo de vida”.
24. “Al único periodista que más o menos escucho es a Víctor Hugo, me parece el más coherente de todos. Después siento que tienen que ir con el ganado. A mí Nelson Castro me encantaba, me parece un tipo muy inteligente, pero ahora lo siento como desbandado”. (Ni a palos, junio, 2010).
25. Su papá José es comerciante y su mamá, Mirta es ama de casa. Habla de ellos con orgullo y amor. “Son un pilar en mi vida y me acompañaron mucho en mi separación”.
26. Le encanta el chocolate. “Pero nada de chocolate liviano, me gusta el fuerte como el belga”.
27. En el programa de Jey Mammon contó que le gusta el lenguaje explícito en el sexo. “Totalmente, pero asqueroso, reventado. No sé si lo pido, pero lo doy. Después quiero que sea recíproco. Nunca me pasó de pedir y no tener”.
28. En 2010 se separó de Daniel Tobal, su productor pero también su pareja por 15 años.
29. Al separarse dejó atrás su look pálido y rojizo y pasó al rubio.
30. Vivió un breve romance con Bruno Barbier, un empresario belga, que fue pareja de Juliana Awada.
31. “No tuve tantos novios. Sigo soñando con el amor para toda la vida: por naturaleza soy fiel y leal con un hombre”. (Perfil, enero, 2011)
32. Escribió y publicó un libro de autoayuda, Basta de miedos.
33. En 2011 volvió a encontrar el amor de la mano del hijo de Tato Bores, el escritor y productor Alejandro Borensztein.
34. Es fanática de los perfumes importados. Antes le gustaban las fragancias más fuertes y ahora las más suaves. También usa aceite de coco.
35. La revista Playboy le ofreció fortunas para posar desnuda en su tapa, pero jamás aceptó.
36. “Me piropea el adolescente de 18, su padre de 50, el empresario, las mujeres… Me pasa algo muy extraño con las mujeres, que me escriben diciéndome que les calienta el escolte que usé tal día. Es raro, pero tengo mucho levante gay”. (Luz, marzo, 2012)
37. Al separarse de Babier varios jugadores de fútbol la llamaron para invitarla a salir.
38. Contó que entre los que intentaban conquistarla había un futbolista de 22 años que jugaba en Europa. Vino a la Argentina a jugar con la Selección y le mandó su remera transpirada. Canosa asegura que ese muchacho le levantó la autoestima.
39. Tila y Negra son sus caniches. Los adora y asegura que son como “sus bebés”. También que son como ella en sus dos versiones: la melancólica y la alegre.
40. En 2013 fue mamá de su única hija, Martina. La beba pesó tres kilos y nació por una cesárea programada.
41. “Martina tiró mi ego a la basura. Ojo, la autoestima la tengo alta, pero el ego, ese en el que venía trabajando desde hacía mucho está súper domado”. (Luz, junio 2014)
Viviana mano a mano con Teleshow, en su cumpleaños 50
42. En 2019 le diagnosticaron un carcinoma de mama. “Solo tenía miedo de morirme por Martina, porque dije: ‘Tiene 3 años, Dios mío’. Pero pensé: ‘Es una prueba más de la vida’. Y nada, me operé. El día que vi los resultados y el médico me dijo: ‘Esto es muy preocupante, no hay nada tomado, pero hay algo que hay que sacar cuanto antes’, Dije: ‘Dame un turno ya’. Me fui al Mater Dei y me operé”.
42. Solo lo supieron su entonces marido, su mamá y su papá. “Muy valiente me fui a operar, diciendo: ‘Bueno, ya está, Dios me pone una prueba la voy a superar’. Me lo saqué, no había nada tomado, la lola me quedó perfecta. Después fue muy genial porque volví a mi casa toda vendada, no lo supo nadie, ni la gente que trabajaba en mi casa. A Martina le dije que estaba muy contracturada y que me dolía mucho todo el cuerpo, que iba a estar en cama unos días. Así pasé mi post operatorio. Lo superé, como superé tantas cosas en mi vida”.
44. Reconoce que superar el divorcio fue más difícil que atravesar el cáncer de mama. “No podía entrar a mi cuarto. Durante meses quedó al cama hecha. Sentía que el mundo se me caía a pedazos, ‘¿qué pasó?? me preguntaba” y agrega “me costó, pero no tanto porque lo extrañaba a él, extrañaba la vida de pareja. Me costó más porque ya no solo era mujer, sino que me sentía más responsable por el rol de madre. Para mí que Martina no sufriera era mucho más importante. Y ahí me di cuenta de que no quería que sufriera Martina, pero estaba sufriendo mucho yo”.
45. Dice que aprendió que la vida es corta y que no tiene sentido estar enojada. “Hay que pedir perdón y aceptar perdonar”.
46. Minimiza el entredicho que tuvo con el presidente Alberto Fernández. “Pongamos un manto de piedad. Es de gente civilizada pedir disculpas” concede pero asegura “sigo siendo crítica de su gobierno”.
47. Después de haber vivido amores muy fuertes admite que “el hombre de mi vida es el padre de mi hija. Pero la relación de mi vida todavía no llegó. Ese hombre con el que decís, más allá de todo lo obvio –química, sexo, piel–, ese para divertirse, tener los mismos gusto”. Más que un gran amor espera encontrar un increíble compañero.
48. “La inteligencia en un tipo me vuela la cabeza pero hoy también necesito inteligencia emocional. Solo el hombre culto ya no me calienta hoy le sumo lo espiritual”.
49. Después de la separación comenzó una búsqueda espiritual sobre el sentido de su vida. Así llegó hasta Alejandro Corchs, hijo de Elena Lerena y Alberto Corchs, uruguayos desaparecidos en Argentina durante la dictadura militar en diciembre de 1977. Corchs realiza cursos donde propone encontrar otro modo de vivir “donde hay espacio suficiente para todos”. Viviana participó de sus talleres de espiritualidad. “Fui sin un propósito y me encontré riendo a carcajadas. Recuperé la alegría. Descubrí que solo quiero servir y sumar”.
50. El año pasado fue uno de los peores para la mayoría de las personas pero Viviana asegura que para ella fue “el mejor año de mi vida”. “Me di cuenta que ya no necesito un hombre. Estoy sola y no lo cambio por nada. Pero sobre todo le encontré el sentido a la vida. Sé quién soy. No le temo a nada ni a nadie. Hoy la vida fluye y no tengo apuro de nada”. Y lo asegura Viviana, muy lejos de la Canosa, ese personaje que vemos en la tele, pero absolutamente cerca de esa mujer que un día descubrió que el secreto de la felicidad es dormir sin miedo, despertar sin angustia y reírse a carcajadas.
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