1. Con 17 años fue al casting de Jugate conmigo para acompañar a un amigo “súper fachero”. Pero una productora lo vio con su pelo negro largo y lo convenció para audicionar.
2. Castro aceptó hacer la prueba ante cámara solo para divertirse. Gustó y quedó elegido como uno de los chicos de Jugate conmigo, el primer exitazo de Cris Morena.
3. Durante un tiempo fue socio en un bar en Vicente López llamado Los sospechosos de siempre. Era habitual encontrarlo atendiendo a los clientes los sábados por la noche.
4. En el 2005 estuvo en pareja con Elizabeth Vernaci que le llevaba 13 años. Con idas y vueltas el romance duró cuatro años. “Fue una relación importante, la pasé fantástico. Es un caballero. Nunca hablaría mal de Luciano Castro (…) ¡Cómo no lo voy a querer si me hizo muy feliz!”, aseguró la conductora.
5. Actuó en el Colón, en la obra Kavafis, dirigido por Alfredo Arias.
6. “No reniego de mi pasado. A los 17 años no podía hacer otra cosa que Jugate conmigo. Y lo que pasó es que el programa superó las expectativas. Nadie esperaba que un personaje se desprendiera como pasó con el mío. Ni siquiera los productores. Y cuando se dio lo que se dio, me explotaron como correspondía y también me cuidaron como en ningún lado”. (Viva, abril de 2005).
7. Reconoce que para Jugate lo eligieron por lindo ya que “no era capaz de decir seis palabras juntas”.
8. Con 17 años y en ese momento 1500 pesos de sueldo dejó su casa de Villa del Parque y se alquiló un departamento. Había abandonado el secundario pero se puso a estudiar teatro con Raúl Serrano.
9. “Desde los tres años yo sabía que quería ser actor. No lo manifestaba, pero siempre fui un mentiroso. Toda mi vida actué situaciones, lo llevo adentro. Además, nunca me quiero bajar del escenario”. (Viva, abril de 2005).
10. Después del éxito de Jugate se sintió agobiado y voló a Barcelona donde vivían unos tíos.
11. Se instaló en Barcelona durante dos años. Trabajó de albañil en las obras de su tío que es arquitecto.
12. Al volver nadie le quería dar trabajo ya que lo asociaban al programa para adolescentes. Decidió volver a estudiar teatro con Serrano.
13. Patricia Veber y Pablo Culell le dieron su primer papel en Como pan caliente.
14. Su madre lo potenciaba a formarse con la advertencia que “si no vas a ser un envase y a los envases, cuando se vacían los tiran”.
15. En 1997, Pol-ka era la productora estrella. Sin presentación previa, Castro encaró a Adrián Suar y le dijo “yo necesito despegar y ubicarme en un lugar que solo me puede dar tu productora”.
16. Suar le contestó que en ese momento no lo necesitaba pero le propuso: “quiero que hagas RR.DT.” Le aseguró que en unos meses, el 2 de enero del año siguiente, comenzarían a grabar. Castro se fue muy triste pero el 1ro de enero lo llamaron para que pasara a buscar el guión y firmara el contrato.
17. En el 2005 le preguntaron si le gustaría hacer de galán y respondió: “No entro en ese rótulo, no cuadro vestido de traje. Me pongo zapatos y me caigo”.
18. Su mamá Marta es una docente que trabajó en Fuerte Apache y su papá, Daniel se dedicaba a trámites del automotor.
19. De chico, su papá le inculcó un gran amor al boxeo como deporte. Pasaban largas horas en el Luna Park.
20. Le hubiera gustado ser boxeador pero admite que le faltó determinación. “Le guanteaba a cualquiera pero sabía que no iba a llegar porque me faltaba ese hambre que hace falta para ser profesional”.
21. Desde los cinco años jugó al fútbol en el Club Parque. De ese tiempo conserva su amistad con el Pocho Federico Insúa, Marcelo Virulana Trapaso, Juampi Sorín y Diego el Cabezón Placente. “Eran menores que yo, pero como eran talentosos subieron de categoría y me alcanzaron a mí que era malo”.
22. También practicaba kung- fu y era fanático de las figuras orientales.
23. Entre sus tatuajes exhibe su nombre en un dedo, las iniciales de sus tres hermanos (Laura, Emilia y Joaquín) y su signo del zodíaco.
24. “Hace años que dejé de creerme el Che Guevara. ¿Por qué? Porque me di cuenta que esa fantasía era un delirio y que, por más que no quisiera, necesitaba de los besos de mi mamá y del cariño de mi gente”. (Luz, marzo 2009).
25. Reconoce que de chico prefería más estar en la calle con sus amigos que “estar chapando con alguna mina en un boliche”.
26. No le gusta dar entrevistas y detesta hablar de su vida privada.
27. Cuando su abuela falleció se tatuó una frase que ella solía repetir: “Libéranos del mal”. Durante la cuarentena se tatuó “Siempre” en el brazo derecho. En la espalda tenía tatuados dos delfines pero se los tapó y le hicieron dos peces koi.
28. Nunca tuvo representante.
29. Fue parte de Ricos y famosos, RR.DT, Campeones, Son amores, Durmiendo con mi jefe, Los Roldán, Valientes, El tiempo no para y Lalola, entre otros programas exitosos.
30. Se define con Menottista.
31. “Yo estudié para ser actor. Soy actor en teatro, en cine y en televisión. Trabajo en tele porque pagan mucho más”. (Viva, junio 2009).
32. Fue arquero juvenil de Argentinos Juniors. A los 15 llegó a una preselección argentina en la época de Mostaza Merlo, pero lo expulsaron en un partido y no volvió a las prácticas.
33. Uno de sus mejores recuerdos es de cuando tenía seis años y el ex campeón mundial de boxeo Uby Sacco peleaba en el Luna Park, Castro iba a su rincón y, antes de subir a ring, el boxeador pasaba y le tocaba la cabeza con el guante. Al crecer, solían ir a comer juntos.
34. En un gimnasio de Olivos solía entrenar a los que se animaban con los primero golpes de boxeo.
35. El mito familiar decía que le habían puesto Luciano por un personaje que hacía Guillermo Bredeston y que según su mamá era “encantador”.
36. La otra versión es que lo llamaron así en honor a un tío abuelo que escribía poemas. Luciano todavía conserva los cuadernos donde los escribía.
37. Con Lalola ganó el premio Martín Fierro como el mejor actor de comedia.
38. No usa perfume y le gustaría vivir toda su vida en jogging.
39. “En la convivencia soy un tipo aburrido y no salgo, aunque no ando en pantuflas. Pero limpio y hago las compras en el mercado”. (Perfil, septiembre 2012).
40. Suele escuchar rock o tango pero también algo de música clásica.
41. Su papá fue arquero del Club Atlético Chacarita.
42. En los partidos de fútbol se ponía bronceador antes de salir a jugar.
43. Suar le prohibió seguir boxeando cuando apareció con un ojo morado en las grabaciones.
44. “Es una infidencia, pero tengo cuadernos en los que escribía las preguntas que le haría a los boxeadores que más admiro. Yo me crié en el Luna Park y me considero un cholulo de los boxeadores porque sé el sacrificio que hacen para subirse arriba del ring. Cuando veo que pasaron 30 años de las peleas de Óscar de la Hoya me quiero matar” (Infobae, septiembre 2018).
45. Se dio el gusto de compartir su profesión con su pasión. Tanto en Campeones como en Sos mi hombre interpretó el papel de boxeador. “Un día vino Adrián (Suar) y me dijo que tenía un regalo para mí. Yo pensaba que era un Rolex, pero fue algo mejor. Hice de Danilo en una tira que tenía que pelear con Mariano Martinez, Laport y Fede D´Elía; y de Ringo en la otra en honor a Bonavena, porque Oscar fue un animal. Es un orgullo cómo se bancó de igual a igual los 15 rounds con Alí. Es más, si hubiera aguantado en el último no hubiera perdido por nocaut”. (Infobae, septiembre 2018).
46. Cuando Evander Holyfield, que cosechó 44 victorias a lo largo de su carrera, se animó a la pista del Bailando, Castro quiso conocerlo “Fue un papelón. Me acuerdo que le pedí a un amigo que me avise cuando esté ensayando solo. Cuando me dijo que era el momento me puse muy nervioso. Entré como si fuera Tinelli, eludiendo la seguridad de Ideas del Sur y la de él. Le llevé los guantes con los que debuté como amateur para que me los firme, pero como no hablo nada de inglés parecía el very difficult de Tevez”.
47. También tuvo un encuentro con Mike Tyson: “Fui a verlo en su stand up a Punta del Este, pero cuando estaba en el aeropuerto mi mujer me dijo Gordo no te excites ni hagas papelones, pero lo tenés sentado atrás tuyo. Así, con mi inglés patético, le pedí si le podía besar la mano y hacernos una foto. Fue terrible, porque cuando me acerque salieron patovas de todos lados, por suerte su manager es mexicano y le pude explicar la admiración que sentía hacia él”.
48. Otro momento imborrable fue cuando se midió ante Sergio Maravilla Martínez en una exhibición. “Fue una idea del Pato Galván que me encantó, porque además tuve la oportunidad de entrenar con él”
49. En la pelea el actor se encontraba en mejores condiciones que su rival: “Lo que pasa es que él es campeón del mundo y puede hacer (y comer) lo que quiera. Yo como tengo que trabajar de lindo no puedo salir del zapallo y el repollo”. Admitió que “Me dio 16 zurdazos que me dejó la cabeza como un Teletubbie”.
50. Nunca quiso hablar de sus amores. En la época de Valientes vivió una romance con Julieta Díaz. También estuvo con Griselda Siciliani. “Éramos muy jóvenes y fue un romance nada más, no éramos novios (…) Pero no quiero hablar, a él no le gusta. Es ermitaño pero nos queremos, lo quiero mucho”, reveló ella en el programa de Susana Giménez.
51. Mantuvo un affaire con Pata Villanueva. “Yo me lo inventé de secretario porque no sabía hacer nada. Le dije que atendiera el teléfono y me preguntó ´¿Qué tengo que decir?’. ‘Anotá el nombre de las chicas que vienen con el book de fotos’, le dije. ¡No sabía hacer nada!”, contó La ez modelo.
52. La historia duró apenas dos meses. “Fue un touch and go. Habremos estado dos o tres veces. Él dice que tenía 17 años pero para mí tenía más. Para mí, tenía 22 y yo, 40” y agregó “Yo no quería y me sedujo. Ya era un seductor en ese momento. Ya era un seductor, yo me sentí totalmente seducida”. Él reconoció que “Pata muy generosa conmigo. Me abrió la puerta de su casa y me pasó muchos contactos para que yo pueda empezar a moverme en el mundo del teatro”.
53. En 2010 conoció a Sabrina Rojas en la obra Valientes en Mar del Plata. “A los tres meses nos enamoramos y todo fue rápido y consistente. Muchos pensaron que mi amor por Luciano duraría un verano y finalmente armamos la familia de nuestros sueños”, admitió ella en la revista Hola.
54. “Sabrina es todo para mí. Tengo una gran admiración por ella. Dejó todo por mí. Ella tenía una carrera ascendente, podría haber seguido con lo suyo, y aceptó mi propuesta: le dije que quería tener hijos y formar una familia. Es una mujer con mayúsculas” (Revista Hola, octubre 2019).
55. Con Sabrina Rojas es papá de Fausto y Esperanza. Cuando tenía 25 años fruto de otra relación tuvo a Mateo, su primogénito. “Muchas veces lo llevaba a grabar conmigo y se quedaba con las maquilladoras, gente de mantenimiento, productores, directores. Pero sé que entendía que era lo que tenía para darle en ese momento (…) Pero él no tiene conflictos; el conflicto es mi culpa. Por suerte es muy maduro y tiene una madre brillante”.
56. “Consumo política todos los días. Leo más de política que de arte, veo debates enteros de la Cámara de Diputados, de Senadores, veo los debates diez veces. Pero me parece que muchas veces los políticos se cagan en la gente y la subestiman”. (Perfil, noviembre 2012).
57. “Solo me dedico a laburar. No voy a conferencias, a eventos pedorros, nunca fui ‘figureti’ en ningún lado, me dedico a trabajar, a progresar. Deseo que cada personaje me sirva como experiencia para crecer”. (Crónica, abril 2009).
58. En Argentinos Juniors compartió plantel con el relator de fútbol Sebastián Vignolo. “Íbamos hasta La Plata en un micro que teníamos miedo que se despedazara y Sebastián se pasaba todo el viaje relatando. Vos naciste con esa pasión por el relato, para nosotros eras un loco y por eso ahora estás en donde estás”, recordó Castro en el programa en 90 Minutos de Fútbol.
59. Invitado a Cortá por Lozano, la conductora le preguntó: “¿A la noche te googleás?” y Castro respondió. “No, no, no. No uso redes sociales, directamente”. “Pero tenés tu Instagram”, lo contradijo y Luciano remató con sinceridad: “¡Sí, pero para lucrar como loco! Nada más”.
60. “Tengo amigos dentro del medio con los que soy confidente: Rafa Ferro, Gonzalo Heredia, Pedro Alfonso, Juan Minujín, Ale Fiore, Nancy Dupláa, Carla Peterson, Marce Klosterboer. Son actores y actrices con los que, cuando nos toca un proyecto en común, tenemos la capacidad de hablar de otras cosas, no solo del trabajo o del futuro trabajo. Con todos ellos puedo hablar de la vida, de nuestros temas; seguro me olvido de alguno, como Facundo Espinosa. Tengo amigos que son intransables, como ellos”. (Infobae, agosto de 2019).
Con material del archivo periodístico de la escuela TEA
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