Guía definitiva para cambiar un vehículo a combustión por uno eléctrico y ahorrar más dinero

El cambio de vehículos de combustión o gasolina a eléctricos representa un salto importante para millones de conductores que buscan adaptarse a nuevas prácticas sostenibles que reduzcan la huella de carbono en el planeta.

Sin embargo, esta decisión trae consigo consideraciones esenciales que deben analizar los conductores, en cuanto a los costos de la adquisición de un auto eléctrico, su autonomía y cada cuánto se le debe hacer mantenimiento.

En el marco del Salón Internacional del Automóvil en Bogotá, Infobae conversó con Alberto Telch, Brand Manager de Volvo en Colombia, sobre los aspectos y ventajas que hacen del cambio a un vehículo eléctrico, una inversión inteligente y eficiente en materia de ahorro.

Telch destacó que uno de los puntos más atractivos de los vehículos eléctricos es la reducción significativa en los gastos de operación a comparación de los vehículos a combustión.

“Con un vehículo que ofrece 400 kilómetros de autonomía, solo es necesario hacer dos cargas al mes. Más o menos cada carga podría costar aproximadamente 100.000 pesos, entonces estás gastando 200.000 pesos al mes en energía, cuando antes gastabas entre 600.000 y 700.000 pesos en combustible”, explicó.

Este ahorro mensual refleja el cambio positivo en los costos de rodamiento, una ventaja que se amplifica con el tiempo. Sin embargo, Telch también agregó sobre la planificación que se requiere al salir de la ciudad a un viaje de larga distancia.

“Lo importante es la educación. Tienes que ver si la carga te da para ir y volver o dónde debes recargar, pero los vehículos eléctricos cuentan con un sistema de freno regenerativo que ayuda a extender su autonomía”, afirmó.

Junto a los aspectos económicos, Telch subrayó la relevancia de corroborar la seguridad en la marca de vehículos eléctricos por la que se decida optar. “En el caso de Volvo, realizamos pruebas con dummies de hombres, mujeres y niños de tamaño real para evaluar cómo un impacto o colisión afecta a diferentes integrantes de la familia”, afirmó.

Los compradores de un vehículo nuevo deben entender que un accidente vial tiene un efecto diferente en un niño a comparación que una persona adulta.

Asimismo, Telch añadió otro punto a considerar al optar por un vehículo, que es la garantía de la batería y la revisión cercana del vehículo por parte de un técnico especializado. Este es un componente crítico en los autos eléctricos, y garantizar su estado y rendimiento es vital para la tranquilidad del usuario.

Infobae también habló con Jorge Rojas, Product Expert de Volvo que enfatizó que el costo de operación de un vehículo eléctrico es sustancialmente menor al de uno a combustión.

“Cada kilómetro que recorre con un vehículo a combustión es cuatro veces más alto que uno eléctrico que se puede cargar directamente desde la casa desde el contador de la propiedad”, señaló.

Además, enfatizó que la reducción en el costo de tenencia de un vehículo eléctrico se debe, en gran medida, a su estructura mecánica más simple. “Un vehículo eléctrico tiene hasta 200 piezas menos que uno a combustión. Esto significa menos piezas de desgaste y menos piezas que reparar”, afirmó.

A diferencia de los vehículos de combustión, que requieren mantenimiento cada 5.000 kilómetros o cada seis meses, los vehículos eléctricos solo necesitan revisión cada dos años, lo que dispersa el costo del mantenimiento a lo largo del tiempo y representa un ahorro considerable.

La adopción de un vehículo eléctrico no solo supone beneficios en términos de ahorro económico y reducción de mantenimiento, sino que también implica un menor impacto ambiental.

Al prescindir de combustibles fósiles y minimizar las emisiones, los autos eléctricos contribuyen a mitigar el cambio climático y mejorar la calidad del aire en las ciudades.

Además, los avances en tecnología han permitido que los modelos actuales ofrezcan autonomía suficiente para los trayectos cotidianos. Como mencionó Telch, “con la autonomía de estos vehículos, podemos viajar cerca de una ciudad como Bogotá y regresar sin inconvenientes, siempre que se planifique adecuadamente la carga”.