La transferencia de dinero entre cuentas personales es una práctica común para gestionar las finanzas de forma ágil y práctica. Sin embargo, este proceso, si no se realiza con precaución, puede exponer a los usuarios a riesgos de fraude y errores que podrían resultar costosos.
Entender las prácticas seguras al mover fondos entre cuentas propias es crucial para evitar contratiempos y proteger los activos financieros, porque el fraude financiero sigue evolucionando, y los delincuentes encuentran maneras cada vez más sofisticadas para interceptar transacciones o engañar a los usuarios.
Por eso, es necesario identificar qué no hacer al momento de transferir dinero, evitar ser víctima de estafas y proteger el patrimonio personal; entonces, estos son aspectos clave que se deben tener en cuenta.
Por qué no es seguro realizar transferencias desde redes WiFi públicas
Uno de los errores más comunes al realizar transferencias entre cuentas propias es hacerlas desde redes WiFi públicas. Estas conexiones, aunque prácticas, suelen ser vulnerables a ataques cibernéticos que permiten a los delincuentes acceder a la información de los usuarios.
Utilizar una red pública para mover dinero entre cuentas exponen a la persona al riesgo de que sus datos bancarios y contraseñas sean interceptados.
Lo ideal es evitar el uso de WiFi no seguro y optar por redes privadas, como la de casa o la conexión de datos móviles, que ofrecen un entorno más privados para realizar transacciones.
A qué sitios web o aplicaciones nunca acceder para realizar una transferencia
Acceder a aplicaciones o sitios web de bancos que no sean oficiales puede resultar otro error costoso. Las páginas falsas, conocidas como sitios de phishing , se diseñan para imitar a las legítimas y engañar a los usuarios para que ingresen sus datos personales.
Antes de iniciar sesión o transferir dinero, es fundamental verificar la URL del sitio web o asegurarse de que la aplicación sea la oficial de la entidad financiera.
Revisar certificados de seguridad y evitar enlaces enviados por mensajes sospechosos o correos electrónicos no solicitados, ayuda a prevenir el acceso a plataformas fraudulentas.
Qué nunca compartir en un mensaje de WhatsApp o una llamada telefónica
Compartir detalles personales o bancarios en llamadas telefónicas o mensajes puede abrir la puerta a estafas. Las entidades bancarias nunca solicitan información sensible por teléfono, correo electrónico o mensajes de texto y es importante desconfiar de cualquier comunicación que lo haga.
En algunos casos, los estafadores simulan ser representantes del banco para obtener contraseñas o códigos de verificación, aprovechando la urgencia o el temor que puedan generar. Ante cualquier duda, se debe contactar directamente con la entidad bancaria utilizando un canal oficial.
Por qué actualizar las aplicaciones de bancos y los dispositivos
No actualizar las aplicaciones bancarias y los sistemas operativos de los dispositivos utilizados para las transferencias puede facilitar el acceso de los ciberdelincuentes.
Las actualizaciones frecuentes de software no solo ofrecen nuevas funcionalidades, sino que corrigen vulnerabilidades de seguridad que pueden ser explotadas por atacantes.
Contar con un antivirus y activar la autenticación en dos pasos también refuerza la protección de las cuentas y garantiza que, incluso si un atacante obtiene la contraseña, no podrá acceder a la cuenta sin un segundo factor de verificación.
Cuáles son las amenazas más comunes al transferir dinero a una cuenta
Las transferencias de dinero entre cuentas personales pueden exponer a los usuarios a diversas amenazas si no se toman precauciones. Las estafas de phishing son comunes, engañando a las personas para que entreguen información confidencial a través de mensajes falsos.
Los ataques de malware permiten a los ciberdelincuentes capturar datos bancarios mediante programas maliciosos en dispositivos. También, los ataques de intermediario interceptan y manipulan la comunicación en conexiones no seguras.
Además, la ingeniería social busca obtener información simulando ser fuentes confiables. Para evitar estas amenazas, es esencial usar redes seguras, verificar la autenticidad de las comunicaciones y actualizar las apps y los celulares.