Stephen Hawking, el gran físico teórico, astrofísico, cosmólogo y divulgador científico británico, hizo una advertencia sobre cuándo podría ocurrir el fin del mundo y la tecnología, llegando incluso a señalar una fecha específica, fundamentada en su conocimiento del cambio climático.
Esta advertencia ha cobrado relevancia recientemente, ya que ha sido reconocida por la NASA, subrayando la importancia de las preocupaciones que expresó el científico en 2017 para el año 2600.
Cuándo es el fin del mundo
Stephen Hawking advirtió: “Para el año 2600, la población mundial estaría de pie hombro con hombro y el consumo de electricidad haría que la Tierra brillara al rojo vivo. Esto es insostenible”.
Esta declaración la hizo durante su participación en el Tencent WE Summit de hace siete años, un evento de gran relevancia en el ámbito de la tecnología y la ciencia, en el que apareció a través de un video para compartir sus preocupaciones y reflexiones sobre el futuro de la humanidad.
En su intervención, Hawking subrayó la urgencia de actuar ante las crecientes amenazas que enfrenta el planeta debido al aumento exponencial de la población y al consumo desmedido de recursos energéticos.
Sus palabras no solo eran una advertencia sobre las implicaciones ecológicas y tecnológicas de seguir con el actual modelo de desarrollo, sino también un llamado a la acción para buscar soluciones que permitan la supervivencia a largo plazo.
La advertencia de Hawking está en línea con la Nasa que asegura que el consumo de electricidad afecta gravemente el estado del planeta.
“Es innegable que las actividades humanas han producido los gases atmosféricos que han atrapado una mayor parte de la energía del Sol en el sistema de la Tierra. Esta energía adicional ha calentado la atmósfera, el océano y la tierra, y se han producido cambios rápidos y generalizados en la atmósfera, el océano, la criósfera y la biosfera”, señala la agencia en su página web.
Sin embargo, Hawking vio su advertencia como una forma de identificar los desafíos que tienen la humanidad para preservar el planeta, los cuales se pueden resolver gracias al talento humano.
“Estos son problemas de ingeniería, y los desafíos de los ingenieros tienden a resolverse con el tiempo, a medida que se avanza hacia una tecnología madura”, dijo el físico británico.
Tecnología para frenar el cambio climático
El cambio climático representa uno de los desafíos más relevantes a nivel global, y la tecnología desempeña un papel fundamental en la mitigación de sus efectos.
Los centros de datos, esenciales para el funcionamiento de numerosos servicios tecnológicos, son grandes consumidores de agua y electricidad, lo que ha llevado a empresas como Amazon Web Services (AWS) a explorar soluciones sostenibles, como el uso de energía nuclear para alimentar estas instalaciones.
La energía nuclear se perfila como una herramienta crucial para la reducción de las emisiones de carbono, un objetivo para AWS en su búsqueda por hacer que sus centros de datos, conocidos por su alto consumo energético, sean más sostenibles.
“La energía nuclear es una fuente segura de energía libre de carbono que puede ayudar a impulsar nuestras operaciones y satisfacer las crecientes demandas de nuestros clientes, a la vez que nos ayuda a avanzar hacia nuestro compromiso Climate Pledge de alcanzar cero emisiones netas de carbono en todas nuestras operaciones para 2040″, expresó Matt Garman, director ejecutivo de AWS.
Otra tecnología en la lucha contra el cambio climático es la captura y almacenamiento de carbono (CCS), que permite la extracción de CO₂ de la atmósfera o de fuentes industriales, para posteriormente almacenarlo de manera segura en el subsuelo.
En el ámbito del transporte, la movilidad eléctrica está cobrando protagonismo con el incremento de vehículos eléctricos y la expansión del transporte público eléctrico, los cuales eliminan las emisiones directas de gases contaminantes y contribuyen a un entorno más limpio.