Espiar las aplicaciones de tu novio trae problemas de amor y judiciales: por qué

Encontrar pareja nunca ha sido tan fácil como hoy. Las aplicaciones de citas y las redes sociales han revolucionado la forma en que las personas se conocen y se relacionan, ofreciendo muchas posibilidades para tener un noviazgo. Sin embargo, este acceso instantáneo también ha traído consigo una serie de nuevos riesgos que pueden afectar tanto la estabilidad de las relaciones como la seguridad de la información personal.

Al tener tantas forma de comunicarnos y estar al tanto de qué está haciendo el otro, las situaciones de acoso son más frecuentes. Además, todos estamos expuestos a contenido falso que puede generar problemas en la relación o exponer datos privados.

• Compartir imágenes íntimas

El uso de tecnología en las relaciones ha normalizado ciertos comportamientos que, aunque parecen inofensivos, pueden derivar en situaciones de vulnerabilidad y abuso. Según un estudio de Kaspersky, el 39% de las personas de entre 25 y 34 años ha compartido imágenes íntimas con alguien que nunca ha conocido en persona.

Esta práctica, en principio, puede parecer una muestra de confianza, pero en muchos casos, resulta ser el inicio de un riesgo potencial. El abuso de imágenes íntimas es una de las principales amenazas. Las consecuencias pueden ser: pérdida de privacidad, extorsión y el estigma social que sigue acompañando a las víctimas, que a menudo son culpabilizadas por compartir esas imágenes en primer lugar.

El problema es especialmente preocupante entre los jóvenes. Datos de otra encuesta de la empresa, demostró que el 69 % de los jóvenes de entre 16 y 24 años ha estado expuesto de alguna manera al abuso de imágenes íntimas. A pesar de esta cifra, la percepción de culpabilidad sigue arraigada: el 50 % de los encuestados cree que la responsabilidad recae en la persona que compartió la imagen.

• Espionaje entre la pareja

Más allá del abuso de imágenes, el stalkerware es una amenaza en aumento. Este software permite el seguimiento secreto de una persona, espiando su ubicación, mensajes y actividades diarias. Suele estar disfrazado como una herramienta de control parental o aplicación antirrobo.

Las víctimas muchas veces no tienen conocimiento de que están siendo monitorizadas, ya que este tipo de software opera de forma sigilosa. Las señales de alerta pueden incluir un consumo de batería anormal, aplicaciones desconocidas o cambios repentinos en los permisos de las apps.

Además del stalkerware, el uso indebido de herramientas de rastreo GPS y la revisión de perfiles en redes sociales, algo que el 34 % de las personas admite hacer como “diligencia debida” antes de una cita, contribuyen a una cultura de vigilancia que puede minar la confianza y la privacidad en las relaciones.

• Deepfakes: un riesgo generado por la IA

Los deepfakes representan otra dimensión de la amenaza digital. Esta tecnología, que utiliza inteligencia artificial para crear imágenes, videos y grabaciones de audio falsos, pero hiperrealistas, ha evolucionado rápidamente.

Aunque en un inicio los deepfakes se asociaron principalmente con la manipulación de imágenes de celebridades, hoy en día cualquiera puede ser víctima de esta tecnología. En el contexto de las relaciones, los contenidos falsos se usan para crear contenido comprometedor con el fin de extorsionar a las víctimas, lo que añade una capa más de peligro al mundo de las citas en línea o que puede interrumpir la estabilidad de una relación al crear situaciones que nunca sucedieron.

Es crucial tomar medidas preventivas para salvaguardar tanto la privacidad como la integridad emocional en un entorno digital que puede ser hostil. A continuación, se presentan algunas recomendaciones:

• Antes de enviar una imagen íntima, evalúa cuidadosamente el nivel de confianza con la otra persona y considera las posibles consecuencias.
• Aprende a usar las herramientas de denuncia que ofrecen las plataformas y redes sociales para reportar contenido que viole tu privacidad.
• Si notas un comportamiento anormal en tu dispositivo, como un rápido consumo de batería o aplicaciones no reconocidas, busca ayuda profesional antes de intentar eliminar el software por tu cuenta.
• Actualiza periódicamente las configuraciones de privacidad y controla los permisos que otorgas a cada aplicación.
• La educación en torno al consentimiento y la privacidad es fundamental para reducir estas amenazas. Programas dirigidos a jóvenes y adultos pueden contribuir a una mejor comprensión de los riesgos y a la creación de un entorno digital más seguro.