¿Quieres ser un cazafantasmas? usa estos cinco dispositivos para lograrlo

Estos aparatos suelen aparecer en películas o programas de televisión

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Estos dispositivos se hicieron populares
Estos dispositivos se hicieron populares en programas de televisión, a pesar de tener una base científica. (Ghostbusters)

Dentro de las tradiciones de Halloween están los temas paranormales y de terror de los que muchos son fanáticos, y la tecnología cuenta con dispositivos que permiten ‘cazar fantasmas´. La mayoría de estos artefactos se han popularizado en programas de televisión o en películas.

Si bien son productos reales y que funcionan científicamente, muchos han cuestionado su verdadera capacidad para detectar ´fantasmas´ (que aclaramos, no existen), debido al escepticismo que hay sobre el tema y que, en algunos casos, se queda en producciones como Los Cazafantasmas o El Conjuro.

Cinco dispositivos para cazar ´fantasmas´

  • Medidores de EMF (Campos Electromagnéticos)

Los medidores de EMF están diseñados para medir los campos electromagnéticos en el entorno. Se utilizan en ámbitos como la ingeniería eléctrica para detectar problemas en los sistemas de cableado. En la caza de ´fantasmas´, estos dispositivos se emplean bajo la premisa de que las entidades paranormales pueden influir en los campos electromagnéticos.

El funcionamiento es relativamente simple: el medidor detecta y cuantifica la intensidad de los campos eléctricos y magnéticos. Si hay una fluctuación, el dispositivo lo señala a través de una pantalla o luces indicadoras. Los cazadores de ´fantasmas´ interpretan estos cambios como posibles señales de actividad paranormal.

Estos dispositivos se hicieron populares
Estos dispositivos se hicieron populares en programas de televisión, a pesar de tener una base científica. (Imagen Ilustrativa Infobae)

Sin embargo, el problema radica en la cantidad de fuentes no paranormales de campos electromagnéticos, como electrodomésticos, cables de corriente y señales de radio. Por tanto, aunque los medidores de EMF puedan detectar cambios, no existe evidencia concluyente de que estos estén relacionados con ´fantasmas´.

  • Grabadoras de campo y Fenómenos de Voz Electrónica (EVP)

Las grabadoras de campo son dispositivos compactos que graban audio de alta calidad y se usan en muchas aplicaciones, desde entrevistas hasta grabación de música. En la caza de ´fantasmas´, se utilizan para captar Fenómenos de Voz Electrónica (EVP), supuestas voces de espíritus que no pueden ser escuchadas en tiempo real, pero que se detectan al reproducir las grabaciones.

La teoría detrás de los EVP sugiere que los ´fantasmas´ pueden producir sonidos tenues o causar perturbaciones electromagnéticas que las grabadoras captan. Sin embargo, los escépticos argumentan que el fenómeno de la pareidolia, la tendencia del cerebro humano a identificar patrones donde no los hay, podría ser responsable de la percepción de voces en el ruido de fondo.

Este sesgo se refuerza si las personas están predispuestas a escuchar algo en particular, lo que hace que los resultados sean subjetivos y poco fiables.

Estos dispositivos se hicieron populares
Estos dispositivos se hicieron populares en programas de televisión, a pesar de tener una base científica. (Imagen Ilustrativa Infobae)
  • Gaussímetros

Los gaussímetros son dispositivos que, al igual que los medidores de EMF, miden campos magnéticos, pero de forma específica en campos estáticos o de baja frecuencia. En la vida cotidiana, se utilizan para evaluar la potencia de imanes o la eficiencia de escudos magnéticos. En el contexto de la caza de ´fantasmas´, los gaussímetros buscan detectar cambios en el campo magnético que podrían, teóricamente, indicar la presencia de un espíritu.

El uso de un gaussímetro parte de la creencia de que las entidades sobrenaturales pueden generar un campo magnético distintivo. Sin embargo, al igual que los medidores de EMF, los gaussímetros no pueden discernir entre un campo generado por una presencia paranormal y uno causado por fuentes naturales o artificiales, como estructuras de metal o dispositivos eléctricos. Por tanto, los cambios en las lecturas no pueden tomarse como prueba fehaciente de actividad paranormal.

  • Cámaras FLIR (Infrarrojas de Vista Frontal)

Las cámaras FLIR son dispositivos que detectan la radiación infrarroja y la convierten en una imagen de falso color para representar diferentes temperaturas. Estas cámaras son populares en campos como la vigilancia nocturna y la industria, donde se usan para detectar puntos calientes en equipos sin contacto físico.

En la caza de ´fantasmas´, las cámaras FLIR se utilizan bajo la hipótesis de que los ellos pueden provocar descensos súbitos de temperatura. Al monitorizar las variaciones térmicas en un espacio, los investigadores paranormales buscan identificar zonas frías que no tengan una explicación natural aparente.

Estos dispositivos se hicieron populares
Estos dispositivos se hicieron populares en programas de televisión, a pesar de tener una base científica. (Imagen Ilustrativa Infobae)

Sin embargo, las fluctuaciones de temperatura pueden ser causadas por múltiples factores no relacionados con lo sobrenatural, como corrientes de aire o diferencias en la estructura del edificio, lo que limita la validez de estas observaciones.

  • Spirit Boxes (Cajas de espíritu)

El último dispositivo de la lista, y quizás el más intrigante, es la Spirit Box. Este aparato, diseñado específicamente para la caza de ´fantasmas´, funciona como una radio que barre rápidamente diferentes frecuencias, generando un ruido blanco en el proceso. La idea es que los espíritus pueden comunicarse a través de breves palabras o frases que se perciben entre las estaciones de radio.

La Spirit Box se usa en sesiones en las que los investigadores formulan preguntas y esperan respuestas en el ruido generado. Perp este método enfrenta dos problemas: primero, el dispositivo recoge fragmentos de emisiones de radio reales, lo que podría explicar las palabras escuchadas. Segundo, el ruido blanco es un estímulo perfecto para la pareidolia, haciendo que los investigadores oigan lo que esperan o quieren oír, en lugar de lo que realmente se transmite.

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