Controla tu iPhone con los ojos y deja de perder tiempo activando esta nueva función de iOS 18

Con la llegada de iOS 18, Apple ofrece la posibilidad de controlar el iPhone con los ojos gracias a la función de seguimiento ocular, una herramienta de accesibilidad, pero que puede ser aprovechada por cualquier usuario para facilitar el uso del dispositivo.

Esta función, diseñada inicialmente para los Apple Vision Pro, ahora llega al iPhone y iPad, permitiendo a los usuarios interactuar con su dispositivo sin necesidad de tocarlo y simplemente darle indicaciones con los ojos.

El seguimiento ocular es una función que permite controlar el iPhone o el iPad con el movimiento de los ojos. A través de la cámara frontal del dispositivo, se detecta la dirección de la mirada del usuario, lo que permite interactuar con los elementos en pantalla de una forma completamente nueva.

Un puntero sigue el movimiento de los ojos y, cuando el usuario fija la mirada en un elemento, se resalta. Si se mantiene la mirada durante unos segundos, se ejecuta una acción, como un toque o un deslizamiento, similar al que haríamos con los dedos.

Esta funcionalidad procesa toda la información directamente en el dispositivo, lo que garantiza la privacidad y seguridad de los datos del usuario. Apple ha pensado en todo tipo de personas al desarrollar esta herramienta, desde quienes tienen limitaciones físicas hasta aquellos que simplemente buscan una nueva forma de interactuar con su dispositivo en situaciones específicas, como cuando las manos están ocupadas o sucias.

Activar esta nueva función es un proceso sencillo, pero requiere de iOS 18 y un iPhone compatible, como los modelos a partir del iPhone 12 o el iPhone SE de tercera generación. Para activar el seguimiento ocular, sigue estos pasos:

1. Ve a Ajustes en tu iPhone.
2. Desplázate hasta la sección de Accesibilidad.
3. Busca la opción de Seguimiento ocular y actívala.
4. Sigue las instrucciones en pantalla para calibrar la función. Esto implica seguir con los ojos el movimiento de un punto en diferentes ubicaciones de la pantalla. Este paso es crucial, ya que permite que el dispositivo registre con precisión el movimiento de la mirada.

Es importante tener en cuenta que la calibración debe repetirse cada vez que se encienda la función. Además, para obtener los mejores resultados, es recomendable que el iPhone esté colocado sobre una superficie estable y a una distancia aproximada de 50 cm del rostro. La cámara debe tener una vista clara del rostro y una buena iluminación para captar correctamente el movimiento ocular.

Una vez activada la función, el seguimiento ocular permite realizar varias acciones en el dispositivo. Aquí algunos ejemplos de lo que puedes hacer:

• Navegar por los menús y aplicaciones: al fijar la mirada en una aplicación o un ícono, este se resaltará. Mantener la mirada en un punto específico activa un temporizador de permanencia, y al finalizar, se ejecuta la acción predeterminada, como abrir la app o seleccionar una opción.
• Realizar gestos adicionales: la función también habilita un panel similar a AssistiveTouch, lo que permite acceder al centro de control, navegar entre pantallas o realizar movimientos de deslizamiento horizontal y vertical sin necesidad de tocar la pantalla.
• Acciones automáticas: para aquellos que requieren un mayor nivel de accesibilidad, se puede activar el control de permanencia, que realiza automáticamente una acción después de mantener la mirada fija en un elemento durante un tiempo determinado.

Además, la función de seguimiento ocular es completamente personalizable. Los usuarios pueden ajustar el suavizado del puntero, es decir, la rapidez o lentitud con que sigue el movimiento de los ojos. También se puede habilitar la opción de “saltar al ítem”, lo que permite que el puntero se mueva automáticamente al elemento más cercano a la zona donde se está mirando.