Cuida la batería de tu computadora portátil con estas recomendaciones prácticas y rápidas

La batería es una preocupación constante entre los usuarios de computadores portátiles. Es imposible que con el tiempo no se desgaste y su autonomía sea cada vez menor. Por eso es importante seguir ciertas recomendaciones para alargar su tiempo de vida.

Muchos de estos trucos son hábitos sencillos del día a día, que se deben convertir en buenas costumbres, así como las que automatizamos con los procesos de carga del celular o el ahorro de energía con los electrodomésticos del hogar.

• Carga tu portátil de manera inteligente

Uno de los aspectos más importantes en el cuidado de la batería es la forma en que se realiza la carga. Es común pensar que cargar la batería al 100% y dejar que se descargue completamente es lo más conveniente, pero este hábito puede ser perjudicial a largo plazo. Lo recomendable es mantener la carga de la batería entre el 20% y el 80%. Este rango de carga ayuda a reducir el estrés en las celdas de la batería, prolongando así su vida útil.

Además, es aconsejable evitar dejar el portátil conectado al cargador durante largos periodos de tiempo una vez que la batería ha alcanzado el 100%. Aunque muchos equipos modernos cuentan con sistemas que detienen la carga automáticamente, mantener el dispositivo conectado puede generar un calor innecesario que, a largo plazo, podría reducir la eficiencia de la batería. Por lo tanto, lo ideal es desconectar el cargador una vez que la batería esté completamente cargada.

• Controla la temperatura de tu portátil

El calor es uno de los principales enemigos de las baterías de litio, las más comunes en las laptops actuales. Mantener el dispositivo a temperaturas extremas, ya sean altas o bajas, puede dañar permanentemente la batería y reducir su capacidad de retener carga.

El sobrecalentamiento puede ocurrir con mayor frecuencia cuando usamos el portátil en superficies suaves, como la cama o el sofá, que bloquean la ventilación y aumentan la temperatura interna del dispositivo. Para evitar este problema, es recomendable utilizar siempre el portátil sobre una superficie plana y dura que permita una buena circulación de aire.

La exposición directa al sol o a fuentes de calor intensas también puede elevar rápidamente la temperatura de la batería, afectando su rendimiento. Si trabajas al aire libre, trata de mantener el portátil en la sombra y evita dejarlo en el automóvil durante los días calurosos.

Para quienes buscan una solución de mayor impacto, una base de refrigeración es la mejor opción. Estas bases están diseñadas para mejorar la ventilación y reducir la temperatura del dispositivo.

• Configura el ahorro de energía en tu portátil

Otro aspecto esencial en el cuidado de la batería es la configuración del sistema operativo. Ajustar ciertas opciones de energía puede hacer que el portátil consuma menos batería, aliviando la carga sobre la misma y prolongando su vida útil.

Uno de los componentes que más energía consume en un portátil es la pantalla. Reducir el brillo a un nivel cómodo para la vista puede ahorrar una cantidad considerable de batería. Además, si no estás utilizando funciones como el Wifi, Bluetooth, o cualquier otro periférico, es recomendable desactivarlos.

La mayoría de los sistemas operativos incluyen un modo de ahorro de energía que optimiza el rendimiento del portátil para reducir el consumo de batería. Activar este modo cuando se trabaja en tareas que no requieren mucha potencia, como escribir documentos o navegar por internet, es una práctica recomendada para extender la duración de la batería.

• Cuidados especiales para computadores gamer

Las laptops gamer, debido a su alta demanda de rendimiento, requieren cuidados especiales para mantener la batería en buen estado. Uno de los consejos más importantes es optimizar la configuración de energía para priorizar el rendimiento durante las sesiones de juego y el ahorro de energía en situaciones menos exigentes.

El uso de una base de refrigeración es casi indispensable para estos equipos, ya que ayuda a disipar el calor generado durante el juego y previene el sobrecalentamiento. Además, es recomendable monitorear las temperaturas del dispositivo utilizando software especializado para asegurarse de que no se excedan los niveles seguros.

Otra práctica importante es limitar las tareas en segundo plano mientras se juega. Cerrar aplicaciones y procesos no esenciales minimiza el consumo de energía y permite que la batería se concentre en el rendimiento del juego. Asimismo, mantener actualizados los controladores gráficos puede mejorar la eficiencia y el rendimiento de la tarjeta gráfica, lo que puede influir en la duración de la batería.