Conoce los peligros de los paneles solares en casa cuando hay una mala instalación

La creciente popularidad de los paneles solares como una solución sostenible para la generación de energía ha llevado a un aumento significativo en su instalación en diversas superficies, incluidos los balcones de edificios residenciales.

Sin embargo, esta tendencia ha suscitado preocupaciones importantes en naciones europeas como Países Bajos, donde el Real Instituto Holandés de Normalización (NEN) ha emitido una advertencia sobre los riesgos asociados con la instalación de paneles solares en balcones sin las medidas de seguridad adecuadas.

El NEN destaca que la instalación incorrecta de estos artefactos puede derivar en graves peligros, como incendios y caídas por las condiciones climáticas adversas, como fuertes vientos o deslizamientos. Este tipo de incidentes no solo pone en riesgo la seguridad de los residentes, sino también, compromete la integridad del edificio.

Uno de los riesgos adicionales señalados por el NEN es la posible evaporación o fuga de agua de los contenedores utilizados como contrapeso. Esta pérdida de peso puede hacer que los paneles se vuelvan peligrosamente inestables, especialmente en situaciones de viento fuerte.

Asimismo, la acumulación de nieve o agua de lluvia en los paneles puede añadir un peso extra significativo, lo que podría sobrecargar el balcón o incluso provocar el colapso del techo.

Otro aspecto crítico abordado por el NEN es la conexión eléctrica de los paneles solares al sistema de energía del hogar. La entidad ha advertido que conectar un inversor a cualquier toma de corriente sin las precauciones adecuadas puede sobrecargar los circuitos eléctricos y causar explosiones.

Además, el NEN ha resaltado la falta de claridad en los manuales de instalación en cuanto a la conexión correcta de los paneles solares al inversor. Un error común es el uso de cables alargadores para conectar múltiples aparatos, lo que aumenta el riesgo de sobrecargas eléctricas.

Este tipo de prácticas inadecuadas, a menudo promovidas por manuales mal redactados, representan un peligro significativo para la seguridad de los usuarios y sus hogares.

La entidad ha enfatizado la necesidad de asegurar los paneles solares con el peso adecuado para evitar accidentes. En este sentido, se recomienda el uso de adoquines o contenedores de plástico llenos de agua como contrapeso.

No obstante, NEN advierte que la cantidad de peso necesario puede variar en función de diversos factores, como la ubicación del edificio, la altura del balcón, y las condiciones meteorológicas locales. Esto complica la tarea de asegurar los paneles correctamente, y la falta de detalles específicos en muchos manuales de instalación puede empeorar el problema.

Para mitigar los riesgos asociados, el NEN ha recomendado que la instalación de sistemas fotovoltaicos en balcones se realice siguiendo las normativas de seguridad establecidas por cada jurisdicción nacional. Estas normas especifican cómo aplicar los sistemas de energía solar de manera que no comprometan la estructura exterior del edificio.

Para evitar estos peligros, los puntos de conexión de los sistemas solares deben estar aislados en circuitos finales separados, lo que garantiza una protección eficaz contra sobrecorrientes en todas las circunstancias.

Ante estos riesgos, el NEN ha hecho un llamado a los consumidores para que se informen adecuadamente y sigan todas las recomendaciones de seguridad al instalar sistemas fotovoltaicos en sus balcones.

La entidad enfatiza que la instalación de paneles solares no es una tarea trivial y que, si no se realiza correctamente, puede tener consecuencias graves.

Por ello, recomienda encarecidamente la contratación de profesionales cualificados para la instalación de estos sistemas, así como la consulta de las normativas locales y la revisión detallada de los manuales de instalación.

La autoridad ha dejado claro que la instalación segura de estos sistemas es una responsabilidad compartida entre fabricantes, instaladores y consumidores. Solo así se podrá garantizar que la transición hacia energías limpias no se realice a expensas de la seguridad.