Mitos y realidades de la Inteligencia Artificial en el marketing, según Google

La inteligencia artificial (IA) se ha convertido en un factor fundamental en la transformación de organizaciones y negocios en todo el mundo. Así lo asegura Adriana Noreña, vicepresidenta de Google para Hispanoamérica, en una entrevista con Ramiro Sanchez, CMO de Google Latinoamérica.

Noreña expone cómo esta tecnología no solo permite realizar tareas con mayor rapidez y eficiencia, sino que posibilita hacerlas de modos completamente distintos a los tradicionales.

Ramiro Sanchez abrió la conversación subrayando la importancia de la inteligencia artificial en el presente y futuro inmediato. “Si 2023 fue el año en el que el mundo experimentó la inteligencia artificial, 2024 marca el rumbo de cómo impactará en la sociedad y en los negocios en las décadas venideras”, afirmó Sanchez, haciendo eco sobre la necesidad imperiosa de pasar de la euforia inicial a la acción concreta.

Adriana Noreña destaca que la IA está diseñada para resolver grandes problemas tanto en las organizaciones como en la vida cotidiana. La verdadera revolución reside en cómo esta tecnología obliga a los líderes a cambiar su mentalidad para aprender y avanzar. Por lo tanto, uno de los mitos más comunes es la percepción exagerada de lo que la IA puede hacer en marketing. Aunque es una herramienta poderosa, ella enfatiza que el talento humano sigue siendo fundamental.

La inteligencia artificial no es solo una moda pasajera; es un cambio de paradigma que transforma los procesos creativos y estratégicos. “La clave está en entender que la IA no solo nos permite hacer las cosas de manera más eficiente y rápida, sino hacerlas de un modo completamente diferente a como se hacían antes”, asegura Adriana Noreña.

Las ventajas de la IA en el marketing son significativas. Según varios análisis, esta tecnología ayuda en la personalización masiva y en la creación de experiencias del cliente altamente personalizadas. Gracias a la IA, las estrategias de marketing pueden ser mucho más precisas y focalizadas, permitiendo a las empresas comunicarse de manera más efectiva con sus consumidores.

Sin embargo, Noreña advierte que, a pesar de sus capacidades asombrosas, la IA no es infalible. “Siempre se necesitará el talento humano en el asiento del conductor”. Aquí es donde entra en juego la importancia de capacitar a profesionales en el uso y aprovechamiento de estas tecnologías emergentes.

Durante la entrevista se analiza también el impacto de la IA en diversos sectores, desde el análisis de datos hasta la creación de contenido. Noreña explica cómo la IA está permitiendo a las empresas analizar enormes cantidades de datos a velocidades nunca antes vistas, lo que facilita la identificación de tendencias y patrones que pueden beneficiar enormemente la toma de decisiones.

El impacto significativo de la IA en el campo de la innovación es otro tema central que se aborda en la conversación. Con el uso de la IA, las empresas pueden crear productos y servicios que antes eran inimaginables. La capacidad de esta tecnología para aprender y adaptarse permite a las organizaciones ser mucho más ágiles y adaptativas en un entorno de mercado en constante cambio.

Además de la eficiencia y la rapidez, la IA tiene el potencial de ofrecer nuevos modelos de negocio. Las empresas están descubriendo cómo pueden transformar sus operaciones y procesos comerciales a través de la automatización inteligente. Este cambio no solo reduce los costos operativos, sino que también abre nuevas vías para la innovación y el crecimiento.

Adriana Noreña refuerza la idea de que, en este periodo de transformación tecnológica, los líderes empresariales deben adoptarse para mantenerse competitivos. La mentalidad de aprendizaje continuo y adaptabilidad es esencial en un mundo donde las tecnologías cambian rápidamente. “La verdadera revolución está en el cambio de mentalidad”, afirmó a Ramiro.

Finalmente, la charla concluye con una mirada hacia el futuro con optimismo sobre cómo la IA continuará evolucionando y dando forma a la manera en que vivimos y trabajamos. El reto, según ella, será asegurarse de que esta transformación sea inclusiva y beneficiosa para todos los sectores de la sociedad.