¿Recuerdas MSN Messenger y el famoso zumbido? Entérate sobre qué pasó con este emblemático chat

Llevar después colegio a seguir hablando con amigos solo era posible gracias a MSN Messenger. Un lugar donde enviamos zumbidos, nuestros primeros stickers, cambiábamos GIFs por palabras o letras, compartíamos qué estábamos escuchando y creamos estados en una combinación de letras ‘KhE sE Ve1a’ algo así. Épocas que terminaron y que surgieron hace 25 años.

El 22 de julio de 1999, Microsoft lanzó MSN Messenger, una plataforma de mensajería instantánea que se convertiría en un fenómeno global, especialmente entre los jóvenes de la época. En aquellos años, donde Internet apenas comenzaba a ser parte de los hogares, esta aplicación abrió el camino para lo que hoy es WhatsApp, Facebook Messenger y demás aplicaciones.

Con una interfaz sencilla y funciones innovadoras como el envío de emoticonos y los icónicos zumbidos, la plataforma rápidamente conquistó a millones de usuarios en todo el mundo. Pero, qué hizo a MSN Messenger tan popular y cuáles fueron los motivos de su desaparición.

A mediados de los 90, en pleno lanzamiento de Windows 95, Microsoft enfrentó su primer gran reto: la popularización de Internet en los hogares. La empresa estaba a punto publicar su nuevo sistema operativo y, en preparación, Bill Gates mandó un memorándum a su equipo ejecutivo titulado “The Internet Tidal Wave”.

En este documento, Gates resaltaba la importancia que iba a tener Internet en el futuro de Microsoft, comparándolo con avances tecnológicos significativos como la introducción del primer PC por IBM en 1981.

MSN Messenger nació en este contexto de transformación tecnológica. Inicialmente, los proveedores de conexión a Internet como AOL y Microsoft con MSN ofrecían servicios cerrados donde los usuarios solo podían acceder al contenido proporcionado por el proveedor.

Sin embargo, a finales de los 90, comenzaron a popularizarse los servicios de mensajería instantánea, proporcionando una forma nueva y abierta de comunicación. En 1997, AOL lanzó AIM (AOL Instant Messenger), y dos años después, Microsoft presentó MSN Messenger como su respuesta, permitiendo a los usuarios chatear con amigos de una manera más libre y directa.

Desde su lanzamiento, MSN Messenger se destacó por su facilidad de uso y por las características que ofrecía. Entre las funcionalidades más queridas se encontraban los emoticonos, los zumbidos que servían para llamar la atención del otro usuario, y la posibilidad de cambiar el estado para mostrar si uno estaba disponible, ocupado o ausente.

Además, permitía personalizar el mensaje de estado, una característica que se convirtió en el germen de las redes sociales actuales.

El uso de MSN Messenger se convirtió en un ritual diario para millones de adolescentes que, después de llegar del colegio, se conectaban para chatear con amigos. Este programa facilitó la comunicación y ofreció un entorno más privado comparado con las llamadas telefónicas.

En 2005, MSN Messenger fue rebautizado como Windows Live Messenger, un cambio que buscaba reflejar una nueva era digital. A pesar de este rebranding, la plataforma comenzó a enfrentar serios desafíos.

A mediados de la primera década del 2000, comenzaron a surgir competidores más robustos y con propuestas más atractivas. Redes sociales como Facebook, lanzada en 2004, y aplicaciones de mensajería como WhatsApp, lanzada en 2009, ofrecían una experiencia de usuario más completa y conveniente, especialmente en dispositivos móviles.

La llegada y popularización de los celulares marcaron un punto de inflexión. Mientras que MSN Messenger estaba diseñado principalmente para ordenadores, aplicaciones como WhatsApp permitían a los usuarios chatear en cualquier momento y lugar desde sus móviles.

La competencia creciente no fue el único factor que contribuyó al declive de MSN Messenger. El modelo de negocio también jugó un papel crucial. Los servicios de mensajería como AIM y MSN Messenger inicialmente no generaban ingresos directos significativos y servían principalmente como un anzuelo para mantener a los usuarios dentro del ecosistema de sus proveedores de internet.

Sin embargo, a medida que la web se abrió y los usuarios encontraron más contenido fuera de estos portales, se hizo evidente que este modelo no era sostenible.

En 2013, Microsoft tomó la difícil decisión de integrar Windows Live Messenger con Skype, un servicio de videollamadas que había adquirido en 2011. Esta fusión marcó el fin de una era. Aunque Windows Live Messenger continuó operando de forma independiente en China hasta octubre de 2014.

A pesar de su desaparición, MSN Messenger dejó un legado duradero en la historia de la comunicación digital. Para muchos, la plataforma no fue solo una herramienta de mensajería, sino un espacio donde se forjaron amistades y se vivieron momentos inolvidables.

25 años después de su lanzamiento, MSN Messenger sigue siendo recordado con nostalgia por aquellos que vivieron su época dorada. Su influencia es evidente en la forma en que interactuamos en línea, y su legado perdura en las plataformas de comunicación que usamos hoy en día.