Cuatro errores que cometes al cargar el celular y que están dañando la batería

Aunque parezca una acción sencilla y rutinaria, la forma en que se carga un celular puede mejorar o disminuir el funcionamiento de su batería y otras características.

Esto es producto que, en el caso de que se cometan errores frecuentes en este proceso, los daños que se pueden presentar pueden incluir la pérdida de capacidad de carga, lo que obliga a recargar el dispositivo con mayor frecuencia. También, puede producirse un sobrecalentamiento.

Por esta razón, a continuación, se presentan cuatro errores habituales que se podrían estar cometiendo y que estarían dañando la batería del celular.

Uno de los errores más comunes es dejar el celular conectado al cargador durante toda la noche. Aunque resulta conveniente despertarse con la batería al 100%, esta práctica puede ser perjudicial a largo plazo.

Cuando la batería alcanza su capacidad máxima, se producen pequeños ciclos de carga-descarga que generan calor. Este incremento de temperatura puede deteriorar los componentes internos de la batería con el tiempo.

Algunos fabricantes ya incluyen software que gestiona la carga para minimizar estos efectos, pero no todos los dispositivos cuentan con esta tecnología.

Otro error atribuible es el uso de cargadores y cables no originales o de baja calidad. Estos dispositivos, en muchos casos, no están diseñados con las especificaciones adecuadas para el móvil, lo que puede provocar una carga inconsistente o incluso dañina.

Además, un cargador inadecuado puede no tener los sistemas de seguridad necesarios para proteger tu celular de sobrecargas o picos de corriente.

Utilizar siempre los accesorios originales del fabricante o productos de marcas reconocidas que cumplan con las especificaciones de tu celular, es esencial para garantizar una carga segura y prolongar la vida útil de la batería.

Algunos pueden pensar que es bueno dejar que la batería del celular se descargue por completo antes de volver a cargarlo. Sin embargo, las baterías de iones de litio, que son las más comunes en los teléfonos inteligentes actuales, no funcionan de la mejor manera con este método.

Estas baterías funcionan de manera óptima cuando se mantienen entre el 20% y el 80% de su capacidad. Dejar que la batería se descargue por completo con regularidad le puede provocar una mayor degradación y reducir su capacidad a largo plazo. Por tanto, es aconsejable evitar que la batería baje del 20% antes de conectarla al cargador.

Las baterías de los teléfonos son muy sensibles a las temperaturas extremas. Cargar el celular en un lugar muy caluroso, como el interior de un automóvil en verano, o en un entorno extremadamente frío, puede afectar negativamente a la capacidad y eficiencia de la batería.

Ambos extremos de temperatura pueden causar daños irreversibles y reducir considerablemente la vida útil de los componentes internos. Por lo tanto, es recomendable cargar el celular en entornos con temperaturas moderadas y mantenerlo alejado de fuentes de calor o frío durante el proceso de carga.

Emplear modos de ahorro de energía cuando el teléfono no está en uso, evitar el uso de aplicaciones intensivas mientras el celular está cargando y mantener el software del dispositivo actualizado son medidas que pueden contribuir a una mejor gestión de la carga y la conservación de la batería.

Los teléfonos inteligentes modernos están diseñados con sistemas de protección avanzados, pero adoptar hábitos de carga conscientes es fundamental para asegurar que la batería se mantenga en buen estado durante el mayor tiempo posible.

De este modo, no solo se mejora la experiencia de uso diaria, sino que también, se contribuye a la sostenibilidad al disminuir la necesidad de reemplazar dispositivos con frecuencia.