Un hombre británico, identificado como Richard por el medio inglés The Times, ha presentado una demanda contra Apple, por más de 6 millones de dólares, tras descubrir que su iPhone había revelado sus infidelidades a su esposa.
Richard sostiene que, a pesar de borrar mensajes comprometedores de su teléfono, estos se sincronizaban automáticamente con otros dispositivos vinculados a su cuenta de iCloud, incluidos un iMac en su hogar.
El implicado asegura que nunca supo sobre esta medida, y pretende una retribución económica por parte de la empresa tecnológica para reparar el suceso experimentado.
Por qué la esposa se dio cuenta de las infidelidades
Según informó The Times, Richard había mantenido contacto con trabajadoras sexuales durante varios años utilizando su iPhone. A pesar de tomar medidas para eliminar los mensajes comprometedores de su dispositivo móvil, estos seguían apareciendo en el iMac compartido con su esposa.
El descubrimiento de estos mensajes llevó a la separación de la pareja y a una demanda de divorcio que Richard eventualmente perdió. La revelación de estos mensajes en el hogar común tuvo un impacto devastador en la vida personal y familiar, argumentó la “víctima”.
Entonces Richard, buscando una compensación, ha demandado a Apple por un monto de 5 millones de libras – más de 6 millones de dólares – además de los costes del juicio.
Su abogado, Simon Walton del bufete Rosenblatt, según del medio citado, ha acusado a Apple de ser negligente al no advertir claramente a sus usuarios que los mensajes borrados en un dispositivo pueden seguir estando accesibles en otros sincronizados con la misma cuenta de iCloud.
Qué error pudo haber cometido Apple
Walton subraya que Apple ha engañado a los consumidores al no proporcionar información exhaustiva sobre el funcionamiento de su sistema de sincronización de datos.
“Apple ha actuado de manera engañosa con sus usuarios. La falta de una advertencia transparente sobre la naturaleza de la sincronización de mensajes ha violado los derechos de privacidad de mi cliente”, afirmó Walton en declaraciones recogidas por The Times.
El abogado también hizo un llamado a otros usuarios que pueden haberse visto afectados por situaciones similares a unirse a una demanda colectiva.
Según Walton, esta posible demanda colectiva podría ejercer más presión sobre Apple para proporcionar una mayor transparencia y control sobre la información, que los dispositivos sincronizan por defecto.
Por qué demandaron a Apple
En declaraciones a The Times, Richard expresó su frustración por la falta de claridad en las políticas de Apple. “Si te dicen que un mensaje se ha borrado, tienes derecho a creer que se ha borrado”, manifestó Richard.
Añadió que, de haber contado con una advertencia más clara, la situación podría haberse manejado de manera distinta, evitando el daño irreparable a su matrimonio y su reputación.
Richard también mencionó que su caso podría ser solo una muestra de un problema más amplio que afecta a muchos usuarios de Apple. Para él, no se trata solo de una cuestión personal, sino de la necesidad de que la empresa sea más transparente con respecto a cómo manejan los datos personales de sus clientes.
Qué precedente puede dejar esta demanda a Apple
La demanda de Richard contra Apple podría ser pionera en una serie de acciones legales que exploren los límites de la responsabilidad de las empresas tecnológicas en la protección de la privacidad de los usuarios.
Si su caso tiene éxito, podría sentar un precedente para que otras personas tomen medidas similares contra Apple, o cualquier otra compañía que no informe adecuadamente sobre cómo se manejan los datos personales.
La situación también plantea preguntas sobre la necesidad de que los usuarios estén mejor educados y concienciados sobre las tecnologías que utilizan diariamente.
A medida que la tecnología sigue avanzando y las interconexiones entre dispositivos se vuelven más complejas, es fundamental que tanto las empresas tecnológicas como los usuarios mantengan un enfoque claro y consciente sobre la gestión de la privacidad y la seguridad de los datos.