Con la llegada del verano y el inicio de las vacaciones en algunas partes del mundo, se incrementan los riesgos de ciberataques dirigidos a turistas a través de sus dispositivos móviles.
Durante estos periodos de descanso, el uso del móvil para diversas actividades como tomar fotografías, buscar direcciones o realizar consultas hace que las personas recurran a cargadores públicos, aumentando su vulnerabilidad.
Uno de los métodos de ataque más recientes es el “juice jacking”, donde ciberdelincuentes instalan software malicioso en dispositivos a través de puertos USB públicos. Este malware les permite acceder a información confidencial y tomar control remoto del móvil de la víctima.
Por qué es peligroso conectar el celular en un lugar público
El uso de cables USB infectados en lugares públicos, como aeropuertos o cafeterías, facilita este tipo de ciberataques. Los ciberdelincuentes colocan dispositivos de carga alterados que, al ser utilizados por los turistas, inyectan silenciosamente el malware en el dispositivo.
Para entender la magnitud del problema, se deben considerar las diferentes formas en las que este tipo de ataque puede afectar los datos personales. La información comprometida puede incluir desde fotos personales, contactos y mensajes hasta datos bancarios y credenciales de acceso a diversas plataformas.
El riesgo es considerable, dado que los ciberdelincuentes tienen la capacidad de vender esta información en el mercado negro o usarla para actividades fraudulentas.
Cómo prevenir ser víctima de ciberataques en vacaciones
Los expertos en ciberseguridad recomiendan llevar siempre un cargador portátil o usar cable de carga propia. En situaciones de emergencia, se sugiere desactivar la transferencia de datos del dispositivo antes de conectarse a puntos de carga públicos.
Esta medida preventiva puede proporcionar un nivel adicional de seguridad, aunque no es infalible si el dispositivo ya ha sido comprometido por otros medios.
Además, se aconseja evitar compartir el cable de carga con personas desconocidas, debido a que también puede ser una fuente potencial de infección de malware.
Cómo ciberdelincuentes se conectan al celular sin autorización
La amenaza no se limita únicamente al “juice jacking”. Otros métodos como el “bluesnarfing”, que explota la conexión Bluetooth, también se están volviendo más comunes. En este tipo de ataques, los delincuentes acceden a los dispositivos móviles a través de conexiones Bluetooth no seguras.
Del mismo modo, la información robada puede incluir datos de contacto, correos electrónicos e incluso archivos completos almacenados en el móvil.
Para protegerse de este tipo de intrusión, es importante mantener el Bluetooth apagado cuando no se esté utilizando y configurar el dispositivo para que sea indetectable por otros dispositivos Bluetooth.
Qué otros riesgos tiene el dispositivo móvil
Además de los ataques físicos a través de cables y conexiones, las estafas en plataformas online, y los correos fraudulentos de entidades públicas, evidencian una creciente sofisticación en las tácticas de los ciberdelincuentes. Estos métodos engañan a los usuarios para que proporcionen información personal o financiera bajo pretextos falsos.
Las estafas en plataformas de compraventa suelen involucrar ofertas demasiado buenas para ser verdad, mientras que los correos electrónicos fraudulentos de instituciones oficiales intentan crear una sensación de urgencia para que la víctima actúe precipitadamente.
Guía práctica para no sufrir robo de información en vacaciones
Para protegerse, es fundamental mantenerse informado y seguir las recomendaciones de los especialistas en ciberseguridad. Algunas de las medidas que se pueden tomar incluyen:
- Siempre que sea posible, utilizar cargadores propios o baterías portátiles. y asegurarse de que tanto el sistema operativo como las aplicaciones están actualizadas con los últimos parches de seguridad.
- Utilizar contraseñas fuertes y habilitar la autenticación en dos pasos en todas las cuentas posibles.
- Al conectar un dispositivo móvil a una estación de carga pública, desactivar cualquier función que permita la transferencia de datos automática.
- Mantener el Bluetooth apagado cuando no se esté utilizando y asegurarse de configurar el dispositivo para que sea indetectable.
- Desconfiar de correos electrónicos o mensajes que soliciten información personal o financiera urgente, y comprobar siempre la autenticidad contactando directamente con la institución en cuestión.
En última instancia, la mejor defensa contra estos ciberataques es la precaución y la conciencia de los riesgos. La educación sobre los métodos de ciberseguridad y mantenerse informado sobre las nuevas tácticas utilizadas por los ciberdelincuentes son herramientas clave para protegerse y disfrutar de unas vacaciones seguras.