La Unión Europea presentó un sistema de réplicas digitales del planeta Tierra, para simular las repercusiones del cambio climático, desarrolladas mediante el uso de supercomputación e inteligencia artificial.
Este sistema tiene como objetivo prever futuros escenarios climáticos que ponen en riesgo la supervivencia humana y de otras especies, con una precisión sin precedentes, junto con permitir a cada sector de la sociedad adaptarse al impacto de este fenómeno.
Este proyecto fue titulado “Destination Earth”, y Margrethe Vestager, vicepresidenta de la Comisión Europea responsable de dicha digitalización, destacó a medios de comunicación, que es una oportunidad de analizar a detalle el planeta y evidenciar como las políticas ambientales inciden en el clima.
Cómo funciona la réplica digital de la Tierra
El sistema desarrollado ofrece detalladas simulaciones del planeta Tierra que serán de gran utilidad en diversos sectores, tales como la agricultura, energías renovables y gestión del agua.
Proporcionando información crítica para la adaptación al cambio climático, esta herramienta permite la predicción de fenómenos climáticos complejos y sus impactos socioeconómicos, lo cual es esencial para mejorar la toma de decisiones y el diseño de estrategias de mitigación.
Vestager enfatizó la importancia de utilizar esta herramienta para limitar el aumento de las temperaturas globales a menos de 1,5 ºC respecto a los niveles preindustriales para finales de siglo.
La posibilidad de predecir el futuro con inteligencia artificial
El proyecto “Destination Earth” que integra inteligencia artificial, permitirá a los científicos y responsables políticos explorar la evolución del sistema terrestre bajo diversos escenarios hipotéticos durante varias décadas.
Aunque algunas aplicaciones del sistema estarán disponibles para el público general, la mayoría estarán reservadas para centros de investigación y entidades públicas debido al alto consumo de recursos computacionales necesarios para ejecutar las simulaciones.
Asimismo, las simulaciones precisas y dinámicas del sistema, alimentadas por vastos conjuntos de datos observacionales, ofrecerán herramientas para anticipar los impactos regionales del cambio climático, detectar peligros naturales y gestionar los ecosistemas de manera más eficaz.
Los líderes de este avance destacaron el potencial de esta iniciativa para proteger la biodiversidad y gestionar recursos vitales en un entorno global cambiante, señalando que la ciencia y la tecnología deben trabajar juntas para enfrentar los retos de la actualidad.
Cómo se extenderá esta tecnología en Europa
Este sistema ha sido desarrollado desde 2021 por una colaboración entre el Centro Europeo de Previsiones Meteorológicas a Medio Plazo, la Agencia Espacial Europea y la Organización Europea para la Explotación de Satélites Meteorológicos, con el apoyo de más de cien socios públicos y privados.
El corazón tecnológico del proyecto se encuentra en el superordenador LUMI EuroHPC, localizado en Kajaani, Finlandia. Este emplazamiento utilizado es uno muy particular, pues está situado en las instalaciones de un antiguo molino, lo que ha permitido minimizar costos e impactos ambientales.
Además del LUMI, el superordenador está entre los cinco que operará la UE para este tipo de proyectos, incluidos MareNostrum 5 en Barcelona y Leonardo en Bolonia, lo que subraya la impresionante capacidad tecnológica de Europa en el campo de la supercomputación.
Estos avances tecnológicos no solo benefician a Europa, sino que también tienen el potencial de influir globalmente, proporcionando información crítica que países de todo el mundo pueden utilizar para ajustar sus estrategias de lucha y adaptación al cambio climático.
La ciencia y la inteligencia artificial para salvar el planeta Tierra
La tecnología subyacente a este sistema se basa en avanzados recursos de supercomputación, datos e inteligencia artificial desarrollados en la Unión Europea.
La financiación inicial para el sistema ascendió a 210 millones de euros, provenientes de fondos comunitarios, y se prevé una inversión adicional de 168 millones de euros en los próximos dos años para ampliar sus capacidades.
Este sistema de réplicas digitales del planeta Tierra ejemplifica cómo la combinación de recursos y tecnología avanzada puede ofrecer soluciones efectivas y de gran alcance a uno de los problemas más apremiantes de este tiempo.
La Comisión Europea ha puesto en marcha una herramienta que promete cambiar la forma en que se comprende y responde al cambio climático, tanto a nivel regional como global.