Bill Gates, cofundador de Microsoft y reconocido por sus importantes contribuciones tecnológicas, se ha destacado también por la eficacia de su memoria a lo largo del tiempo. A sus 68 años, mantiene una capacidad de recuerdo envidiable, en gran parte gracias a un secreto que reside en una antigua técnica griega de visualización.
Recordemos que la memoria humana es una facultad que permite almacenar y recuperar información cuando se necesita. Y contrario a la creencia popular de que la capacidad de recordar declina inevitablemente con la edad, estudios recientes y casos destacados, como el de Gates, demuestran que es posible mejorarla significativamente con prácticas específicas.
El líder tecnológico ha compartido en diversas ocasiones su estrategia para fortalecer su memoria, atribuyendo gran parte de su éxito a las técnicas aprendidas del libro “Moonwalking with Einstein: The Art and Science of Remembering Everything”, de Joshua Foer. Una obra que relata la experiencia del autor al adentrarse en el mundo de los concursos de memoria, un viaje que le permitió descubrir y aplicar técnicas milenarias con efectividad comprobada.
Texto que cambió la percepción de Gates, debido a que Foer desmitifica en su investigación la idea de que una buena memoria es exclusivamente un don genético, argumentando que, con entrenamiento, es posible realizar tareas mnemónicas extremadamente complejas.
Cómo funciona la técnica griega utilizada por Gates
Una de las técnicas más relevantes que Gates adoptó del libro es la práctica de visualización, conocida como “el palacio de la memoria”. Este método consiste en crear espacios imaginarios donde cada elemento o habitación se asocia con fragmentos de la información que se quiere recordar.
Según el multimillonario en su blog personal, Gates Notes, este tipo de entrenamiento mental tiene sus orígenes en la antigua Grecia y está inspirada en la historia de un poeta griego que logró memorizar los nombres de personas desaparecidas tras un derrumbe mediante la visualización de sus ubicaciones.
La eficacia de la técnica radica en su aprovechamiento de la capacidad innata del cerebro humano para recordar imágenes visuales y espaciales. Al vincular información abstracta o compleja con imágenes concretas y situarlas en un contexto espacial familiar, se facilita la retención y el recuerdo de la información.
Lo cierto es que la experiencia de Foer, quien tras un año de práctica intensiva consiguió ganar el campeonato de memoria de Estados Unidos y romper un récord al memorizar toda una baraja de cartas, sirve de inspiración para aquellos interesados en mejorar su memoria.
Por qué es una técnica que requiere disciplina
Gates menciona que la implementación de este método requiere práctica y disciplina constante. No se trata de una solución rápida o fácil, sino de un compromiso a largo plazo con el entrenamiento de la memoria. Sin embargo, los resultados obtenidos, como lo demuestra el caso de Gates, bien valen el esfuerzo.
Además, otro aspecto fundamental en el enfoque del magnate hacia la mejora de la memoria es la elección de temas de interés personal para la práctica de estas técnicas. Al concentrarse en estas áreas aumenta la motivación y la conexión emocional con la información, factores que son conocidos por facilitar la memorización.
Es importante destacar que la capacidad para recordar información de manera más eficiente no solo es útil en el ámbito profesional, sino que también puede tener un impacto positivo en la vida personal y en el aprendizaje continuo.
Mientras que la aproximación de Gates a este tema no solo subraya su pasión por el conocimiento y la mejora personal, sino que también proporciona una visión sobre cómo herramientas y técnicas antiguas pueden ser revividas y aplicadas en la era moderna para el desarrollo de habilidades cognitivas.