Tengo una bebé de seis meses en casa y las noches suelen ser cortas para ella y largas para nosotros. En algunas ocasiones es difícil hacer que duerma durante toda la noche y no tenga largas interrupciones. Sin embargo, existe una solución que cuenta con validez científica y a la que podemos acceder gracias a la tecnología: luz roja a través de bombillos inteligentes.
Estos dispositivos cuenta con diferentes opciones de uso, se pueden encender y apagar a través de comandos de voz con asistentes de como Alexa o el Asistente de Google, pero también es posible cambiar su color y la intensidad. Un grupo de funciones que los convierten en un aliado clave para resolver situaciones como estas y ayudar a nuestro hijo a dormir, y que nosotros también lo hagamos.
El poder de la luz roja en el sueño infantil
Investigaciones recientes han claridad sobre el impacto que ciertos colores de luz pueden tener en los ciclos de sueño y vigilia, especialmente en los bebés. Según la neurocientífica Sofia Axelrod, experta en ritmos circadianos, la exposición a la luz roja puede jugar un papel crucial en la regulación del sueño de los bebés durante los primeros meses de vida.
Axelrod, quien ha realizado investigaciones en el laboratorio de genética de la Rockefeller University, señala que la luz roja puede ser una herramienta efectiva para ayudar a los bebés a dormir mejor. Basándose en los descubrimientos sobre los genes reloj que guían nuestro comportamiento de sueño, Axelrod destaca la importancia de controlar la exposición a la luz, tanto para los adultos como para los bebés.
Pero por qué la luz roja es tan beneficiosa para el sueño de los bebés. La clave radica en la forma en que nuestros cuerpos responden a diferentes longitudes de onda de luz. La luz azul, que está presente en dispositivos electrónicos y bombillas convencionales, tiende a aumentar el estado de alerta al suprimir la producción de melatonina, la hormona del sueño.
En contraste, la luz roja no reprime la producción de melatonina, lo que la convierte en una opción ideal para promover el sueño. Además, la luz roja puede ayudar a crear un ambiente tranquilo y relajante, preparando a los bebés para un sueño reparador.
Implementando luces Rojas en el hogar
Gracias a los avances en tecnología de iluminación, es posible incorporar fácilmente luces rojas en el hogar utilizando bombillos inteligentes y luces LED. Esto permite a los padres ajustar el ambiente de la habitación del bebé para promover un sueño más tranquilo y reparador.
Sustituir las bombillas convencionales por bombillas rojas puede marcar una gran diferencia en la calidad del sueño de los bebés. Además, el uso de cortinas opacas para bloquear la luz durante la noche puede complementar esta estrategia, creando un entorno propicio para el descanso.
Pero la mejor solución, en caso de no querer cambiar los bombillos, es usar luces inteligentes. Estos dispositivos pueden ser controlados desde el celular para modificar su color y la intensidad del brillo. De esta forma, en el día tenemos en la habitación la opción de luz azul o amarilla de siempre y en la noche lo cambiamos al modo rojo para empezar la etapa de descanso del bebé o niño.
Numerosos padres han experimentado los beneficios de utilizar luces rojas para mejorar el sueño de sus bebés. La propia Axelrod relata cómo la implementación de este enfoque con su hija, Leah, produjo resultados positivos casi de inmediato.
Expertos en el campo de la pediatría y la neurociencia respaldan esta práctica, destacando su base científica y su capacidad para proporcionar un sueño más reparador tanto para los bebés como para sus cuidadores.