Cómo evitar que mis abuelos caigan en una estafa bancaria

No contestar a números desconocidos, y contactar al banco directamente luego de alguna notificación, son las principales recomendaciones

Varios adultos mayores actúan de buena fe y terminan siendo estafados y perdiendo sumas de dinero. (Foto: Freepik)

En el transcurso del último verano, un caso particular resonó dentro de las numerosas alertas sobre estafas cibernéticas: una madre de familia, de 86 años, fue engañada mediante un correo electrónico que aparentaba ser de su banco, resultando en una pérdida de 600 dólares.

Este suceso no es aislado. Según cifras reveladas por la Comisión Federal de Comercio (FTC) de Estados Unidos, el año pasado los consumidores fueron defraudados con una suma que asciende a aproximadamente 8.800 millones de dólares.

Los informes de la entidad destacan una preocupante realidad: los adultos mayores constituyen el grupo más afectado por esta clase de fraudes, presentando las cifras de pérdida más elevadas en comparación con otros grupos etarios.

Qué implica este tipo de ciberataques

El desconocimiento de estas dinámicas hace que los abuelos sean más susceptibles a este tipo de amenazas. (Imagen ilustrativa Infobae)

Este creciente fenómeno de estafas cibernéticas plantea un desafío significativo para la sociedad, que va más allá de las pérdidas económicas.

Destaca la urgente necesidad de promover un diálogo constructivo y educativo sobre las amenazas que suponen estos fraudes, que con el avance de la tecnología se vuelven cada vez más sofisticados.

Organizaciones de distintas partes del mundo, están en la lucha contra esta problemática, proponiendo estrategias de prevención que pivotan sobre la empatía y la educación intergeneracional.

Cuáles son los modus operandi de los ciberdelincuentes

Los ciberdelicuentes envían enlaces maliciosos para el robo de información. (Foto: Freepik)

Entre las tácticas más nefastas empleadas por los estafadores se encuentran aquellas que manipulan emocionalmente a las víctimas, como las conocidas estafas de “los abuelos” y las románticas.

Estas dinámicas, por su diseño, apuntan a desencadenar una reacción rápida y emocional, aislando a la víctima de posibles fuentes de apoyo.

En el caso de la madre de 86 años, el estafador generó una situación de urgencia que evitó que consultara a sus familiares, subrayando la crítica importancia de mantener líneas de comunicación abiertas y preexistentes que podrían actuar como salvaguardas frente a estas amenazas.

La experiencia acumulada en el enfrentamiento a estos delitos digitales señala que compartir conocimientos y estrategias de prevención en el ámbito familiar y comunitario es crucial.

Cómo prevenir una estafa bancaria

La educación y el acompañamiento son claves para prevenir estafas. (Foto: Shutterstock)

Frente a la astucia y evolución constante de las tácticas de estafa, es esencial reconocer que nadie es inmune, sin importar la edad o el nivel de destreza tecnológica.

Los expertos inciden en este punto, enfatizando la importancia de la educación continua y del apoyo mutuo como herramientas efectivas contra el engaño. Entre las medidas de prevención están:

  • Instruir a los adultos mayores para que nunca proporcionen información personal o financiera mediante canales no verificados.
  • Activar alertas en las cuentas bancarias que notifiquen sobre actividades inusuales o transacciones grandes puede proporcionar una capa adicional de seguridad.
  • Instalar y mantener actualizados el software de seguridad en todos los dispositivos electrónicos, que incluye antivirus y antimalware, así como aplicaciones que bloqueen llamadas o mensajes de fuentes desconocidas, lo cual puede ayudar a filtrar intentos de estafa.

Además de la prevención, se destaca lo primordial que es reportar estos incidentes a las autoridades correspondientes, y de buscar asistencia en líneas de ayuda especializadas.

Cómo educar a tus abuelos de este tipo de ciberataques

De esta manera se puede reducir los casos de estafa a este sector. (Foto: Shutterstock)

Lo cierto es que, estas acciones no solo permiten a las víctimas obtener el apoyo necesario, sino que también contribuyen a la creación de bases de datos más robustas sobre los métodos de operación de los estafadores, lo que puede resultar crucial para prevenir futuros fraudes.

También, es imperativo abordar el sentimiento de vergüenza y culpa que a menudo experimentan las víctimas, entendiendo que estas emociones solo benefician a los criminales.

Enfrentar las estafas cibernéticas es complejo y requiere de un esfuerzo conjunto, donde la educación, la comunicación y la empatía desempeñan roles protagónicos en la protección de los más vulnerables.