Aprende este truco para el móvil: reiniciar todos los días el celular, cada semana o cada cuánto

La evolución de la tecnología ha modificado significativamente la necesidad de reiniciar los dispositivos móviles para mejorar su rendimiento. En el pasado, esta acción era vista como un paso esencial para solucionar problemas temporales y mejorar la eficiencia del sistema.

Sin embargo, con el avance de los sistemas operativos y la capacidad de gestión de recursos de los smartphones actuales, reiniciar el teléfono se ha convertido en una medida menos imprescindible, aunque aún puede ser de gran utilidad en ciertas situaciones.

Ahora bien, ante las dudas sobre cada cuánto se debe reiniciar un celular, no hay una regla que establezca este tipo de frecuencia, pero sí existen opiniones sobre la importancia de esta acción en diferentes casos.

Varios sitios web expertos en tecnologías sugieren que esta acción se debe hacer al menos una vez a la semana. Este hábito puede contribuir a mantener el rendimiento del dispositivo y a evitar problemas menores de software.

No obstante, algunos usuarios prefieren reiniciar sus dispositivos con más frecuencia, especialmente si utilizan aplicaciones que consumen muchos recursos o si sus dispositivos tienden a acumular mucha información en segundo plano.

Por otro lado, hay usuarios que raramente suelen reiniciar sus celulares, tal vez solo cuando se actualiza el sistema operativo o cuando enfrentan problemas técnicos. Esto no necesariamente es dañino, pero en ocasiones podrían no estar aprovechando los beneficios de rendimiento y seguridad que ofrece un reinicio periódico.

Aunque algunos fabricantes y operadores todavía sugieren realizar reinicios regulares como parte del mantenimiento del dispositivo, esta práctica está perdiendo relevancia.

Forzar el cierre de aplicaciones o reiniciar el sistema ya no se considera necesario en la mayoría de los casos, gracias a la gestión avanzada de recursos que implementan los sistemas operativos modernos.

Sin embargo, en situaciones donde el almacenamiento del dispositivo esté saturado o ante problemas específicos que no se logran resolver, un reinicio ocasional aún puede ser beneficioso, actuando como una especie de limpieza temporal de la memoria del móvil.

Al reiniciar el dispositivo, este cierra todas las aplicaciones y procesos en ejecución, limpia la memoria RAM y reinicia el sistema operativo. Este proceso puede solucionar problemas de rendimiento, como aplicaciones que se ejecutan lentamente o fallos en el sistema.

Desde la perspectiva de mantenimiento del software, reiniciar periódicamente un celular puede ayudar a que el sistema operativo y las aplicaciones se actualicen correctamente, al cerrarse completamente y volver a arrancar. Esto es importante cuando se instalan actualizaciones que requieren un reinicio para completarse.

Los expertos en seguridad informática también recomiendan reiniciar los celulares debido a que, en caso de que el dispositivo haya sido comprometido por malware que opera en memoria, un reinicio podría interrumpirlo.

Aunque esto no elimina el malware, puede ayudar a mitigar algunos riesgos de seguridad, hasta que se pueda realizar una limpieza más profunda del sistema.

Es importante mencionar que el acto de reiniciar no debe confundirse con el de apagar el dispositivo. Apagar el celular por la noche y volverlo a encender en la mañana puede tener un efecto similar al de un reinicio y es una práctica que algunos usuarios prefieren para ahorrar energía y reducir la exposición a radiación mientras duermen.

Sin embargo no debe tomarse como un hábito apagar el celular, y lo mejor es consultar con un técnico las implicaciones que tiene apagar el celular frecuentemente.

Lo importante es que los usuarios deben estar informados sobre las mejores prácticas de mantenimiento de sus dispositivos para asegurar un rendimiento óptimo a largo plazo.