La posibilidad de acceder a Internet durante un vuelo comercial ha sido una ventaja significativa para muchos pasajeros, ya sea para trabajar, entretenerse o simplemente mantenerse en contacto durante las largas horas en las que hay que estar en un avión. Sin embargo, detrás de esta comodidad aparentemente inofensiva se esconden una serie de riesgos.
La mayoría de las aerolíneas modernas ofrecen el servicio de Wifi a bordo como parte de su oferta de entretenimiento y comodidades para los pasajeros. Pero la seguridad de esta conexión inalámbrica ha sido motivo de preocupación entre los expertos en ciberseguridad y los viajeros.
En primer lugar, es importante comprender cómo funciona el Wifi en aviones. Según explican expertos, el acceso a Internet en vuelos comerciales puede realizarse de dos maneras principales: mediante una conexión aire-aire o una conexión aire-tierra.
La conexión aire-aire implica el uso de satélites para proporcionar la señal de Internet a la aeronave. Aunque esta tecnología permite el acceso a la red en vuelos internacionales, presenta limitaciones significativas en cuanto a velocidad y fiabilidad.
Debido a la distancia que la señal debe viajar entre el avión y el satélite, los usuarios a menudo experimentan retrasos y una velocidad de conexión más lenta de lo habitual. Además, mantener una comunicación estable entre el avión y el satélite mientras ambos se mueven a altas velocidades es un desafío técnico considerable.
Por otro lado, la conexión aire-tierra utiliza señales celulares desde tierra para conectar la aeronave a Internet. Aunque esta opción puede ser más confiable en términos de velocidad, sigue presentando limitaciones en comparación con las conexiones terrestres convencionales. Además, la disponibilidad de esta conexión puede depender de la ubicación geográfica del vuelo y de las regulaciones locales.
Cuáles son los riesgos de conectarse al Wifi durante un vuelo
A pesar de los esfuerzos de las aerolíneas y los proveedores de servicios de Internet para mejorar la calidad y seguridad de estas conexiones, aún persisten riesgos significativos para los usuarios. Uno de los principales peligros asociados con el uso de Wifi en aviones es la vulnerabilidad a los ataques cibernéticos.
Expertos en ciberseguridad advierten que las conexiones Wifi en aviones son como redes abiertas, lo que las hace susceptibles a la interceptación y manipulación por parte de hackers malintencionados. Debido a la naturaleza compartida de la red en un entorno de vuelo, los pasajeros pueden estar expuestos a riesgos como el robo de datos personales, el acceso no autorizado a dispositivos y la instalación de malware.
Una de las formas más efectivas de protegerse contra estos riesgos es utilizando una red privada virtual (VPN). Una VPN crea una capa adicional de seguridad al cifrar el tráfico de datos entre el dispositivo del usuario y el servidor remoto, lo que dificulta que los hackers intercepten y descifren la información transmitida. Sin embargo, es importante tener en cuenta que no todas las aeronaves pueden admitir el uso de VPN, lo que deja a algunos pasajeros vulnerables a las amenazas cibernéticas.
Además de utilizar una VPN, existen otras medidas de seguridad que los pasajeros pueden tomar para protegerse mientras utilizan Wifi en aviones. Evitar el acceso a sitios web no seguros, no proporcionar información personal confidencial y mantener el software del dispositivo actualizado son prácticas recomendadas para mitigar el riesgo de ataques cibernéticos.
A pesar de estos riesgos y desafíos, la demanda de acceso a Internet en vuelos comerciales sigue siendo alta entre los pasajeros. Muchos viajeros ven el Wifi a bordo como un complemento valioso para su experiencia de vuelo, incluso a pesar de las limitaciones de velocidad, seguridad y los riesgos que representa acceder a la web a través de redes públicas, que no protegen la información.