Apple está considerando implementar cambios significativos en su línea de productos iMac, destacándose entre ellos la posibilidad de incorporar pantallas táctiles.
Esta información proviene de una solicitud de patente recientemente informada, que señala un interés de la compañía en evolucionar sus ordenadores de sobremesa hacia un diseño más versátil y adaptable.
La inclusión de la funcionalidad táctil en las iMacs representaría un cambio radical en la filosofía de diseño de Apple, que hasta el momento había mantenido una postura reacia a este tipo de características en sus ordenadores de sobremesa, centrando esta funcionalidad en dispositivos específicos como el iPad y el iPhone.
Qué dice la patente de Apple para la nueva iMac
La patente describe un dispositivo con un soporte pivotante, lo que facilitaría su transporte y optimizaría el espacio que ocupa, aportando así a la movilidad y flexibilidad del equipo.
Este detalle no es menor, debido a que propone una solución a la demanda creciente de dispositivos más portables y ergonómicos, especialmente en entornos de trabajo dinámicos y creativos.
Además, se evidenció atributos propios de un equipo con patalla táctil. Este cambio de rumbo sería una respuesta a las tendencias del mercado, que ha visto el éxito de productos con características similares, como el Microsoft Surface Studio, que ha captado la atención de profesionales creativos y diseñadores.
Esta estrategia se alinea con el creciente interés de Apple en integrar mejor sus dispositivos y servicios, ofreciendo una experiencia de usuario cohesiva y sin fisuras.
Por qué Apple está pensando en implementar pantallas portátiles en sus iMac
La decisión de Apple de reconsiderar la incorporación de pantallas táctiles en sus iMacs podría verse influenciada por el avance en la tecnología de pantallas táctiles, que ahora ofrecen mayor precisión y sensibilidad, facilitando su uso en tareas de diseño y creatividad.
Esto marcaría un contraste significativo con las declaraciones anteriores de Phill Schiller, vicepresidente sénior de marketing de Apple, quien en 2016 expresó dudas sobre la viabilidad de este tipo de productos debido a preocupaciones de ergonomía y usabilidad.
Asimismo, la posible introducción de iMacs táctiles no solo es un reflejo de la capacidad de Apple para adaptarse y responder a los cambios en las preferencias de los consumidores, sino también un potencial cambio en la forma en que los usuarios interactúan con los ordenadores de sobremesa.
La combinación de una pantalla táctil con la potencia y rendimiento que ofrecen los iMacs podría abrir nuevas posibilidades para aplicaciones y software dedicado a la creatividad y productividad, expandiendo el mercado objetivo de Apple hacia sectores que requieren herramientas más versátiles y adaptativas.
Qué pasaría con esta implementación de Apple
La posibilidad de una iMac táctil sugiere una visión donde la interacción entre los dispositivos Apple sea más fluida y natural, permitiendo a los usuarios pasar de un iPhone o iPad a una iMac con facilidad y sin interrupciones en su flujo de trabajo en cualquier momento.
También, al implementar esta características estaría llevando una competencia, si se puede decir, más equitativa con otros equipos que ya tienen integrado esta función táctil como el Microsoft Surface Studio.
La exploración de Apple por integrar pantallas táctiles en sus iMacs destaca la adaptación de las compañias en adaptarse a las necesidades de sus usuarios. El desarrollo de un equipo con características propios de la marca y con nuevas funciones puede definir si es viable el intento de la compañía por explorar nuevos modos creativos.
Este potencial desarrollo también podría ser otro espacio para cambios en la computación de sobremesa, enfocando el futuro de estos dispositivos hacia la versatilidad, movilidad y la interactividad, elementos cada vez más demandados por los consumidores en la era digital.