Qué debes estudiar para ser exitoso en tecnología según el CEO de Nvidia

Jensen Huang, CEO de NVIDIA, una de las firmas tecnológicas más influyentes a nivel mundial, compartió recientemente una visión introspectiva sobre su trayectoria profesional, destacando cómo abordaría hoy su carrera si tuviera la oportunidad de comenzar de nuevo.

En sus declaraciones, Huang no solo reflexiona sobre su propio desarrollo profesional sino que también proporciona orientaciones claves para los jóvenes que se encuentran en la encrucijada de elegir un camino académico, subrayando la importancia de adaptarse a las exigencias del rápido avance tecnológico.

Durante su intervención en la Cumbre Mundial de Gobiernos, en la cual compartió escenario con el Ministro de Inteligencia Artificial de Emiratos Árabes, Jensen Huang destacó con afirmaciones que captaron la atención de los presentes.

Señaló que actualmente, la biología se está posicionando como uno de los campos más prometedores dentro de la ciencia.

Para Huang, el horizonte se encuentra en lo que denominó “biología digital” y “ingeniería biológica”. “Cada año vemos mejoras en nuestro software, nuestros chips y nuestra infraestructura tecnológica; sin embargo, los avances en las ciencias de la vida parecen ser más limitados”, explicó el CEO.

Continuó diciendo que si tuviese la oportunidad de recomenzar mi carrera, se daría cuenta de que en la actualidad se cuenta con la tecnología necesaria para transformar las ciencias biológicas en ‘ingeniería biológica’.

“Espero que la biología digital se transforme en una disciplina de la ingeniería, no solo un sector de la ciencia. Es mi deseo que esto impulse el nacimiento de una nueva generación entusiasmada por trabajar con proteínas, químicos, enzimas y materiales”, indicó.

Jensen Huang también destacó que, en la actualidad, dominar la programación no es un requisito indispensable para innovar en el campo tecnológico.

Subrayó que los asistentes virtuales potenciados por inteligencia artificial facilitan enormemente la tarea de programar, democratizando el acceso a la creación y desarrollo de soluciones tecnológicas avanzadas.

“Ahora, cualquier persona en el mundo puede programar. Esto es lo maravilloso de la inteligencia artificial. (...) Por primera vez, hemos eliminado las barreras tecnológicas”, señaló.

En la vanguardia de la innovación tecnológica, figuras como Elon Musk, Mark Zuckerberg y Bill Gates han marcado el rumbo de sectores que abarcan desde medios de comunicación digitales hasta ambiciosos proyectos de exploración espacial, estableciéndose como referentes insustituibles del panorama contemporáneo.

Más allá de su contribución en estos ámbitos, su enfoque se ha ido matizando hacia una atención compartida hacia una disciplina fundamental: la biología.

Elon Musk, a través de su empresa Neuralink, está a la vanguardia de una revolución en el campo médico. Con el desarrollo de interfaces cerebro-computadora, busca transformar radicalmente el tratamiento de trastornos neurológicos.

Esta innovación, que promete una integración sin precedentes entre la tecnología y la biología, podría modificar profundamente la relación con humano - tecnología y la comprensión de la consciencia humana.

En un esfuerzo complementario, Mark Zuckerberg junto con su esposa, Priscilla Chan, se ha embarcado en una proyecto para probar los límites de la medicina actual.

Mediante la Iniciativa Chan Zuckerberg, aspira a impulsar el progreso en la investigación biomédica con el ambicioso objetivo de curar, prevenir o controlar todas las enfermedades en el presente siglo.

Este enfoque promete acelerar el desarrollo de terapias innovadoras y respuestas efectivas ante patologías que hoy día afectan a millones.

Por otro lado, Bill Gates, con su reconocida trayectoria en filantropía y tecnología, se ha enfocado en resolver problemas globales de sostenibilidad alimentaria.

Fusionando conocimientos de biología con avances en robótica y tecnología agrícola, busca fomentar prácticas agrícolas sostenibles que puedan alimentar a la población mundial de manera eficiente, destacando una vez más la conexión entre la biología y la tecnología en la búsqueda de soluciones a desafíos universales.