Las aspiradoras robot se convirtieron en una solución para muchas personas. Tener un dispositivo que constantemente esté haciendo la limpieza del piso ayuda a que el aseo de la casa sea mucho más práctico. Pero como cualquier otro producto de este tipo, hay que saber configurarlo para sacarle todo el provecho.
Así que en caso de que haber comprado una aspiradora inteligente, traemos una guía para que esos primeros días con ella no sean un caos y, más bien, que en casa tengamos un dispositivo útil que nos ayudará a ahorrar tiempo y esfuerzo.
Vía libre al robot
La eficacia de tu robot aspirador comienza con la organización de los muebles y objetos en el hogar. Pequeños ajustes, como desplazar objetos que puedan obstaculizar el camino del dispositivo, facilitarán su tarea. Por ejemplo, asegurarnos de que haya espacio suficiente alrededor de esquinas y muebles para que el robot pueda realizar una limpieza eficiente sin perder tiempo recalculando rutas.
No se trata de levantar todos los muebles o hacer una limpieza, sino más bien quitar obstáculos que van a interrumpir la ruta.
Instalar la aplicación del fabricante
La mayoría de los robots aspiradores se manejan a través de aplicaciones móviles. Así que lo mejor es descargar la app oficial para tener acceso a todas las funciones y controles remotos. Si bien es posible que el dispositivo sea compatible con plataformas de terceros, siempre es mejor tener la aplicación del fabricante porque es la que va a garantizar un completo funcionamiento.
Conectar a WiFi
Conectar el dispositivo a la red WiFi no solo habilita las funciones de control remoto, sino que también permite recibir actualizaciones y mejoras de firmware, por lo que es importante hacer esta configuración inicial.
La mayoría de los robots inician automáticamente la búsqueda de una red cuando están en su base. Así que bastará con ponerlo allí y desde la aplicación del celular hacer la conexión, ingresando la contraseña del Wifi de la casa. Es fundamental que la base se ubique en una zona donde tenga buena cobertura de la seña de la red.
Establecer los límites
Es probable que haya áreas en el hogar donde no queramos que el robot realice la limpieza, por ejemplo los baños o las escaleras. Así que hay que definir esas zonas prohibidas para evitar accidentes o daños en el dispositivo.
Algunos robots aspiradores permiten establecer límites mediante paredes virtuales físicas o directamente desde la aplicación. Herramientas que se deben aprovechar para dejarle claro a la aspiradora por dónde puede transitar.
Programar un horario de limpieza
Una de las características más útiles de los robots aspiradores es la capacidad de programar horarios de limpieza automáticos. Esta función permite despreocuparnos por completo de la tarea de aspirado. Dependiendo del modelo, se podrá programar la limpieza semanalmente o incluso diariamente.
Algunos robots más avanzados permiten integrarse con asistentes virtuales como Google Assistant o Alexa, ampliando las posibilidades de configuración.
Comprobar su limpieza
Una vez configurado el robot y tras varias sesiones de limpieza es importante hacer una revisión de su trabajo. Empezando por revisar si está siguiendo las rutas asignadas, si respeta las zonas prohibidas y cómo responde a los comandos desde la aplicación.
Al principio será normal que tenga algunos fallos, mientras va creando el mapa de la casa. Además, como usuarios iremos aprendiendo a darle mejor las indicaciones y con el tiempo hará mejor la limpieza.
Revisar el estado del depósito
El mantenimiento adecuado es crucial para un rendimiento óptimo del robot. Algunos modelos cuentan con sistemas de vaciado automático del depósito, pero en modelos más comunes, esta tarea debe realizarse manual y continuamente.
Una recomendación es que, antes de salir de casa, verifiquemos si el depósito está vació y en buen funcionamiento, también revisar los filtros y los conductos. Todo esto ayudará a que la experiencia sea agradable y realmente el piso de nuestro hogar esté limpio.