Los temas que están en tendencia en la industria tecnológica afectan directamente a los videojuegos, como el caso de la inteligencia artificial y los NFT, conceptos que más allá del desarrollo técnico que implican, necesitan de procesos legales para que operen bajo las normativas de la industria.
Además, el avance de otros desarrollos lleva a que las empresas involucradas tengan diferentes retos legales para no afectar a los jugadores.
El portal Games Industry realizó un listado de esos retos legales que deben asumir los videojuegos durante 2024 para evitar que una tendencia se convierta en un problema para los desarrolladores y los jugadores, como el caso de la implementación de la IA y también el manejo de datos.
Inteligencia artificial y derechos de autor
La capacidad de la IA para generar contenido visual y narrativo ha llevado a cuestionamientos sobre la propiedad del contenido y cómo los artistas pueden proteger sus obras de ser utilizadas por la inteligencia artificial.
Esto ha permitido que numerosas empresas de videojuegos utilicen la IA para crear contenidos de propiedad intelectual. Sin embargo, el problema radica en la protección legal de estos productos.
Como resultado, han surgido algunas demandas en los Estados Unidos y el Reino Unido, planteando dudas sobre la calificación para la protección de derechos de autor de los productos de la IA. Además, las autoridades de protección de datos en Italia y Alemania han tomado medidas contra el uso de esta tecnología.
En 2024, se espera que la discusión se amplíe tocando temas como la generación de código de juegos y bases de datos por parte de la IA.
NFT
La tokenización de juegos se ha convertido en una tendencia, pero conlleva riesgos y desafíos fiscales. Los inversores en juegos bajo este formato podrían enfrentar pérdidas importantes, principalmente porque aquellos que tengan éxito empezarán a tener mayor seguimiento de las autoridades.
Como el caso de Gods Unchained, un título al que le estaba yendo bien, pero al que se le adjudicó la calificación ESRB de ‘Solo para adultos’, debido a su mecánica de jugar para ganar.
Para 2024, este tipo de juegos tendrían que buscar una audiencia distinta que esté solo interesada en jugar para ganar dinero. Aunque aquellos títulos que tengan mecánicas de cajas de botín podrían convertirse en un objetivo para las autoridades del juego, ya que este tipo de recompensas están muy cerca de ser juegos de azar al dar un premio que el jugador no conoce.
Loot Boxes
La controversia en torno a las loot boxes o cajas de botín no se va a detener. En Austria, Sony, Electronic Arts y Valve enfrentan demandas que buscan reembolsos para los consumidores que invirtieron dinero en estos contenidos, que entregan premios aleatorios, pero que son comprados con dinero real.
Por lo que se espera que haya más prohibiciones de loot boxes en otros países, como ya sucedió en Bélgica y en Países Bajos. Además, será inminente que genere una postura más estricta contra estas prácticas, especialmente en el contexto de las NFTs y otras opciones de retiro de efectivo.
Pago con datos
Los videojuegos gratuitos han sido una modalidad en constante crecimiento en los últimos años, donde los usuarios ingresan sin tener que comprar o pagar algo y a cambio ven publicidad o entregan sus datos a los desarrolladores. Un formato común en dispositivos móviles.
Aunque los expertos no esperan grandes cambios legislativos en este tema, el trabajo de empresas como Meta y Google para crear alternativas y protección de datos puede ser la manera en la que la industria se vea impactada y se presenten cambios en este formato de juego.
Sin embargo, los desarrolladores independientes serían los más afectados con estas modificaciones al ser esta la modalidad más rentable para ellos.
Esports
Amaño de partidos, horas excesivas de trabajo, reglamento y comercialización de torneos y comportamientos inapropiados, son algunos de los temas que los deportes electrónicos deben solucionar en el corto plazo.
Durante 2023, la Comisión de Integridad de los Deportes Electrónicos (ESIC) tuvo que imponer acciones disciplinarias a varios jugadores, incluidas prohibiciones de por vida, algunas de ellas por hacer trampa en las competencias.
Riot Games fue una de las empresas que tomó acciones, como asignar topes salariales para algunas ligas y modificar su Código de conducta para, por ejemplo, tener regulaciones sobre el consumo de sustancias en los torneos.
El reto para este año en los esports será controlar las apuestas ilegales y revisar las condiciones de trabajo de los jugadores, que en su mayoría son menores de edad.