En menos de veinte años, las redes sociales se han transformado en elementos cruciales de la interacción social, afectando distintos ámbitos de la vida cotidiana, incluidas las relaciones amorosas, las amistades, el trabajo, los negocios, entre otros.
Ha sido tal su penetración en la sociedad que, según datos de Statista, en 2024 habrá alrededor de 5.000 millones de usuarios mensuales activos procedentes en gran parte de Europa, América y Asia.
Sin embargo, pese sus grandes virtudes para conectar a personas de todas partes del mundo, estas plataformas también tienen un lado negativo que muchas veces se refleja en un uso excesivo y algunas afectaciones en la salud mental, con síntomas de ansiedad, depresión y otros problemas psicológicos como adicción, baja autoestima y envidia.
Es por ello que para los expertos resulta de vital importancia conocer el tipo de interacciones y patrones de conducta que producen estas emociones negativas, para poderlas enfrentar. De hecho, algunos de estos fenómenos ya han sido analizados e identificados con un nombre.
Conceptos que definen las dinámicas amorosas y sociales en redes
Recordemos que con el empleo masivo de nuevos dispositivos tecnológicos, tanto niños, como adolescentes y adultos, están expuestos a situaciones que pueden pasarle a factura a su salud mental.
De hecho, tras la pandemia, se ha reportado que el 70% de los jóvenes padecen ansiedad o depresión, un dato alarmante que refuerza la necesidad de un uso consciente y moderado de estas plataformas
- Cyber-Bullying
Una de las más frecuentes es el Cyber-Bullying que muchas veces aprovecha el anonimato de las redes para hostigar, intimidar o amenazar a una persona, usando información privada o material inapropiado.
Esto puede ser por medio del acoso, que suele darse a través de mensajes en los que se busca denigrar o insultar de forma directa como indirecta, creando rumores o exponiendo la privacidad de la víctima. Aquí entra el sextear, que es el envío de material pornográfico propio o de otra persona, con el fin de hostigar, controlar o como venganza.
Otra modalidad es el stalking, que es el seguimiento permanente de una persona en el mundo digital, para que sea consciente del interés existente hacia él o ella.
- Efecto FOMO
También se encuentra el efecto FOMO (Fear of Missing Out) o miedo a perderse algo, que es una inquietud asociada a la ansiedad de no participar en eventos o experiencias disfrutadas por otros, especialmente aquellas compartidas en plataformas digitales.
Se trata de un deseo incontrolable de conexión permanente y la participación activa en redes sociales que en muchas ocasiones impulsan el uso excesivo de dispositivos móviles y consolas de videojuegos, promoviendo una interacción continua en línea.
- Breadcrumbing
El breadcrumbing o entrega de migajas emocionales se ha convertido en una forma de manipulación que afecta a numerosos usuarios de redes sociales y aplicaciones de citas.
Tal práctica ha sido identificada y estudiada por expertos que definen el fenómeno como un patrón de comportamiento en el que una persona muestra interés de manera intermitente, pero no se compromete sentimentalmente o formalmente, a pesar de mantener una presencia constante en la vida digital de la otra persona.
Lovebombing
Su significado es su traducción literal “bomba de amor”. Y es que se trata de una práctica en el que la persona da una sobredosis de amor, regalos, atención y palabras cursis que hacen al otro pensar que ha encontrado a su media naranja.
De acuerdo con especialistas, una de las razones por las que el love bombing suele funcionar es en gran medida debido a las ideas dañinas que han surgido del “amor romántico”; el cual puede hacer pensar a las personas, sobre todo a las mujeres, que sí es posible encontrar a alguien que pueda darte tanto amor en tan poco tiempo, pues es así como suele ocurrir en las películas.
- Ghosting
La expresión ghosting deriva del término inglés ‘ghost’, o “fantasma”, y hace alusión a la acción de desvanecerse sin dejar rastro, tal como lo hacen estos seres.
Este termino suele utilizarse en situaciones donde se está comenzando un vínculo amoroso y, pese a que parezca que la relación evoluciona favorablemente, la otra persona se esfuma de manera inesperada, “como si se la hubiera tragado la tierra”.
Como afrontar las emociones negativas que producen estas interacciones
La Unicef recomienda que para contrarrestar los efectos negativos de este tipo de interacciones en las redes sociales resulta de vital importancia:
Evitar el contenido y las interacciones dañinas: Identificar las emociones que genera lo que está viendo y haciendo en redes sociales puede ayudar establecer tus límites personales sobre la cantidad de tiempo que se pasa en ellas y con qué fin. Una opción es silenciar o limitar el contenido de las cuentas que pueden afectar emocionalmente.
Mantenerse conectado con realidad: La línea entre los mundos online y offline es cada vez más difusa y estar en línea demasiado tiempo puede generar afectaciones. Es importante intentar desconectarse, tomarse un descanso de las redes sociales de vez en cuando y pasar tiempo con amigos y familiares en la vida real.
Ser consciente: Se recomienda dejar de seguir o de buscar el contenido que genera malestar y cambiarlo por contenido positivo, que motive o informe.