Con el crecimiento del Internet de las Cosas (IoT) y la mayor interconexión entre dispositivos que se pueden encontrar en una casa, se ha convertido en una prioridad de adoptar soluciones de seguridad efectivas y proactivas para la protección de los Smart TV.
Aparatos que al estar conectados a una red de internet e incorporar aplicaciones que pueden albergar información sensible de los usuarios, también pueden ser vulnerables a un ataque de malware o virus, tal y como puede ocurrir con un ordenador o un móvil.
Es por ello que medida que se conectan más dispositivos, la seguridad de los hogares inteligentes se vuelve más importante y contar con un sistema de seguridad que ayude a proteger de ataques para prevenir estos flagelos, se convierte en un factor clave.
La tecnología de seguridad Knox
Samsung, consciente de este panorama, desarrolló Knox, un sistema avanzado destinado a salvaguardar la integridad de sus televisores inteligentes frente a potenciales riesgos cibernéticos como el robo de información financiera y el acceso no autorizado.
Esta tecnología encripta las comunicaciones entre el Smart TV y otros dispositivos, mientras bloquea automáticamente suplantaciones de identidad y supervisa activamente las conexiones a la red de internet doméstica.
Asimismo, esta plataforma promueve la seguridad a largo plazo a través de actualizaciones frecuentes, las cuales abordan las vulnerabilidades tan pronto como emergen y garantizan que estas correcciones sean aplicadas de manera oportuna a los dispositivos que la utilizan.
El objetivo de Knox, es aprovechar su capacidad de actualización constante para proveer una barrera efectiva y ofrecer una experiencia de uso segura.
Beneficios de utilizar Knox
La importancia de contar con un programa como Samsung Knox en un Smart TV se sustenta en varias razones clave.
En primer lugar, protege la red doméstica al prevenir que los televisores inteligentes sirvan puerta de entrada a ataques externos.
Además, defiende la información personal que estos dispositivos puedan recopilar, tales como hábitos de visualización o datos de cuentas.
En el ámbito financiero, la seguridad es crucial para las transacciones en línea que se realizan a través del televisor, evitando el fraude y la sustracción de datos de tarjetas de crédito.
Por último, las actualizaciones periódicas de seguridad que proporciona Knox son vitales para mantener a los usuarios a salvo de vulnerabilidades y ataques recientes.
Al ampliar la visión a lo que Knox aporta en el ámbito de protección contra malware y virus, se destaca su capacidad para detectar y bloquear software malicioso que podría comprometer la integridad del Smart TV y la información en él almacenada.
En lo que respecta a la función de prevención del acceso no autorizado, Knox desempeña el papel de guardián de aplicaciones y servicios que albergan datos confidenciales, evitando que terceros puedan acceder a los mismos.
En la actualidad, el uso de tecnología de seguridad como la que ofrece Samsung Knox se convierte en un aspecto crucial para el consumidor moderno, que no debe dejar de lado los peligros que implica la conectividad en dispositivos del hogar.
Especialmente con la irrupción del Internet de las Cosas , que genera la necesidad de adoptar soluciones de seguridad efectivas y proactivas.
Herramienta de Smart TV para personas con problemas de visión
Ver televisión para personas con problemas de visión puede presentar desafíos en el acceso y en la comprensión del contenido.
Por esta razón, la tecnológica Samsung desarrolló el Modo Relumino, una función para aumentar la capacidad de visualización para esta población.
Esto lo logra resaltando partes específicas de la imagen como el contraste, el color y nitidez con el objetivo de brindar una calidad de video personalizada y específicamente diseñada para que aquellos usuarios con alguna discapacidad visual, puedan observar más fácilmente el contenido de una Smart TV.
Desarrollar el Modo Relumino, nombre tomado del latín que significa “devolver la luz”, requirió identificar las más mínimas imperfecciones en la pantalla desde la perspectiva de un usuario con problemas de visión. Los ingenieros que participaron en su creación incluso utilizaron gafas especiales que simulaban una visión borrosa, como punto de partida.
Después de la etapa inicial de investigación y desarrollo, se realizaron pruebas a gran escala que incluyeron cuatro televisores QLED de 55″que se instalaron a un metro de distancia en una habitación con un nivel específico de iluminación. Uno mostraba la imagen de control sin ninguna mejora. Los otros tres proyectaban el mismo contenido con el Modo en alto, medio y bajo.