Por qué una persona LGBTQ+ da más valor a lo físico y mental al buscar una cita en apps

La Marcha del Orgullo es uno de los eventos más grandes que reune a personas de diferentes puntos del país para celebrar su sexualidad y visibilizar lo grande que es la comunidad LGBTQ+ en la sociedad.

Un estudio realizado por la aplicación indicó que al menos el 70% de los encuestados que se identifican como parte de la comunidad (71% de bisexuales y 62% de otros grupos) utilizaron alguna vez plataformas de citas online para encontrar una pareja a diferencia de los encuestados que se autoperciben como heterosexuales.

Al ser la primera recomendación, es la más importante de todas pues una interacción que inicia con ambas personas buscando lo mismo tiene más probabilidades de éxito. “Esto es especialmente cierto para las personas que buscan conexiones del mismo sexo”, asegura la plataforma.

Según el Dr. Humberto Valle, doctor en psicología clínica y con experiencia en relaciones de pareja, sin importar el tipo de vínculo que se desee, si se expresan las intenciones desde el primer momento, es posible encontrar a una persona que busque lo mismo que uno.

En ese sentido, el estudio de Bumble indica que al menos 7 de cada 10 miembros de la comunidad LGBTQ+ no consideran que las personas estén hechas para ser monógamas. “La sinceridad es fundamental para establecer una relación genuina y duradera, así que no hay que tener miedo de compartir quién eres y qué esperas de la otra persona”, indicó Valle.

El estudio realizado por Bumble indica que el 65% de entrevistados (6 de cada 10) que forman parte de la comunidad LGBTQ+ consideran que su cuerpo no es atractivo, mientras que el 45% no se siente atractivo.

Esta última estadística es similar a la de personas que consideran que las personas que sí consideran atractiva no les va a elegir.

Para derribar esos temores iniciales y centrarse más en la compatibilidad de las personalidades, la plataforma creó “Speed Dating”, un juego en el que los usuarios tienen que inscribirse una vez cada semana de forma gratuita para empezar conversaciones anónimas en las que no se identifica quién está detrás del perfil con el que se habla.

Luego de una sesión de tres minutos, los usuarios podrán elegir si desean seguir conversando y “hacer match” o si pasan al siguiente perfil. Esta es la única forma por la que se puede saber la identidad de la otra pesrona y ver sus fotos, acceder a la página de su cuenta y seguir con la interacción.

Debido a que las aplicaciones de citas también son usadas para encontrar parejasa sexuales de forma ocasional, es recomendable que los usuarios se atrevan a preguntar por algunos datos relevantes para que la práctica del sexo sea segura.

La salud sexual y la realización de pruebas regulares es fundamental para que los usuarios se mantengan seguros y se garantice el bienestar de ambos en una relación. Además es necesario el consentimiento y la comunicación clara entrelos usuarios

Para que un perfil destaque sobre el resto de los usuarios, es importante que se brinde la mayor cantidad de datos posibles al momento de generar el perfil. Lógicamente que esto no quiere decir que se publique información que sea potencialmente sensible.

La verificación es un factor que Bumble toma en cuenta para exponer el perfil a más usuarios. Aunque si se trata de buscar por preferencias, los usuarios pueden utilizar filtros de búsqueda para que el sistema solo muestre características específicas publicadas como género, preferencias sexuales, signo, tendencia política, etc.

Ya que en ocasiones el proceso de encontrar pareja o pactar citas es algo incómodo o tedioso, Bumble también facilita el modo “No molestar” para que en los momentos en los que se necesite un respiro, los usuarios puedan activarlo y evitar nuevas conexiones sin necesidad de perder la conexiones y chats ya iniciados.

Según el doctor Valle, “es recomendable evitar alargar demasiado las conversaciones previas al encuentro en persona. Recuerda que la comunicación por mensajes a largo plazo no es para todos”, por lo que los encuentros deberán ser planeados como actividades entretenidas que refuercen el vínculo entre personas.