Steve Jobs, es uno de los personajes más relevantes de nuestra historia moderna y más en concreto del sector tecnológico, debido a que siempre se caracterizó por tener un carácter único, capaz de poner a cada uno de sus trabajadores al límite para sacar lo mejor de ellos.
Es por ello que alrededor de su figura hay numerosas anécdotas, curiosidades y leyendas. Una de las que quizás más interés despiertan define perfectamente la filosofía de trabajo del cofundador de Apple, la cual fue alabada y criticada en partes iguales.
Esta anécdota fue conocida en 2011, justamente un día después del fallecimiento de Jobs, cuando el conocido periodista David W. Brown afirmó conocer a un exempleado de la compañía de Cupertino que había trabajado con el CEO de la compañía de la manzana mordida durante la creación del iPod.
Según palabras de este ex trabajador de Apple, es “su historia favorita sobre Steve Jobs”, sin embargo, como todo lo que gira alrededor del genio de suéter y jeans, existe una delgada una línea entre la leyenda y la realidad.
Un Steve Jobs implacable
La historia se remonta a varios años atrás, cuando los ingenieros que trabajaban en el primer iPod habían completado uno de los prototipos. Y llegó el momento más crucial, presentar su trabajo a Jobs para obtener su aprobación. El empresario, que era conocido por su exigencia implacable, examinó el dispositivo, lo manipuló y en un instante, lo rechazó de manera categórica. La razón era simple, pero crítica: el dispositivo era demasiado grande.
Los ingenieros trataron de explicar a Jobs que hacer el iPod más pequeño era un desafío insuperable, que requeriría prácticamente “reinventar la invención”. En ese momento, un silencio se apoderó de la habitación y con el iPod en las manos, Jobs se levantó de su asiento, se dirigió hacia un acuario cercano y dejó caer el dispositivo en el tanque de agua.
El prototipo descendió hasta el fondo del acuario y a medida que se sumergía, pequeñas burbujas emergieron de él flotando hacia la superficie. Y ante esto afirmó “esas son burbujas de aire, eso significa que hay espacio dentro. Háganlo más pequeño”
Su filosofía de “cuánto más pequeño, simple y minimalista, mejor” se aplicó perfectamente a la situación y es que Jobs entendía que si había espacio en el interior del dispositivo significaba que se podía reducir todavía más su tamaño global.
Esta anécdota ilustra una faceta fundamental de Steve Jobs: su intransigente búsqueda de la perfección. Jobs era un visionario y un líder incansablemente enfocado en la calidad y la excelencia de los productos de Apple. Cada detalle importaba, desde el diseño exterior hasta los intrincados componentes internos. Este enfoque en la atención al detalle ha sido una característica distintiva de los productos de Apple, que los hace únicos y altamente deseados en el mercado.
Otras historias curiosas
Steve Jobs fue un genio, un innovador y uno de los empresarios más influyentes de nuestra era. Aunque su personalidad podía ser desafiante y su enfoque implacable, su legado perdura en cada dispositivo Apple y en la cultura de la compañía, cuya historia está plagada de anécdotas curiosas relacionadas con su fundador.
El nombre de Apple: Se rumorea que el nombre “Apple” para la empresa fue inspirado por la afición de Jobs a las frutas y su dieta de alimentos saludables. También se ha especulado que podría haber sido una referencia a The Beatles, una banda que él admiraba, y que había fundado una compañía llamada Apple Corps.
Salario anual de $1: En varias etapas de su carrera en Apple, Steve Jobs aceptó un salario anual de tan solo $1 al año. Esto simbolizaba su compromiso con la empresa y su enfoque en la innovación sobre las recompensas financieras directas.
Visita a India: Antes de cofundar Apple, Steve Jobs realizó un viaje a India en busca de iluminación espiritual. Pasó siete meses recorriendo el país y viviendo en un ashram. Esta experiencia tuvo un impacto profundo en su vida y su filosofía.
No tenía placa de matrícula: Jobs solía conducir un Mercedes-Benz SL55 AMG plateado sin placa de matrícula. Aprovechaba un vacío legal de California que permitía a los propietarios de autos nuevos conducir sin placa durante seis meses. Esto se convirtió en una especie de símbolo de su estilo de vida poco convencional.
Rechazo del trasplante de Hígado: A pesar de su enfermedad, Steve Jobs inicialmente rechazó un trasplante de hígado que podría haber salvado su vida. Posteriormente, cambió de opinión y se sometió al trasplante, pero lamentablemente falleció en 2011.
Uniforme distintivo: Jobs era conocido por su atuendo característico, que consistía en un suéter de cuello alto negro, jeans y zapatillas New Balance. Esta vestimenta se convirtió en su “uniforme” distintivo.