Cómo prepararon un salmón vegano con una impresora 3D

Usando hongos, sus creadores pueden darle la textura y el sabor a pescado

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El producto usa proteínas vegetales para darle el sabor a pescado. (Revo Foods)
El producto usa proteínas vegetales para darle el sabor a pescado. (Revo Foods)

La tecnología brinda opciones para aquellas personas que quieren tener una dieta vegana, pensando en la sostenibilidad y conservación ambiental. Un ejemplo es lo que hizo Revo Foods, una empresa austriaca, que creó un salmón vegano impreso en 3D como alternativa.

El desarrollo de este alimento busca imitar la apariencia y el sabor del pescado real, sin tener que generar consecuencias negativas en el medio ambiente y hacer daño a los animales y su entorno.

Cómo es posible un salmón impreso en 3D

El corazón de este producto vegano es la micoproteína, una proteína derivada de hongos filamentosos. Este ingrediente no solo ofrece amplias características nutricionales, sino que también recrea la textura natural de la carne.

Revo Foods ha diseñado este alimento para garantizar que el salmón vegano no contenga metales pesados, microplásticos ni antibióticos. Esto lo convierte en una opción segura y saludable para los consumidores preocupados por la calidad de los alimentos que consumen.

El producto usa proteínas vegetales para darle el sabor a pescado. (Revo Foods)
El producto usa proteínas vegetales para darle el sabor a pescado. (Revo Foods)

“Una solución prometedora para ofrecer a los consumidores alternativas sostenibles que no contribuyan a la sobrepesca es el marisco vegano. La clave del éxito de estos productos reside en recrear un sabor auténtico que atraiga a los consumidores”, publicó la empresa a través de un comunicado.

Durante las pruebas de sabor y calidad, un 85% de las personas calificaron la experiencia de probar el producto de manera muy positiva. Además, uno de los aspectos más llamativos de este salmón impreso en 3D es su alto valor nutricional.

El producto está basado en proteínas vegetales derivadas de guisantes, aceites vegetales y extractos de algas, lo que le proporciona una amplia gama de beneficios para la salud. Desde vitaminas hasta proteínas y ácidos grasos Omega-3, este salmón ofrece una alternativa nutricionalmente valiosa a su contraparte de origen animal.

Junto a todos los componentes nutricionales y los que le dan el sabor, la creación de este salmón se basa en la impresión 3D. Esta tecnología ofrece la posibilidad de crear alimentos según las necesidades y preferencias de los consumidores.

El producto usa proteínas vegetales para darle el sabor a pescado. (Revo Foods)
El producto usa proteínas vegetales para darle el sabor a pescado. (Revo Foods)

Si bien la startup se ha centrado inicialmente en alternativas al marisco, el potencial de esta tecnología es más amplio y podría aplicarse a una amplia variedad de alimentos en el futuro.

“Con el hito de la impresión de alimentos en 3D a escala industrial, nos adentramos en una revolución alimentaria creativa, una era en la que los alimentos se elaboran exactamente según las necesidades del cliente”, afirmó Robin Simsa, director general de Revo Foods, en un comunicado.

‘The Filet’, como se le llama comercialmente a este producto fabricado en impresión 3D, fue elaborado por primera vez en noviembre de 2021 y tras dos años empezó a expandirse a de Austria a otros mercados europeos, donde ya es posible comprarlo en supermercados y también en línea.

Debido a sus componentes de origen vegetal, este salmón vegano tiene un corto periodo de tiempo de caducidad de apenas tres semanas, ya que tampoco cuenta con químicos que alarguen ese margen y se mantenga su concepto saludable.

Cómo funciona la impresión 3D

Esta tecnología es un proceso de fabricación que crea objetos tridimensionales capa por capa a partir de un modelo digital, por lo que el primer paso para elaborar un producto es diseñar modelo a través de un software o escanear uno ya existente.

Los siguientes pasos consisten en la ubicación de los materiales, que a diferencia de la impresión tradicional no se hace con papel sobre tinta, sino que se toman componentes como plásticos, metales, cerámicas, resinas y alimentos, cómo el caso del salmón, para ir generando el objeto desde cero.

Todos los ‘ingredientes’ se cargan en la impresora, que empieza a crear el modelo capa por capa. En algunos casos es necesario diseñar piezas por aparte y luego ensamblarlas para formar un objeto más sólido.

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