La Unión Europea destinará un presupuesto de más de 352 millones de euros para financiar el desarrollo de la infraestructura de transporte verde, y Tesla recibirá una gran parte de ese dinero; aproximadamente el 44% de todos los recursos disponibles, los cuales se utilizarán para expandir su red de supercargadores en este territorio.
La compañía de vehículos eléctricos de Elon Musk se quedó con una partida de aproximadamente 149 millones de euros para instalar y reemplazar 7.198 puntos de carga con una potencia de 250 kilovatios cada uno, en 687 ubicaciones distribuidas en 22 países del Viejo Continente.
El total de esta financiación tiene como destino las divisiones en Polonia e Italia de la empresa estadounidense, las cuales fueron las encargadas de presentar dos de los 26 proyectos que fueron seleccionados por el Fondo de Infraestructura para Combustibles Alternativos (AFIF) del bloque comunitario.
El objetivo de ampliar esta red de Supercargadores, es garantizar a todos los usuarios de vehículos eléctricos la libertad de desplazamiento, debido a que facilita viajes más largos de los propietarios de estos automóviles a solo una fracción del coste del combustible convencional. En estos puntos de carga rápida, lo único que deben hacer los conductores es conectar el auto y dejar que cargue automáticamente.
El proyecto de la filial italiana pretende desplegar 6.458 puntos de recarga capaces de entregar 250 kW en 613 ubicaciones en 16 países que son: Austria, Bélgica, Bulgaria, Alemania, España, Finlandia, Francia, Irlanda, Italia, Letonia, Lituania, Luxemburgo, Países Bajos, Rumania, Eslovaquia y Suecia.
La sucursal polaca recibirá financiación para instalar o sustituir 740 puntos de recarga con una potencia de 250 kW en República Checa, Grecia, Croacia, Hungría, Polonia y Eslovenia. Mientras no se descarta que para ambos casos, Tesla destine los recursos a actualizaciones del Supercharger V4, que ofrece una potencia de 350 kW.
Tesla celebró recientemente su conector individual número 10.000 en la UE y cuenta con 875 estaciones en total, siendo Alemania con 143 puntos la que más tiene, seguida por Francia, Reino Unido, Noruega, Suecia, Italia, España, Países Bajos, Austria y Suiza.
UE hacia un transporte más sostenible
La Unión Europea apuesta por abandonar las emisiones de carbono para el año 2050, y es por ello que en el marco del Pacto Verde Europeo ha adoptado todo un conjunto de normas destinadas a hacer la vida más fácil a los conductores de vehículos eléctricos; exigiendo que a partir de 2025 sean instaladas estaciones de carga rápida de al menos 150 kW cada 60 kilómetros, a lo largo de los principales corredores de transporte del bloque.
Y aunque un gran porcentaje de esta financiación fue destinado para una sola empresa, la decisión de la UE parece lógica y se alinea con la postura de otras compañías automotrices, incluidas Ford, GM, Volvo y Mercedes; las cuales anunciaron que optarán por incorporar el puerto de carga estándar norteamericano (NACS) utilizado por Tesla, e incluso llegaron a acuerdos para usar sus supercargadores.
La UE también le dio luz verde a otros 24 proyectos dedicados a puntos de carga de vehículos eléctricos, pero varios relacionados con estaciones de hidrógeno para vehículos pesados y otros tipos de vehículos. La comisaria europea de Transportes, Adina Vălean, aseguró que “las numerosas solicitudes de financiación AFIF recibidas subrayan el interés de la industria del transporte en seguir adelante con el cambio hacia un transporte más sostenible, en las carreteras, en el cielo y en el mar”.
Mientras, sostuvo que su “inversión de 352 millones de euros se traducirá en aproximadamente 12.000 puntos de recarga, 18 estaciones de repostaje de hidrógeno y la electrificación de puertos y aeropuertos, incluido el puerto de Róterdam y 37 aeropuertos españoles”.