Mundial femenino 2023: chips, cámaras y más novedades tecnólogicas del torneo

La Copa del Mundo Femenina tendrá tres novedades tecnológicas que ayudarán a los árbitros a juzgar lo que suceda en los estadios de Australia y Nueva Zelanda entre el 20 de julio y el 20 de agosto.

Estas innovaciones se unirán al sistema de videoarbitraje (VAR), que será el pilar tras haber sido usado en el pasado Mundial femenino en 2019 y en Qatar 2022 para situaciones puntuales de los encuentros.

El fuera de lugar será uno de los aspectos más beneficiados con estas innovaciones, ya que se ha convertido en una de las reglas más controversiales en el fútbol por la alta precisión que se debe tener al momento de juzgarlo.

Este sistema, conocido como AVAR, ha estado en desarrollo en los últimos años en la FIFA y la Copa del Mundo femenina será el primer gran evento que la tendrá para ayudarle a los árbitros a encontrar situaciones de fuera de juego más rápido.

Para detectar esta infracción, en todos los estadios del torneo se instalaron 12 cámaras de seguimiento óptico, que estarán sincronizadas y siguiendo el balón y 29 puntos de datos en cada jugadora, 50 veces por segundo, calculando su posición exacta en la cancha.

Con esta información, el sistema será capaz de determinar un fuera de juego, evaluando la posición de las extremidades y partes del cuerpo de las futbolistas, para enviar la información a los árbitros y avisar de una potencial infracción.

A estas cámaras se le añade un sensor de medición inercial dentro del balón, que envía datos a los jueces 500 veces por segundo, ayudando a que la detección del fuera de juego sea más precisa ante la velocidad con la que se disputa cada partido.

Ya con los datos proporcionados automáticamente desde el AVAR y con la detección de una infracción, el VAR comunica la decisión con la jueza que está dentro del terreno de juego. Posteriormente, se crea una animación 3D para ofrecer una explicación gráfica de la situación.

Usando un modelo similar, con cámaras y un chip dentro del balón. En el Mundial se implementará una tecnología para detectar con claridad si el balón pasó en su totalidad la línea de gol en situaciones en las que hay dudas.

Este sistema se diferencia del ojo de halcón que utiliza en otros deportes, siendo más avanzado el implementado en el fútbol, al detectar automáticamente los goles sin interferir en el desarrollo del juego y dando la información en un segundo al árbitro.

Hasta ahora, cuando una jueza se dirigía al VAR a verificar una situación de juego, tenía una conversación con sus asistentes y tras llegar a una decisión final, hacía el gesto que indicaba la infracción y el partido continuaba.

Para este Mundial habrá una pequeña modificación en esta última parte. A través de los parlantes de cada uno de los estadios, las árbitras deberán comunicar y explicar la decisión que están tomando para que todos los presentes, hinchas, jugadores, cuerpo técnico, prensa y demás, sepan qué es lo que está pasando y por qué hay o no una infracción.

Si bien este concepto se toma de otros deportes, en el fútbol era algo que los hinchas venían exigiendo desde la llegada del VAR para comprender qué era lo que llevaba a los árbitros a decidirse en cada situación de juego.