El arte se ha visto amenazado por la inteligencia artificial, o por lo menos así lo ven algunos profesionales. La tecnología ha permitido revivir artistas icónicos como Michael Jackson gracias al desarrollo de algoritmos capaces de imitar sus voces. Además, escritores y cineastas han creado obras literarias y cinematográficas completas en cuestión de horas.
Por lo tanto, algunas opiniones dejan ver que la competencia ya no proviene de otro artista, sino de las creaciones tecnológicas que van generando incertidumbre frente al rumbo de la misma.
Cine y animación
Rafatoon, cuyo nombre real es Rafael Pérez, es un director de cine enfocado en animación e ilustrador, ha colaborado con marcas internacionales y artistas como Dua Lipa y Sia.
Él se muestra asombrado por la rápida evolución de la inteligencia artificial y las herramientas que se están desarrollando en todo el mundo, especialmente las producciones que se realizan completamente con IA.
En la industria del cine y la animación, según Rafatoon, la IA ha optimizando el tiempo. Aunque reconoce que la confianza en los creativos y su estilo único sigue siendo esencial ya que, la IA no puede reemplazar el sello personal y la estética visual.
“La IA llegará a un punto en el que incluso Hollywood o algún otro director realizará una película extraordinaria que podría ganar un Oscar utilizando esta tecnología, porque, inevitablemente, para allá vamos. Pero puede pasar algo y es que otros directores lo adopten y se vuelva una vaina así como una herramienta de uso generalizado que podría restarle valor a ciertos aspectos del proceso creativo”, señala.
Al referirse a este tipo de premiaciones afirmó que llegaran “propuestas visuales cinematográficas sorprendentes, con historias impactantes creadas por jóvenes talentosos que dominan este software” y que por ello no se debe hacer una exclusión, sino por el contrario, propone que se establezca una categoría específica para películas creadas con IA.
“Aunque esto podría ser lógico, es importante distinguir entre las películas generadas por inteligencia artificial y aquellas que son producto del talento humano, ya que son procesos creativos completamente diferentes”, explica.
Literatura
María del Mar Ramón, cofundadora de la organización no gubernamental argentina Red de Mujeres, cocreadora del colectivo feminista colombiano Las Viejas Verdes y del proyecto internacional youtuber Beach Camp, además de escritora, expresó su perspectiva en relación a la traducción literaria y poética.
Según ella, este proceso valora el factor humano y el sello personal.
Aunque la IA puede acelerar dicha labor, la escritora destaca la importancia del trabajo artesanal y estético de los escritores, así como su influencia personal en los textos argumentando que la literatura con sus aspectos artísticos y poéticos, va más allá de la narración de una historia y no puede ser sustituida por algoritmos.
En este sentido, plantea un ejemplo relacionado con la televisión. “En las plataformas hay numerosas series que parecen escritas de forma apresurada, hay un montón de factores que son a los que le apuntamos, a los que yo como escritora apuntó y es a conmover a alguien a partir de la palabra”, señala.
“Ese proceso es musical, poético, ficcional, narrativo y convergen muchísimos otros factores que una mera historia que tiene un inicio, nudo y desenlace. Yo no estoy compitiendo ni por la velocidad, ni por la cantidad de obras. Esa clase de cosas a mí no me no me afectan en absoluto porque no estoy para hacer libros en masa e ingresar a un sistema todavía más capitalista y más voraz”, agrega.
La discusión sobre los derechos de autor en relación a los algoritmos y el entrenamiento de la IA plantea interrogantes legales interesantes, según María del Mar. Ella destaca que cada entrenamiento de algoritmo requiere la curaduría de una persona, lo cual “añade un elemento relevante a este debate”.
Actuación
Fernando (El Flaco) Solórzano, reconocido por su destacada trayectoria en el teatro, la televisión y el cine, ha sido aclamado como uno de los actores más respetados de Colombia.
Su talento le ha permitido participar en exitosas series, telenovelas y películas como La reina del sur, El cartel de los sapos y El Rey, obteniendo numerosos reconocimientos por su habilidad actoral. Además de su labor como actor, Solórzano ha incursionado en la dirección teatral y la producción.
En relación a su percepción sobre la IA y las tecnologías disruptivas, Solórzano reconoce su poder como herramientas utilizadas en diversos sectores, incluido el ámbito artístico. Sin embargo, destaca que su rápida evolución plantea desafíos éticos y regulatorios, especialmente en lo que respecta al reemplazo de trabajadores humanos por sistemas automatizados.
El actor argumenta que su principal preocupación radica en la posibilidad de que la IA genere desempleo y deshumanización en el campo actoral y audiovisual. Si bien se podrían reducir costos, también se limitaría la utilidad de los seres humanos en estas áreas.
“Que qué es lo que se presume que puede ocurrir, que ya no vamos a ser explotados, sino que vamos a ser inútiles, inservibles para el sistema. Entonces si yo tengo un software y me puede crear una historia con diez personajes y si esos personajes pueden trabajar 24 horas, no necesitan sindicato, no necesitan primas, no se enferman, no necesitan una cantidad de cosas en los costos de producción o van a ser menores y en estas economías neoliberales capitalistas, donde hay que ganar mucho dinero, pues las guías van a caer de perlas en todos los aspectos”, señala.
En ese sentido, dice que se necesita de regulaciones éticas a nivel global para abordar estos riesgos y garantizar un equilibrio entre la tecnología y la humanidad. Además, menciona la disminución de costos en el doblaje de voces debido a la IA, lo que podría afectar la industria y los profesionales dedicados a esta labor.
“Yo sé que me voy a morir actuando en los escenarios o frente a una cámara, pero si tuviera digamos 25 años y estuviera empezando mi carrera, ahora con esta globalización que traen las plataformas mucho más, comenzaría a preocuparme políticamente”, afirmó.
También destaca la importancia de la ética en la academia y reflexiona sobre el impacto de la tecnología en la sociedad y el medio ambiente. Por último, menciona los desafíos y oportunidades que la IA presenta para los actores e insiste en la necesidad de una regulación ética global para abordar los cambios que se avecinan en el ámbito audiovisual.
Música
Daniel Acosta, vocalista de la banda colombiana Telebit, abordó los retos que la IA presenta en el ámbito musical, específicamente en la creación de canciones generadas por IA, las cuales ya demuestran la capacidad de replicar la voz humana.
Acosta señaló que, en un principio, surgió una preocupación en la comunidad artística debido al temor de que esto reemplace muchas de las tareas realizadas por seres humanos. No obstante, en su opinión, la IA se percibe como una herramienta integrada en el entorno artístico, y “los artistas deben aprender a utilizarla de manera efectiva”, argumenta.
“Al igual que lo que fueron las cámaras en un principio, un poco lo que pasaba con los celulares cuando empezaron a tener cada vez mejor cámara, todas las personas tuvieron acceso a tener buenas fotos y eso no hizo que desaparecieran los fotógrafos”, argumenta.
En ese caso, señala que la IA tiene un potencial increíble que seguirá evolucionando, lo que ampliará los horizontes y límites artísticos y que por eso su uso en las profesiones artísticas, como las artes visuales y el canto, es inevitable y crucial para adaptarse a las nuevas tecnologías.
“Como en el caso de la transición de las cámaras análogas a las digitales, es necesario adaptarse a la evolución tecnológica y aprender a utilizar las herramientas disponibles para seguir avanzando en el arte”, concluye.
Finalmente, todos los entrevistados coincidieron en la importancia de que el gobierno implemente una regulación consciente y efectiva, sobre todo en el ámbito educativo y particularmente en Latinoamérica, donde se anticipa que la incorporación de la IA transforme la enseñanza, genere nuevas carreras y aborde problemáticas como la detección de plagio y la adaptación de metodologías para aprovechar las tecnologías emergentes.