El Vaticano se sumó al esfuerzo que están haciendo otros gobiernos y organizaciones privadas para regular el uso de la inteligencia artificial. La Santa Sede publicó un manual de ética sobre el uso de esta tecnología, en medio de su auge en diferentes sectores de la sociedad.
El documento que dieron a conocer se llama: “Ética en la era de las tecnologías disruptivas: una hoja de ruta operativa”, fue publicado por el Instituto de Tecnología, Ética y Cultura (ITEC), una organización que es resultado de una colaboración entre el Papa Francisco y el Centro Markkula de Ética Aplicada de la Universidad de Santa Clara.
El manual consta de siete secciones que abordan diversas áreas de preocupación en relación con la IA. Con hasta 46 pasos detallados, el Vaticano insta a las organizaciones a implementar medidas adecuadas para proteger los datos médicos, financieros y personales de los usuarios, y hace un llamado a los actores clave de la industria a “no recopilar más datos de los necesarios”.
“Este manual ofrece a las organizaciones un plan estratégico para mejorar las prácticas de gestión ética, capacitándolas para navegar el complejo panorama de tecnologías disruptivas como AI, aprendizaje automático, encriptación, seguimiento y otros, manteniendo sólidos estándares éticos”, se menciona en el documento.
El padre Brendan McGuire, párroco de la iglesia de St. Simon en Los Altos y asesor del ITEC, afirmó en una entrevista para Gizmodo que la creación de este organismo y la publicación del manual son la culminación de los intereses de la Iglesia en el campo de la tecnología.
Además, destacó que el Papa Francisco siempre ha tenido una visión amplia del mundo y de la humanidad, reconociendo el valor de la tecnología, pero también la necesidad de abordar preguntas más profundas y desafíos éticos asociados con el desarrollo de la IA.
Dentro de los valores que buscan promover en este documento están “la transparencia, explicabilidad, respeto por la dignidad y los derechos humanos”. Así mismo, piden que los principales actores tengan cuidado con la información de datos médicos, financieros y personales de los usuarios.
El padre McGuire reveló que ejecutivos de empresas tecnológicas de Silicon Valley han acudido a él en busca de ayuda y orientación, reconociendo que hay muchas incertidumbres en el horizonte y que no están preparados para enfrentar los desafíos éticos y sociales que plantea la IA.
Por eso, con esta iniciativa del Vaticano busca reunir a líderes empresariales, académicos y gubernamentales de todo el mundo para fomentar una reflexión más profunda sobre el impacto de la tecnología en la humanidad.
Más organizaciones buscando la regulación de la IA
La recomendación del Vaticano se produce en un momento en que varias entidades y gobiernos también están buscando regular la IA. Tanto Estados Unidos como la Unión Europea están trabajando en conjunto para crear un código voluntario de conducta que promueva la responsabilidad y minimice los riesgos asociados con esta tecnología.
Un ejemplo fue lo hecho en abril de 2021, cuando la Comisión Europea propuso la Ley de Inteligencia Artificial (AI Act) con el objetivo de establecer un marco normativo común para controlar el uso de estos modelos en esa región.
Lo mismo han hecho organizaciones privadas, como lo hecho por Elon Musk y el cofundador de Apple, quienes firmaron una petición para regular el desarrollo de esta tecnología para conocer los peligros y riesgos que se pueden generar.
Y ahora las pautas éticas presentadas por el Vaticano son un llamado a la reflexión y una invitación a la industria de la tecnología a considerar cuidadosamente el impacto de sus avances. Teniendo en cuenta que la IA ya está impactando la vida diaria de las personas y la estabilidad de ciertos empleos.