A partir de células animales crearon los primeros filetes de pescado con impresora 3D

La compañía israelí busca reducir la sobrepesca y las prácticas acuícolas insostenibles

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Empresa crea los primeros filetes
Empresa crea los primeros filetes de pescado con impresora 3D

La tecnología parece ser un nuevo aliado del medio ambiente. En búsqueda de reducir el impacto de la industria agropecuaria y pesquera, la empresa israelí, Steakholder Foods, anunció que se unió con la compañía Umami Meats (Singapur) para elaborar filetes de pescado creados a partir de células animales cultivadas en laboratorios.

De acuerdo con la página oficial de la compañía, investigadores de Umami Meats, una startup de carne basada en células con sede en Singapur, desarrollaron el primer pescado del mundo cultivado impreso en 3D, utilizando células híbridas. La bioimpresora 3D, utilizada para crear el pez, es una máquina especializada que produce tejidos y órganos que emplean células vivas.

Según lo explican, la bioimpresora 3D utilizada para crear el pez es una máquina especializada que puede producir tejidos y órganos utilizando células vivas. La impresora coloca capas de células, al igual que una impresora 3D tradicional coloca capas de plástico, hasta que se crea una pieza de tejido completamente formada.

En ese sentido, indican que a diferencia de las impresoras 3D tradicionales, que usan plástico o metal, las bioimpresoras 3D usan una variedad de biomateriales, que incluyen proteínas, polisacáridos y otros compuestos orgánicos, para crear tejido vivo. Este proceso de creación de tejido vivo se conoce como bioimpresión y está revolucionando la tecnología alimentaria, ya que ofrece una vía prometedora para el desarrollo de bistecs o pescados personalizados.

El pescador David Goethel clasifica
El pescador David Goethel clasifica el bacalao y el eglefino mientras pesca en la costa de New Hampshire, el 23 de abril de 2016. El eglefino, una especie de marisco básico objetivo de los pescadores de la costa este durante siglos, está experimentando sobrepesca y se están produciendo cambios para evitar que la población de peces del colapso, dijeron los administradores federales de pesca. El eglefino es uno de los pescados comestibles más populares de la costa este, y se usa comúnmente en pescado y papas fritas y otros platos populares de mariscos de Nueva Inglaterra (Foto AP/Robert F. Bukaty, archivo)

Si bien la industria pesquera es un sector vital que juega un papel crucial en la economía del mundo, la compañía entiende que la sobrepesca y las prácticas acuícolas insostenibles han provocado daños ambientales significativos y el agotamiento de las poblaciones de peces, insistiendo así que con la introducción de la tecnología de bioimpresión 3D ha comenzado una nueva era en la producción sostenible de productos del mar.

“El proceso de cultivo de peces tiene varias ventajas sobre los métodos de pesca tradicionales. En primer lugar, elimina la necesidad de la pesca salvaje, que puede ser insostenible y dañina para el medio ambiente. En segundo lugar, permite un control más preciso sobre el producto final, lo que da como resultado un pescado consistente y de alta calidad en todo momento”, señala Steakholder Foods.

Además, los peces impresos en 3D tienen implicaciones para el bienestar animal. Recalcan que los métodos de pesca tradicionales pueden ser crueles para los peces, y que el uso de la tecnología de bioimpresión 3D podría eliminar este problema. El proceso de cultivo de peces con tecnología de bioimpresión 3D es humano y elimina la necesidad de pescar en la naturaleza.

Agregan entonces que la sobrepesca y las prácticas acuícolas insostenibles han provocado daños ambientales significativos y el agotamiento de las poblaciones de peces. Con la bioimpresión 3D, los peces se pueden cultivar en un entorno controlado con un impacto mínimo en el medio ambiente. A medida que la tecnología continúa evolucionando, es probable que se vean formas más sostenibles e innovadoras de producir alimentos para la creciente población mundial.

Del mismo modo son enfáticos en precisar que el pescado impreso en 3D también es más sostenible que los métodos tradicionales de acuicultura, que requieren grandes cantidades de agua y alimento. Con la bioimpresión 3D, los peces se pueden cultivar en un entorno controlado con un desperdicio mínimo. La tecnología también tiene el potencial de crear opciones de productos del mar más sostenibles para los consumidores y abordar la escasez de alimentos en áreas donde la pesca tradicional no es posible.

A pesar de que la introducción del primer pez cultivado impreso en 3D del mundo es un avance emocionante en la industria pesquera, sigue siendo una fantasía lejana, ya que el costo de las bioimpresoras 3D sigue siendo muy alto y el proceso de cultivo de peces a esta escala aún se está perfeccionando.

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