Así como la máquina vapor en el siglo XVIII generó una serie de cambios que derivaron en la Revolución Industrial, con los consecuentes cambios en la organización social, laboral y económica a nivel mundial; hoy se habla de una cuarta revolución que está avanzando de la mano de la tecnología de la información y la inteligencia artificial. Y ya está produciendo grandes modificaciones en la rutina diaria, el manejo del tiempo y, sobre todo, en el ámbito laboral
La automatización de procesos crece a pasos agigantados y se siente en todas las industrias. El fundador de Alibaba, Jack Ma, en su reciente visita al país anticipó que este proceso de transformación se acentuará y que "las computadoras se quedarán con muchos puestos". Incluso llegó a decir que en unos años probablemente los robots también reemplacen a los CEO.
¿Será entonces el comienzo de una gran crisis de empleo? ¿Cómo se deben afrontar estos cambios que vienen? Sobre este tema se centró el encuentro Transformación digital: el futuro del empleo que organizó la Cámara de la Industria Argentina del Software (CESSI), el jueves, en el Hotel Sheraton.
Lino Barañao, ministro de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva destacó la importancia de educar para el futuro. En este sentido remarcó que hay que propiciar la creatividad y que los jóvenes deben saber hacer preguntas y no esperar tener todas las respuestas. Pensar fuera de la caja debería ser la norma.
Apenas el 43% de los estudiantes termina la secundaria en tiempo y forma, según datos de la Unesco. La deserción se da, entre otras cuestiones, por la desigualdad y la pobreza. Pero aún cuando se lograra retener a los niños en las escuelas, no sería suficiente. Hay que entender que se deben dar cambios profundos en el paradigma de enseñanza.
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El sistema fordiano que replica la lógica fabril, donde se busca tener alumnos quietos, mirando al frente y repitiendo información ya no sirve. Es una educación que no prepara a los estudiantes para los desafíos actuales donde el eje está puesto en la innovación, la flexibilidad y la capacidad de resolver problemas.
"Hay que lograr una sociedad más integrada de la mano de la tecnología.Hay que viralizar el conocimiento a través de la tecnología, tener una estrategia integradora para que la gente se sienta incluida y que no haya desnutrición digital", subrayó Aníbal Carmona, Presidente de CESSI, en diálogo con Infobae.
"Ya no podemos tener a gente haciendo trabajos rutinarios. El que está en un call center o haciendo cualquier otra tarea repetitiva, va a ser reemplazado por una máquina, y eso se debe alertar. No se trata de demonizar al la transformación digital, sino de comprender el nuevo paradigma y prepararnos para los desafíos que se vienen", remarcó.
Por su parte, Sebastián Divinsky, fundador y CEO de EducacionIT, dijo que el éxito en las empresas se basa en sus activos intangibles, como ser la creatividad, la innovación, el diseño y la actitud. Los activos físicos en comparación, van perdiendo relevancia. Hoy lo que importa son los recursos valiosos. En base a esto el nuevo desafío de las empresas es conseguir y retener el talento.
La clave, entonces, es desarrollar el talento, es decir fomentar aquellas capacidades que no son reemplazables y que se consideran esenciales. Todos coinciden que el rasgo hoy más valorado es la creatividad porque es un aspecto que las máquinas hoy no puede generar. También se valora la capacidad de liderazgo y de poder resolver problemas.
Carmona remarcó que si bien todas las carreras vinculadas con las matemáticas, ingenierías y sistemas son las que más van a crecer, también hay otras disciplinas que no se verán alcanzadas, al menos hasta ahora, por la automatización.
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"Un peluquero está salvado porque su trabajo no es rutinario. El futuro es para las habilidades vinculadas con la innovación y esto incluye a la moda, el diseño, la construcción, la salud, las energías renovables y los asuntos legales internacionales", analizó.
También dijo que es necesario romper con ciertos mitos como el de creer que la programación es algo muy complejo o limitado. "La programación genera creatividad porque cada situación propicia una nueva alternativa, se trabaja en la innovación que consiste en ver cómo se combinan nuevas elementos para generar una nueva síntesis".
Por último, el director del CESSI, hizo hincapié en que para tener una Argentina digitalmente desarrollada de aquí a 20 años hay que "mantener políticas a largo plazo, no destruyendo lo que hizo el anterior gobierno, sino manteniendo aquellas conquistas -que son de la gente y no de los gobiernos- que sirven mejorar el bienestar general".
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