Después de un cáncer volvió al ballet gracias a una “pierna robótica” y vende conejos de tela con audífonos o prótesis
Se llama Noelia Martínez, tiene 29 años y vive en la Ciudad de Buenos Aires. Hasta 2017 se dedicaba a la danza de manera profesional, se coronaba como subcampeona en una competencia en Estados unidos, pero la vida le impuso un reto, enfrentarse a un cáncer de mama y algo inesperado: dificultades para movilizar una pierna. Una órtesis electrónica le permitió volver a bailar y su habilidad para las manualidades la llevaron por un camino solidario