De viajar cuatro horas para entrenar y conseguir una beca universitaria para seguir jugando al tenis a brillar en los Panamericanos y llegar a la Selección
A los 25 años, Martina Capurro atraviesa el mejor momento de su carrera, en la que tuvo que apelar a la creatividad para continuar en el mundo del deporte: “No nos alcanzaba con lo que ganaban mis padres, las tarjetas de crédito quedaban al límite”