Los espeluznantes crímenes y la nueva vida del adolescente que descuartizó a toda su familia con un sable samurái
El 1° de abril de 2000, España se vio sacudida por uno de los crímenes más espeluznantes de su historia. José Rabadán, un amable y educado joven de 16 años, se despertó a la mañana, tomó el sable que le había regalado su padre y lo mató, luego descuartizó a su madre y finalmente acuchilló a su hermana, una nena con síndrome de Down. Lo llamaron “el asesino de la katana”